Chávez: “Aquí estoy en el epicentro de mi amor más grande. Amor con amor se paga” (+ Video)

Optimista con la recuperación de su salud, el presidente venezolano Hugo Chávez abrazó hoy a su pueblo, víspera del bicentenario de la nación bolivariana, tras arribar esta madrugada al país, procedente de La Habana.

En la Mesa Redonda de la televisión  y la radio cubanas se expusieron este lunes momentos de la cálida acogida que dirigentes y el pueblo  venezolano  tributaron a Chávez, quien fue sometido a dos intervenciones quirúrgicas en Cuba, donde permaneció cerca de un mes y sostuvo entrevistas con Fidel Castro, líder de la Revolución, y el presidente Raúl Castro.

El moderador Randy Alonso leyó reflexiones de Fidel Castro tituladas: Una declaración brillante y valiente, publicadas hoy en medios de prensa cubanos y extranjeros, en las que  refiere circunstancias en las que Chávez fue atendido por médicos  en Cuba y analiza otros  aspectos relacionados con la salud  del mandatario y el mensaje de este, emitido el 30 de junio.

Para la periodista Bárbara Betancourt, la oposición en Venezuela fue cogida “fuera de base” con el arribo de Chávez a su país, quien desde su llegada conversó con funcionarios y amigos, prometió que cumplirá la disciplina que exige su recuperación, y afirmó que asistirá a los festejos por el bicentenario de la independencia del país.

Afirmó que la presencia en Venezuela de Chávez es un gran estímulo en la celebración del bicentenario, con la asistencia de cancilleres de naciones latinoamericanas y caribeñas, y calificó de trascendental la próxima constitución de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

La periodista Arleen Rodríguez Derivet comentó las campañas diversionistas de la oposición venezolana y de  prensa de diversos países, que intentan insuflar desconfianza, aprovechando  las dificultades de salud afrontadas por Chávez y afirmó que esas acciones están inspiradas en odio.

Detalles de la intervención de 35 minutos de Chávez, en la tarde del lunes, desde el Balcón del Pueblo, en el Palacio de Miraflores, fueron reseñados por agencias de prensa y ofrecidos en los finales de la Mesa Redonda.

Ante millares de venezolanos que abarrotaron los alrededores del local, el presidente Chávez entonó un himno, coreado por los asistentes, vitoreó a la revolución, al pueblo venezolano, a la unidad latinoamericana y caribeña, a Fidel, Cuba  y  la vida.

“Se ha iniciado el retorno”, dijo el mandatario, y reiteró su agradecimiento personal por las manifestaciones de amor que ha recibido desde muchos lugares del mundo.

Dijo que debe estar sometido a un estricto control médico y afirmó: “esta nueva batalla también la ganaremos juntos”. Refirió una comunicación telefónica del presidente Rafael Correa de Ecuador, quien le recordó palabras de Simón Bolívar en la plaza de San Jacinto en 1812, día del terremoto.

Aseveró Chávez: Si la naturaleza se opone lucharemos contra ella y la haremos que nos obedezca. Esta batalla también la ganaremos por la vida, por la patria, por la Revolución, y alerto que solo comienzan a remontar la cuesta para vencer el mal en su cuerpo, siguiendo un plan científico, y afirmó la certeza de vencer las dificultades.

Dio gracias a Dios, al Manto de la Virgen, invocado por su madre, y las madres de Venezuela, a los espíritus de las sabanas, invocados por Florentino Coronado cuando enfrentaba al mismo demonio.

Agradeció a la vida, a Fidel Castro, quien, dijo, ha sido prácticamente el jefe de la legión de médicos cubanos y venezolanos dedicados a la batalla.

Citó Chávez palabras  bíblicas,  dijo que esta es la hora de la  independencia definitiva de la patria venezolana, del pueblo, y afirmó que no podría faltar a la fiesta del bicentenario.

Con gran emoción recordó  que la segunda operación a la que lo sometieron fue  el 20 de junio, y el 24 de ese mes, Día de Carabobo y del Ejército, él se encontraba aun en terapia intensiva, pero vio la televisión, afirmó, y a seguidas elogió el desempeño del gobierno venezolano y la gestión del vicepresidente ejecutivo Elías Jaua.

El Presidente explicó que debe seguir un estricto control médico para su plena recuperación. “Así como superamos la primera etapa igual lo haremos con la segunda, la tercera, la cuarta y las que vengan, las venceremos, las superaremos”.

Agregó que “estoy sometido y debo estar sometido durante un tiempo a un estricto control médico científico. Ustedes saben las razones. Esta nueva batalla también la ganaremos y la ganaremos juntos. Por la vida, por la Patria, por la Revolución”.

“Yo sé que ustedes lo comprenden porque son los primeros en acompañarme para la victoria definitiva. Viviremos y venceremos todas estas dificultades”, aseguró.

Mostrando el Cristo que mostró el 14 de abril de 2002, cuando regresó al Palacio de Miraflores después de un intento de golpe de Estado, Chávez enfatizó: “Este Cristo es el mismo que mostré el 14 de abril, de aquel retorno. Lo levanto de nuevo, ¡Cristo con nosotros! ¿Quién contra nosotros? ¡El pueblo con nosotros! ¿Quién contra nosotros?”.

El pueblo le coreó a Chávez que descanse. Pidió dos minutos más para hablar y dijo que había vuelto a ser cadete de primer año, levantándose a las cinco de la mañana a mirar el sol y comenzar la jornada de trabajo.

El presidente Chávez invitó al país a festejar los 200 años de la independencia de Venezuela, que se conmemoran este martes 5 de julio. “Mañana es 5 de julio: ¡viva la República Bolivariana, la hija de Bolívar! Mañana es día de júbilo, desde ya está encendida la pasión patria, todo el fuego sagrado de esta Caracas y de esta Venezuela heroica”

“Esta es la hora de la vida y de la independencia definitiva de la Patria venezolana, es la hora del pueblo venezolano, y yo, hijo de este pueblo, no podía faltar a la fiesta bicentenaria de la vida de la patria en cuerpo, alma y espíritu”.

También expresó: “Aquí estoy en el epicentro de mi amor más grande. Amor con amor se paga”.

“Un saludo y mi agradecimiento personal —señaló— por tanto apoyo y manifestaciones de amor, no sólo desde Venezuela, sino desde muchos otros lugares del mundo”.

“Doy gracias a José Gregorio Hernández, a la magia del pueblo, a las oraciones del pueblo, a los médicos, a la ciencia médica, a la vida, a Fidel Castro, que ha sido prácticamente el jefe médico, de la legión de médicos venezolanos y cubanos que desde el primer día se dedicaron con esmero.

Reiteró las gracias a todos, los vítores  a Venezuela, a la revolución socialista  y a la vida, y se despidió diciendo: ¡Hasta la victoria siempre!

(Con información de la AIN / Prensa Presidencial)