El equilibrio del mundo según cuatro pensadores de Nuestra América

Por Juana Carrasco Martín, especial para la Mesa Redonda

Fotos de  Roberto Garaicoa

José Martí aspiraba a que el mundo fuese el templo hermoso en que reinara la paz, pero no es así y sobre esa dicotomía de la guerra y la paz, hablaron cuatro de los más destacados pensadores de Nuestra América, los Premios José Martí de la Unesco Pablo González Casanova, Atilio Borón y Frei Betto, y el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.

Están en La Habana, Cuba, porque en conferencias magistrales contribuyeron a un debate colectivo de ideas en la Tercera Conferencia Internacional por el Equilibrio del Mundo, que sesionó del 28 al 30 de enero, coincidiendo con los 160 años del natalicio del Héroe Nacional cubano José Martí, el hombre que vio no solo el camino para Cuba en aquel siglo XIX, sino que avizoró con tal inteligencia y ética que su decir y hacer tiene total vigencia para la América Nuestra en este siglo XXI.

La Mesa Redonda que dirige el periodista Randy Alonso convocó el jueves 31 a estos cuatro pensadores nuestroamericanos para seguir intercambiando sobre los múltiples retos y también las respuestas que permitan ir construyendo el equilibrio que Martí y todos sus discípulos queremos.

Pablo González Casanova abordó el tema de las guerras, donde se resuelven los problemas de la crisis, y de los negocios que se hacen con la guerra y con las crisis. Resaltó el poder de los consorcios militares y de cómo la economía y la política de Estados Unidos está siendo dominada por el lobby de esa industria bélica.

Tan prohibido está hablar de la crisis y de esta característica que respecto a la crisis medio ambiental y el cambio climático que ocurre, intentan ocultarlos y acusaron de falsificadores a un grupo de científicos que reunidos en Gran Bretaña dijeron que era el ser humano el que estaba alterando el clima y las condiciones de la Tierra. Fueron muchos los científicos ingleses y norteamericanos que en revistas que consiguieron decir que esa visión no era cierto.

La guerra de la mentira ha llegado a un nivel sin precedentes, la tecnología de la mentira es increíble y si se habla de la era del conocimiento también estamos en la era del desconocimiento, denunció el estudioso mexicano.

¿Cuáles son los derechos humanos que se están violando en esas circunstancia?, el argentino Adolfo Pérez Esquivel comentó que cuando se habla de los de derechos humanos debe tenerse en cuenta que son integrales, no solo de los individuales, sino que están los derechos de los pueblos.

Al respecto significó que ese cambio climático se expresa en el incremento de las catástrofes naturales, cada vez más intensas y frecuentes, en el aumento de la desertificación, en la contaminación de los mares y ríos, y en el criterio de Pérez Esquivel hay que recomponer la relación del ser humano con la naturaleza, pero también hay otras escenarios como el hambre, la miseria, las armas nucleares que también deben solucionarse, y en la proliferación de las armas no afecta solo a los sectores más pobres sino a todos por igual.

Estamos en una situación que es necesario ver y encarar lo que debiera ser la democratización de las Naciones Unidas, por ejemplo, donde sigue la misma estructura que cuando fue fundada, y ahí está el veto de Estados Unidos poniendo en riesgo el equilibrio mundial, porque actúa con su privilegio al veto a su conveniencia, como es el caso de Israel que nunca es condenado.

La paz no se regala es una conquista de los pueblos, y de la conciencia, y dio algunos elementos que alteran las relaciones mundiales.

África podría desarrollarse con las riquezas que tiene y las relaciones de explotación no se lo permiten.

El 85 por ciento de la población mundial se va a concentrar en este siglo en las ciudades y la mayoría de esa población en las periferias, lo que acrecentará los múltiples problemas actuales.

Podrían producirse los alimentos que se necesitan dados por las estadísticas, los informes sobre la situación tecnológica y políticamente, pero no existe la voluntad de superar el hambre en el mundo, sentenció.

El teólogo brasileño Frei Betto considera que la ética y la moral derivaba de las religiones y la gente tenía la conciencia del pecado, de la transgresión, y hoy estamos en un mundo desacralizado, no se tiene preocupación sobre el pecado. Vivimos hoy un vacío ético en general, en todo el mundo.

Sócrates tuvo la intuición de que del Olimpo griego no podía sacar ninguna lección ética y moral. Pero ahí está el camino tenemos que buscar una ética , y cuando hay un sentido de la vida, ahí hay una ética y existen los grupos y los pueblos que tienen un sentido de la vida.

El mercado y la ética son antónimos, el mercado quiere crear consumistas, y «sus valores» son si tengo este auto, esta casa, esta tarjeta de crédito, voy a ser feliz. Estamos en un vacio ético por falta de instituciones productores de sentido de la vida y hay que cresar esas instituciones.

Todo drogadicto descubrió que en su interior está el sentido, una nueva conciencia, pero eligió la puerta del absurdo. Reiteró que necesitamos instituciones productoras de sentido.

El filósofo argentino Atilio Borón dice que esos centros de poder están conscientes de la crisis del mundo, pero están dispuestos a mantener el status quo, donde las estratégicas de guerra predominan sobre la diplomático.

Hace unas décadas el Departamento de Estado trazaba la estratégica y el Pentágono vería como la ponía en práctica, ahora es a la inversa, decide el Pentágono.

Son muy conscientes de su propia decadencia, pero cuando uno mira sus textos del Pentágono, de la CIA, del Departamento de Estado, hacen tres categorías de países: los aliados más débiles, los amigos vacilantes y los enemigos más poderosos, ese es el diagnóstico actual y dicen, tenemos que prepararnos para una guerra más prolongada y el único ámbito que le queda es el militar.

Hoy, Estados Unidos tiene el 50 por ciento del gasto militar mundial, y una formidable maquinaria guerrera , en la que las cifras reales están por encima del billón de dólares (un millón de millones de dólares), porque son conscientes de las dificultades que tienen ahora para dominar el mundo.

Estados Unidos ha fortalecido las relaciones militares a través de pactos y en el caso de la zona, luego de la Revolución cubana lo ha intensificado y hoy en día en la región tiene 76 bases militares.

Randy Alonso les recuerda que la aspiración de Martí es el de una América concertada y Adolfo Pérez Esquivel considera que es muy esperanzadora la situación en un sentido, pero muy contradictoria en otro, porque están las instituciones nuevas de concertación que surgen en la región, pero a la vez recuerda los golpes de Estado en Honduras y Paraguay y algunos otros conflictos que todavía existen entre varias naciones.

Martí lo decía claramente los pueblos deben unirse para enfrentar los desafíos de su época y de nuestra época y es lo que debemos hacer, y hay cosas que nos parecían imposibles y se están dando, como ahora el reconocimiento a Cuba, que acaba de asumir la presidencia de la Celac

Los acontecimientos que se han dasdo en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Brasil, Argentina, Uruguay… van generando otro marco de apoyos regionales como Unasur, el Mercosur y ese es el camino.

El caso de las conversaciones entre el Gobierno de Colombia y las FARC-EP, esta en esas posibilidades, aunque Pérez Esquivel se confesó al respecto: «Yo soy un pesimista, esperanzado en el proceso de Colombia», porque dijo que ha intervenido en muchas comisiones con ese propósito de lograr la paz, pero considera que no es solo un problema entre esas partes sentadas en la mesa de diálogo, porque está el pueblo, que no puede ser espectador solamente, sino partícipe,y debe establecerse la credibilidad de las partes desde un alto el fuego.

Es esperanzador el proceso colombiano en busca de la paz porque Cuba abrió sus puertas, sus brazos para este proceso, como también están Venezuela, Chile y Noruega.

Asume algo muy importante en el camino, cuando considera que es fundamental la memoria histórica. No hay pueblo sin memoria, hay quienes ocultan la memoria, pero hay quienes olvidan y si se pierde la memoria se desaparece como pueblo, agrega Pérez Esquivel, un pueblo necesita de identidad y de valores, de una alternancia, y uno lo ve en los pueblos originarios que a pesar de los muchos dominadores, sobrevivieron porque hay un sentido de vida, como dijo Frei Betto.

Creo que estamos en un momento muy particular de Nuestra América como para seguir profundizando y unirnos frente a los desafíos de la situación mundial, las crisis económicas y la crisis general, pero también está la falta de perspectiva, y ejemplifica, si vemos rápidamente lo que está pasando, el caso de la primavera árabe está siendo transofmrada en el infierno árabe.

Atilio menciono las bases militares, la reactivación de la IV flota, la triple frontera, hay que estar alertas y activos en Nuestra América, los pueblos dejaron de ser espectadores y se han convertido en protagonistas, en constructores de su propia historia.

Al respecto, Frei betto consideró que cada vez más el pueblo asume su protagonismo, en América Latina pasaron por tres estadíos: por las dictaduras miliares que fueron rechazadas; después llegaron los gobiernos mesiánicos neoliberales como en Brasil, Chile, Perú, Venezuela, y también una decepción tremenda, y ahora entran los gobiernos progrseistas y con ellos las esperanzas de los más pobres.

América Latina independizándose de la presencia indebida de Estados Unidos y de Canadá y ahora Raúl Castro como presidente de la Celac hablan de estos tiempos en que ningún pueblo de América Latina acepta la intromisión de Estados Unidos en sus asuntos

Para Frei Betto hay cuatro grandes prioridades: combatir la desigualdad; es un lujo hablar de derechos humanos cuando los derechos que les falta a muchos son los derechos animales, los zoológicos, el derecho de comer; fortalecer la integración continental; fortalecer la cooperación, ahí está el caso de Haití, y ahí tenemos que pensar en solidaridad.

Son los elementos que necesitamos para acelerar el proceso, puntualizó y dijo que se sentía el sano orgullo de ser latinoamericanos y caribeños porque estamos creando algunos mecanismos frente a la crisis.

Yo propongo que Cuba trate de clonar a Martí, dijo Frei Betto, porque es darnos un pensamiento que aúna a toda una nación, un paradigma inteligente, ético, que hace una falta tremenda cuando en las leyes del capitalismo todo se concentra en el mercado.

Atilio Borón ve a la Celac como un espacio en el que se puede lograr una concertación, aunque consideró que no podemos negar que la América Latina tiene una especie de fisura, y recorre el área de los países del Pacífico desde México hastas Chile, con la excepción de Ecuador, Nicaragua, porque para el Pacifico, Estados Unidos tiene un modelo y proyecto muy diferente al que tienen Cuba y los países bolivarianos y los regímenes progresistas de Brasil, Argentina y Uruguay.

Estados Unidos ha dado en llamarla la alianza del Pacífico para con métodos supuestamente democráticos, tolerantes y muy bien intencionados hacer esa fisura.

Para Cuba, ser presidenta de la Celac es un gran desafio, y tenemos que ayudarla los países de gobiernos progresistas a que la Celac pase de ser un foro anual a ser una organización , un organismo, que tiene un equipo de gente que está dedicado a programar políticas en materia de preservar los recursos naturales, por ejemplo, que es muy rico este continente, y emplearlos en beneficio de los pueblos.

Como es el caso de la Amazonía, eso no lo puede enfrentar Brasil solo, el problema de la Amazonia, tiene que estar ahí la Celac, las bases militares algunas operando, qué se va a hacer con la IV Flota, cuando las hipótesis de conflicto que mantenían los ejércitos del continente es la de la Guerra Fría con China, Rusia, Irán y otros como enemigos.

Los ejércitos no tienen una hipótesis de conflicto que considere a Estados Unidos como la potencia de mayor probabilidad a lanzarse por los recursos de nuestra región.

Como se ve, a Cuba le tocan siempre los momentos más difíciles, pero tiene ese pensamiento martiano para enfrentarlos.

Pablo González Casanova habló de la política de despojo que no puede ignorarse y que viene de Wall Street, de la City, de París o de Madrid.

Estamos en una lucha por la paz en la región y habló en este sentido del talento político de Chávez para que no hubiera guerra entre Venezuela y Colombia, cuando en otras regiones esos enfrentamientos ocurren, como es el caso de África y sirven a la política de recolonización, a una acumulación depredadora que no tiene precedente.

A Estados Unidos le interesa esa política de división, de desestabilización, ellos tienen una magnífica tecnología, p ero también defectos morales entre ellos que consideran que un gran político es el que sabe tomar decisiones peligrosas.

En esta situación tan grave y critica, América Latina tiene una lógica, esto es muy importante, porque nuestros países quieren la paz y la gente quiere la paz.

Los cuatro pensadores latinoamericanos hablaron de Martí, y uno dijo resueltamente Martí no es cubano, es de nosotros todos, es del mundo entero, como Cuba es una revolución mundial, no solo del tercer mundo ni de Latinoamérica.

Cuba es la primera revolución nuestra porque es la de Martí, no la última marxista leninista como quisieron presentarla. Martí que descubrió la virtud como una de las fuerzas esenciales.

Frei Betto dice que hay intelectuales y pensadores científicos que están al lado de la maldad, que escucha a Beethoven y crean los drones.

Martí es un ejemplo de intelectual que la cabeza piensa donde nosotros tenemos los pies, fue a Estados Unidos, a México, a España pero tenía los pies en la realidad cubana.

Tenemos en esta mesa tres intelectuales, dijo Frei Betto —quien podría haberse contado en ese cuarteto— que podrían estar al servicio del imperialismo, pero están al servicio de los pueblos como lo estuvo Martí, el primer compromiso de un intelectual es estar cada vez más cerca de los pueblos.

Yo me pregunto dónde están esos marxistas leninistas europeos y de otros lugares, dónde están esa gente, acaso luchando por esa Europa hegemonizada que dice ahora ya no hay socialismo, ya no tenemos compromiso con los pobres, ahora todos son burgueses.

Pero esta la otra intelectualidad que siguió junto a su pueblo, formando una concepción ideológica, con la razón y la sensibilidad, la capacidad de compasión, de sentir el dolor de otro, como decía Martíi, es estar junto a los corazones que sufren. Los intelectuales tienen medios de expresión, y deben mantener vivo y activo el pensamiento crítico —como se llamaba una revista que tuvieron ustedes en Cuba— un pensamiento crítico a favor de los más pobres.

Atilio Borón, ante el poder manipulador, hace un diagnóstico claro de la estructura de los medios de comunicación a nivel mundial, los estudios dicen que el grado de concentración de los medios de comunicación de masas es mayor aun que el del sistema financiero mundial, y su credibilidad es muy baja, salvo en Estados Unidos.

Hay que desmonopolizar esos medios, como lo está intentando Argentina y ha tropezado con todos los obstáculos de quienes están en contra de esa democratización de los medios. Hay que acabar con la estructura tan concentrada, enfatiza el escritor argentino.

Y es muy instructivo, afirma y recuerda, lo que se hizo en Estados Unidos a finales del siglo XIX con la Standard Oil, que en un momento fue tan poderosa que atentaba contra la competencia y la misma justicia norteamericana logró que fuera dividida en 37 partes. Sería interesante que con el grupo Globo en Brasil y Clarín en Argentina se hiciera un desmembramiento al estilo de los que dividieron la Standard Oil para facilitar la competencia porque era contrario a los intereses nacionales y a favor de la comunidad.

La propiedad privada es inviolable, esa es la defensa que esgrimen, pero hay que hacer las 37 particiones para que los medios puedan tener la capacidad de tener, de dar diferentes opiniones.

Ahí está el caso del periódico El país, que pasaba por ser uno de los más serios en la prensa mundial.

Pablo González Casanova resalta la impronta de la Red en Defensa de la Humanidad, y hacia dónde seguir llevando el trabajo. Consideró que en relación con la Celac, el presidente Lula dijo algo que se debe tomar muy en serio, con un sentido práctico, que no debemos dejar a los encuentros políticos esta unión, sino que hay que establecerla en la educación, en la cultura, en el campo de la información y en todo lo posible, en los medios de comunicación y esto es muy coherente y está vinculado a lo que Martí significa y que Frei Betto señaló hace un momento, el vinculo entre la palabra y la acción.

Estamos tan acostumbrado a separar la palabra y la acción que cuando oímos un discurso estamos pensando en lo que la persona dice y lo que hace.

En el campo educativo podemos hacer ya en la Celac un proyecto, una universidad latinoamericana a la que podríamos llamar Universidad José Martí de Nuestra America y no vamos a ir a fascinarnos con las nuevas tecnologías, ni a encerrarnos en el claustro universitario, tenemos que ir a la sierra, al llano a la costa, hacer pequeños grupos de lectura, de discusión, de dialogo, de debate y lograr educación para muchos y de muy alto nivel, una demanda que esta insatisfecha y hace la juventud hoy.

Dentro de ese esfuerzos de la Celac, la creación de una red que nos permita ahora comunicarnos, porque para que un diálogo se lleve a cabo hace falta que las parres se escuchen y no terminemos en un diálogo de sordos, dijo Pérez Esquivel, quien recordó la propuesta que ha hecho el presidente Raúl a Estados Unidos, la disposición al diálogo pero en el plano de la igualdad y el respeto.

Y si hay un dialogo individual, pero también está el colectivo, que tiene mayor fuerza. Recientemente en Chile en la Celac fue al diálogo con la Unión Europea y fue un dialogo colectivo. A qué se puede llegar, eso es otra probabilidad.

América Latina está mostrando unidad y en otra posición de abrir ese diálogo, puso un ejemplo concreto, la salida de Bolivia del mar, y este es un dialogo que tiene que ver con el continente, la forma que se gana la integración y la unidad es resolver los conflictos internos que tenemos. Tenemos que aprender a resolver los conflictos en nuestro continente.

La situación cultural y educativa, desde ahí se puede construir la nueva posilidad, José Martí lo decía, primero tenemos que abrirnos. Se están dando cosas maravillosas en América Latina, hoy recordaba los estudiantes de mayo del 68, que decían «seamos realistas, construyamos lo imposible», y hoy estamos construyendo nuevos caminos con diversos interlocutores.

El monopolio de Estados Unidos, luego de la desintegración de la Unión Soviética se convirtió en el eje y esto está siendo rechazado, cada vez está siendo desplazado de ese eje porque hay otros interlocutores, por ejemplo China, que es el gran acreedor de la deuda externa de Estados Unidos.

Y Estados Unidos quiere fortalecer su poder militar, no para dialogar, sino para imponer. En el caso del bloqueo a Cuba es incomprensible que todas las resoluciones de Naciones Unidas, 188 países votan contra el bloqueo a Cuba y tres países a favor: Estados Unidos, Israel y Palau. Qué está demostrando esto, que el capitalismo no es eterno, ese capitalismo caníbal que lo devora todo, incluidos aquellos que lo defendieron siempre.

Esta crisis que hoy están viviendo es una crisis también de valores, no netamente económica.

Martí hablaba del deber urgente de esta isla en la gestación universal, cómo lo ven los cuatro pensadores latinoamericanos.

Atilio Borón dice que Cuba significa la posibilidad de resistir, de sobrevivir al bloqueo y la agresión imperialista, significa que hay alternativa y que no hay que resignarse con este mundo, y no decimos de que sea Cuba el paraíso, pero en una serie de indicadores tiene avance extraordinario, es el gran impugnador del imperialismo.

Cuba comienza a cuestionar el concepto de desarrollo y subdesarrollo, dice, cuestionando lo que era el saber en ese momento, y ha sido un puntal en la lucha contra el racismo, su intervención en África y su sacrificio en África, El ejemplo de ser solidario sin ser un país rico, tiene algo de esa compasión que decía Frei Betto. América Latina necesita que Cuba siga siendo ese punto de referencia en la lucha, incluso para poblaciones que se han quedado adormecidas por los efectos del consumismo.

Pablo González Casanova asume que hay que colocar a Cuba en los caminos que se están dando en el América Latina con la creación de una nueva categoría, el Estado-pueblo, pensar que puedan juntarse tanto como se unen las palabras y los actos de que hablaba Martí, este es el aporte cubano, la sociedad misma, su cultura y su política. Nunca —aseguró— habíamos tenido un discurso político tan pedagógico como el de Fidel, que se demoraba ocho horas y es que estaba enseñando cómo se toman decisiones políticas y que riesgos comportan.

Otras dos aportaciones muy importantes, si un gobierno tiene el apoyo de su pueblo y le es fiel a su pueblo y a su palabra, no hay fuerza política, ni técnica, que pueda con esto, y no le pueden ganar a un pueblo que se junta con su gobierno y a un gobierno que se junta con su pueblo.

La otra aportación cubana: Hacer camino al andar, estar construyendo la alternativa.

Pérez Esquivel sobre la impronta de Fidel y Cubas. Fidel no hizo la revolución s olo en Cuba, abrió puertas y ventanas para que entrará la luz en otras partes del mundo.

Tenemos que saber cual es nuestra identidad y nuestros valores, saber hacia dónde se va. Hay un proverbio que dice si no sabes a dónde vas, regresa para saber de dónde vienes.

El Premio Nobel de la Paz asume que el caso de los Cinco ha trascendido las fronteras de Cuba y asegura que se asumen como propios esos hombres porque ya lo planteó Atilio, la solidaridad que Cuba a brindado, con la medicina, los educadores en esa coherencia martiana de decir y hacer y crear en la ciudadanía una nueva conciencia de la sociedad.

Dice que Fidel es uno de los grandes revolucionarios de nuestro continente y también un hombre de profunda sabiduría, y la capacidad que tiene de saber escuchar, puede estar de acuerdo o no, pero tiene esa capacidad de escuchar para profundizar para el análisis y sacar conclusiones.

Frei Betto aseguró que tenía «una identificación personal con los Cinco, porque también estuve encarcelado, mucho menos tiempo cuatro años, pero quiero proponer a Cuba socializar la traducción al español del libro de Fernando Morais», y explicó que una versión en Internet puede ir a todo los países y en cada país tratar de imprimirlo y en las presentaciones que estén los familiares, porque en Brasil, por ejemplo, hay gente que no tiene simpatía con Cuba y han asumido la causa de los Cinco.

«Por eso yo digo que el libro es la liberación simbólica de los cinco», agregó .

La batalla por Cuba es la batalla por nosotros que amamos la libertad, no podemos permitir que Cuba pierda las conquistas y que los cubanos tengan conciencia de que a 60 años del Moncada todavía ahora comienza la Revolución.