Educación Superior: un tema no agotado

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

Fotos de Roberto Garaicoa

¿A qué lógica responde que se apliquen tres pruebas de ingreso para acceder a todas las carreras universitarias? ¿Cerrarán las universidades en los municipios si tienen poca matrícula? ¿Por qué unas carreras tienen como requisito vencer pruebas de aptitud y otras no? ¿La edad es una limitante para acceder a la universidad? Estas y otras interrogantes de los seguidores del espacio de la Mesa Redonda, fueron respondidas en la edición de este martes por las máximas autoridades del Ministerio de Educación (MES), quienes ofrecieron, en dos programas precedentes, toda una panorámica de cómo llega este organismo al actual periodo lectivo.

René Sánchez, director de Ingreso y Ubicación Laboral, expresó que el proceso de ingreso a la Universidad tiene como principios rectores el rigor y la transparencia. “Hacemos tres exámenes porque las Matemáticas son necesarias para el desarrollo del pensamiento lógico, el Español es nuestra lengua, y la Historia es imprescindible para conocer nuestras raíces. En encuentros que hemos sostenido con varios estudiantes, ellos nos han expresado su gratitud por recibir esta preparación y por los aportes que les deja este esfuerzo”.

Los exámenes, dijo, permiten que se pueda acceder a cualquier carrera, y tan diversas como ingenierías o humanidades. Sobre las pruebas de aptitud, manifestó que se hizo un estudio riguroso de por qué continuar o no las pruebas de aptitud, las cuales se aplicaban a 37 carreras. Ese análisis arrojó que tenían un gran grado de subjetividad o que había que trasladar a los estudiantes a lugares distantes para hacerlas, y sobre la base de estos elementos y el hecho de que comprobamos que los estudiantes más exitosos estaban más vinculados a sus resultados en las pruebas de ingreso que a las de aptitud, decidimos reducir esa prueba, lo cual no quieren decir que sea un esquema que no se puedan variar en otro momento”.

Por otra parte, se modificó el concepto de aplicar pruebas de aptitud a los aspirantes a las carreras de ciencias básicas, por el hecho de que estos estudiantes hagan el 12 grado en la universidad.

En el curso diurno, dijo, mantenemos que la edad límite son 25 años. Por una cuestión de comportamiento etario dentro del grupo no se sobrepasa esta edad, pero esa limitante solo es para los que estudien en esta modalidad, porque en el de por encuentro no existe límite en este sentido.

René Sánchez precisó que se permite estudiar una segunda carrera, pero en la modalidad de curso por encuentro. Y entre los principios que regulan esto está que se puede hacer siempre y cuando no se desplace al que no ha estudiado ninguna carrera universitaria.

El ministro del ramo, Rodolfo Alarcón, hizo énfasis en que la prioridad máxima del MES es formar graduados integrales, no solo con conocimientos académicos profundos, sino que sean patriotas. Sobre los tipos de cursos que ofrece la Universidad Cubana, explicó que hay un curso que se llama continuidad de estudios, que surgió a principios de este siglo y que está en liquidación, ya que se cierra en el 2016. “Se mantendrán en lo adelante el curso diurno, la educación a distancia y el curso por encuentro, y esto lo haremos con la calidad y racionalidad necesaria”.

Pronunció que las 123 sedes universitarias en los municipios no se cerrarán, lo que sí se reestructuró la enseñanza. Y habló del hecho de que la baja matrícula no se puede interpretar como que no es necesario que funcione el centro, ya que este comportamiento será transitorio, y en los municipios hay que hacer docencia posgraduada, hacer trabajo extensionista, y tener un papel activo desde nuestros centros. Por ello no estamos desmontando esa gran decisión, porque la importancia de estas universidades es cada vez más pertinente”.

Respecto al fraude, el Ministro alegó que a la Universidad no puede entrar. “La comunidad universitaria cubana no permitirá que su prestigio se empañe con este lastre, que además se ha dado a nivel puntual y se le ha puesto cerco”.

Pedro Horrutinier alegó que el exceso de horas de clases fue abordado con prioridad en el plan C. “En los nuevos planes de estudio hemos reducido el número de horas de clase, a partir del concepto de que no se trata de reducir la carga docente de los estudiantes, sino que las empleen para otras formas que complementen su formación. Actualmente tenemos unas siete asignaturas por semestre”.

Sobre las flexibilizaciones que existen en este nivel de enseñanza, mencionó que a un estudiante de alto aprovechamiento puede modificársele su plan de estudio, de forma tal que pueda aprovechar más sus rendimientos. “Esta flexibilización en nuestro reglamento, reconoció, no siempre se aprovecha con el nivel requerido, lo cual impide que se hagan transformaciones a un mayor ritmo”.

Al profundizar en la calidad, argumentó que el MES tenía mecanismos para defenderla, como que cerca del 50 por ciento de las carreras que se imparten están certificadas, lo que supone un control externo que garantice la calidad; se hace un balance de los aspectos positivos y negativos cada semestre a partir de encuestas, y se tiene una visión positiva de los estudiantes de nuestros profesores; y también hemos demostrado en otros escenarios del mundo el alcance de nuestros egresados. Pero tenemos que continuar profundizando la labor educativa y continuar profundizando la formación de nuestros profesores, y lograr que nuestros colectivos de año funcionen como un sistema.

La viceministra Aurora Fernández, ante otras interrogantes de los televidentes y lectores de Cubadebate, subrayó que una vez que sale la convocatoria a la plaza de profesor titular, el docente que aspire a alcanzar esta categoría tiene que cumplir con una serie de requisitos muy rigurosos.

Sobre el financiamiento de la actividad científica, explicó que es suficiente y se irá asignando más en la misma medida en que las condiciones económicas del país mejoren. Y sobre las diversas fuentes mencionó el presupuesto del Estado, el que destina el propio MES y los proyectos internacionales, pero que aún el sistema empresarial cubano no era una de ellas, aunque existían algunos esfuerzos alrededor de este propósito.

Miriam Alpízar, viceministra del MES, explicó que la base material de estudio no incluye la bibliografía solamente, sino que incluye módulos, lápices, libretas… y otros recursos. Y en el caso particular de la bibliografía, precisó que se tienen planes anualmente para imprimir unos 80 títulos de autores universitarios y de otras propuestas de autores extranjeros. “Iniciamos este año con el 70 por ciento de las asignaturas cubiertas en copia impresa, y el 17 por ciento con materiales impresos de nuestros profesores, mientras un 13 por ciento se encuentra en soporte digital”.

René Sánchez destacó que el año anterior se graduaron 41 000 universitarios y que casi el ciento por ciento, junto con su título, recibió una ubicación de acuerdo a su perfil laboral. “Esto es un éxito que a veces no calculamos su dimensión”. Aunque apuntó que una ubicación que usted planifica seis años antes puede tener variaciones en el tiempo, y no quedar ajustada a cabalidad, pero que ello no quería decir que algún estudiante quedaba sin oferta de empleo en Cuba.