Desafíos que plantea la estructura demográfica en Cuba (I parte)

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

Fotos de Roberto Garaicoa

El 18, 7 por ciento de la población cubana peina canas. La tendencia apunta a que, en 2030, la cifra sea del 30 por ciento. Esta compleja dinámica demográfica responde a un comportamiento de país desarrollado y tiene sus causas en las políticas de bienestar social que impulsó la Revolución, sin embargo, impone no pocos desafíos para el trazado y proyección de nuevas políticas.

Ante este escenario de convivencia se tomaron varias medidas, con el propósito de revertir la baja fecundidad, que garantiza la tasa de reemplazo, y para generar una mejor atención a la población de 60 años y más.

El Doctor Juan Carlos Fraga explicó en la Mesa Redonda de este martes las lógicas de lo que en materia demográfica está pasando: “El dato principal es el envejecimiento poblacional. Y todo ello responde a las políticas sociales largas y consistentes que ha desplegado el país. Por otro lado hay una baja fecundidad, por debajo del nivel de reemplazo desde el año 1978. Y, en consecuencia, la perspectiva es que habrá menos poblaciones en edades laborales y activas. Crecerá, en cambio, la población de los viejos más viejos, es decir, los que tienen 75 años y más, sobre todo las mujeres, que tienen más esperanza de vida que los hombres. De hecho, el último Censo dio que existen más mujeres que hombres en Cuba”.

Advirtió que el envejecimiento no se puede ver de forma negativa. “Es el resultado del desarrollo. Pero eso trae otros desafíos, como las estructuras por edades. A finales de la década que viene puede ser que se mueran más personas de las que nacen. Ya eso pasa actualmente en La Habana, donde  más del 36 por ciento de la población es de 60 años”.

Añadió que en el 40 por ciento de los hogares hay un adulto mayor. Por lo que saldrán más personas de la edad laboral que las que ingresan. También desde el punto de vista de la salud pública va a haber más personas mayores que atender, y ya hoy el 83 por ciento de las personas que mueren en Cuba tienen más de 60 años. “Para revertir esto, hay que lograr que aumenten las tasas de fecundidad, que será algo a lo que tendremos que darle seguimiento”.

El Consejo de Ministros ha adoptado un grupo de medidas. Marta Elena Feitó dijo que todas van encaminadas a implementar el Lineamiento 144, que aborda la necesidad de prestar una especial atención a estrategias para enfrentar el envejecimiento población. Estas decisiones tienen sus antecedentes en las adoptadas de 2006 a 2011, cuando se modificó Ley de Seguridad Social y otro grupo de acciones en el sector de la Salud.

Se creó para esta ocasión una comisión a la que se le subordinaron 11 subgrupos de trabajo. Y las medidas están proyectadas a tres objetivos fundamentales: estimular la fecundidad para lograr el nivel de reemplazo, atender las crecientes necesidades de la población de 60 años y más, y favorecer el empleo mayoritario de las personas que están aptas para trabajar.

Así se aprobaron 9 principios de políticas para estimular el nacimiento de 2 o más hijos, porque en el patrón de fecundidad se demuestra que la mujer tiene el primer hijo, pero que lo complejo es que se decida por dos o más. También hay acciones encaminadas a que el adulto mayor tenga una mayor calidad de vida, que le permita autonomía y que los familiares no tengan que quedarse en la casa y abandonar el empleo para cuidarlo. Y se han concebido políticas fiscales y de precios para estimular la fecundidad y la atención de los adultos mayores. Paralelamente, además, se ha previsto que investigadores de varios organismos midan el impacto de estas decisiones, para corregir el cronograma y el plan de propuestas en caso de que no se logren los resultados previstos.

El Doctor Alfredo González se detuvo en que ante el escenario de elevados niveles de envejecimiento y bajos de fecundidad, el Ministerio de Salud Pública encauza estrategias para estimular los nacimientos, “lo que vamos a garantizar en la misma medida en que logremos una maternidad segura, sobre todo en la mujer mayor de 30 años. Igualmente debemos incidir en que las parejas no posterguen la edad para procrear y en que, si la edad óptima es entre 25 y 35 años, también sea posible tenerlos con más de 35 años con el control de los riesgos. Esto no quiere decir que  recomendamos que las mujeres de más de 40 años lo hagan, pero tampoco es algo difícil de lograr en nuestras instituciones.

“De la misma manera debemos promover los estilos y buenos hábitos de vida, que nos permiten evitar enfermedades que sean un riesgo para la concepción; intensificar la educación de la población para una sexualidad responsable, porque las enfermedades de transmisión sexual provocan infertilidad;  y también tenemos que trabajar para evitar los embarazos en la adolescencia y en reducir los abortos convencionales y las regulaciones menstruales, de hecho, se trabaja en la ampliación del aborto medicamentoso, y hoy el 40 por ciento los estamos haciendo por esta vía.

“Se está incrementando la atención de las parejas de tipo infértiles: hoy hay unas 200 mil que afrontan esta realidad. Para ellos tenemos 168 consultas y 4 centros especializados para la reproducción asistida, uno en Holguín, otro en Cienfuegos, otro en el hospital González Coro y en el Ameijeiras. Y hemos introducido un grupo de técnicas de avanzada para corregir determinadas afecciones en el hombre, con lo que se lograron más de mil embarazos en 2014”.

Como parte de las políticas, el Doctor mencionó el control de las enfermedades en las personas con más de 60 años y su satisfactoria atención. “De las 251 casas de abuelos con que contamos, logramos la reparación de 75 y en el año 2015 debemos seguir mejorándolas. Unos 13 mil círculos de abuelos trabajan con Cultura y con el Inder para incrementar su vitalidad. Y se ha trabajado al mismo tiempo con los hogares de ancianos, en los prevemos un incremento de más de 800 capacidades. Pensamos ampliar, además, la atención de las discapacidades auditivas y los trastornos visuales en la tercera edad, así como previmos disponer de más sillas de ruedas y de otros accesorios para la atención de los abuelos. El 60 por ciento de las personas que ingresan hoy en los hospitales son mayores de 60 años, y debemos darle la atención requerida. Por lo que ha constituido para nosotros un reto el conocimiento del envejecimiento de los tejidos y los órganos”.

La Doctora Enia Rosa Torres, del Ministerio de Educación, argumentó que en su organismo se han centrado en el desarrollo de una cultura gerontológica como contenido de la formación ciudadana. “Desde las primeras edades tenemos que formar nuevos conceptos relacionados con el envejecimiento, y entenderlo como parte de la evolución del hombre. No podemos hacerle rechazo a esta etapa, sino que hay que prepararse para una vejez con calidad de vida. Hay que apostar a tener un adulto mayor sano y es una responsabilidad de nuestra Educación que los niños y jóvenes aprendan a comunicarse y a convivir en hogares donde las familias son multigeneracionales, donde debe predominar el amor y el respeto hacia los adultos mayores.

“Tenemos dosificado cómo le vamos a dar respuesta a las necesidades. Se ha priorizado la creación de círculos infantiles donde hoy no existen, como es el caso de cinco municipios. Y se ha priorizado el mantenimiento, de cara al 2025, de los 923 círculos infantiles y la reparación capital de 77. En 2014 se remozaron, como parte de esta política, 435 círculos y 5 recibieron el beneficio de las inversiones. También vamos a necesitar de un mayor número de educadores, por ello los planes de ingreso se adecuan a estas necesidades y contamos con más de 5 mil jóvenes que se forman en Educación Preescolar”.

Subrayó que una medida que ya está implementada es darles prioridad en el otorgamiento de círculos y de seminternado a las familias que tienen dos niños o más. Y se está estudiando la posibilidad de reducir el pago cuando la familia tiene dos niños y más.

Como otra de las medidas mencionó la responsabilidad del Mined en la capacitación de las personas que se dediquen a la atención de niños y de personas discapacitadas. “Estamos en condiciones para poder asistirlos junto al Ministerio de Salud Pública y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social”.