Cambia el mapa político en España (+ Fotos y Video)

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

Fotos: Roberto Garaicoa

El Partido Popular (PP), luego del fuerte revés sufrido en las recientes elecciones regionales y municipales, podría verse desplazado del poder en varias zonas del país si fructifican los pactos entre las fuerzas de izquierda.

Pese a ser el más votado el domingo, el PP obtiene su peor resultado en 20 años en unas elecciones en las que irrumpieron con fuerza nuevas formaciones como Podemos y Ciudadanos.

La experta Elsa Claro advirtió que  los números ofrecen una dicotomía: el PP fue el más votado, pero en esta ocasión perdieron más de 2 millones de seguidores en las urnas. “Por eso estos resultados los consideran una gran golpiza. Y no se trata solo de la cantidad de votos menos, sino de que en realidad el Partido Popular pierde el nivel de dominio sobre el país que tuvo con la mayoría en el Parlamento y en las alcaldías, lo que le facilitaba un control territorial pleno. Fue la formación política que tuvo más puestos físicos concretos en el Parlamento y en diversas autonomías, y todo eso lo perdió”.

Antes, dijo, si querían implantar una ley no tenían oponentes suficientes, eran mayorías los que los apoyaban. “Ahora les será más difícil gobernar, no tienen mayoría y el PSOE subió su puntaje. También hay dos nuevas formaciones políticas: Ciudadanos y Podemos, a los que hay que escuchar porque tienen un mayor peso. Podemos, por ejemplo, tiene representantes en todos los parlamentos, en escala regional y nacional”.

En España, después de este domingo, cambió el mapa político. Los resultados demuestran que el 64,93 por ciento de los 35 millones de electores convocados votó no solo por alcaldes y concejales, sino por la oportunidad a nuevas formaciones políticas.

El llamado bipartidismo –a base del PP y del Partido Socialista Obrero Español (PSOE)- registró un profundo deterioro al lograr alrededor del 50 por ciento de los votos, muy por debajo del 65,3 por ciento alcanzado hace cuatro años.

Los populares ganaron los comicios municipales con el 26,92 por ciento de los votos y los socialistas fueron segundos con el 25,12, pero ambos retrocedieron en relación con las elecciones de hace cuatro años.

En tanto, el emergente Ciudadanos, de Albert Rivera, se perfiló como la tercera fuerza política, desbancando de ese puesto a Izquierda Unida (IU), al conseguir el 6,55 por ciento de los votos.

El PP, sostuvo Elsa Claro, tiene que gobernar a partir de ahora de otra manera. “Con estos resultados, añadió la analista, quedó desnaturalizado el bipartidismo. El surgimiento de estos dos nuevos grupos hace que la clase política reflexione hacia dónde vamos”.

La prensa no ha podido ignorar el asunto. El País observó que “sería engañoso interpretar lo sucedido como la revolución que algunos anunciaban, pero sería igualmente un error restar trascendencia al fuerte mensaje de cambio que estos resultados suponen”.

Sobre las elecciones generales que se avecinan, comentó que las municipales son la antesala de lo que vendrá. “A pesar de que Podemos no haya debutado como lista de candidato a estas elecciones, sí lo va a hacer en las generales. Ya en estas se estuvo midiendo y pulsó qué piensa la gente, cuáles son las reacciones”.

No podemos olvidar, aseguró, que Podemos surgió de un movimiento social, el de los Indignados. Nació de las protestas sociales en 2014, cuando la austeridad económica y la política tradicional que, a su juicio, representan PP y el PSOE, quebrantaron al país. “Y hasta aquí han sido consecuentes con las líneas políticas de defender a la ciudadanía.  Es obvio que el gobierno debe representar a las mayorías y no solo a los sectores ricos”.

A partir de esto que ha ocurrido, puntualizó Elsa Claro, tanto los de la derecha como los de la mal llamada izquierda tienen que sacar cuentas para ver las brechas que pueden sacar. También las formaciones emergentes de Podemos y Ciudadanos tienen que hacer sus propias lecturas.

Ahora la redefinición del mapa político español está a expensas de pactos y alianzas, tras la dispersión del voto dado el retroceso de los partidos tradicionales y el avance de fuerzas emergentes.

Respecto a los días que vendrán, comentó que si Podemos se alía al PSOE se puede desgastar y perder su base social. La situación peor la tiene el PP, pero es el más votado. Y estos resultados responden a grandes complejidades a escala de sociedad. Por ejemplo, hay muchas personas que aunque están en desacuerdo con el Gobierno, prefieren la estabilidad. “La psicología social es tremenda. De lo contrario tú no te explicarías que el PP haya sido el más votado, aunque las circunstancias les hayan sido más desfavorables”.

Según Elsa Claro, los escándalos de corrupción y los recortes parecen haber seguido pesando más en el ánimo de los electores en un país con todavía un 23,7 por ciento de desempleo, que los mensajes de recuperación económica lanzados por los conservadores.

“Se dice que España está creciendo, que está saliendo de la crisis. Rajoy viene con esa tónica. Unos se lo creen y otros no. Pero qué dicen las estadísticas oficiales: a pesar de todas las cosas, y las medidas de ajustes, hay más deuda en todas las autonomías y mayor desempleo. Y aunque ha habido momentos en estos años en los que ha bajado ligeramente el paro laboral, estos puestos se han estado rellenando con ofertas de labor precarias, sin prestaciones de tipo social. Eso pasa en toda Europa, pero en el caso de España más”, reflexionó.

La parte final de la Mesa Redonda se detuvo en las huellas que el llamado Estado Islámico sigue dejando en el Oriente Medio, para lo que contó con el examen detenido de la Doctora María Elena Álvarez.