Jornada contra la Homofobia y la Transfobia en Cuba: todo el mundo gana

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

Fotos: Roberto Garaycoa

Gana la sociedad cubana, el proyecto revolucionario, el socialismo, las personas… Todo el mundo gana, expresó la Doctora Mariela Castro Espín, directora del Cenesex, al valorar la estela que deja la 9na. Jornada contra la Homofobia y la Transfobia, que acaba de concluir en nuestro país.

En esta ocasión el tema central repitió el de 2015: Por espacios laborales libres de homofobia y transfobia porque, aclaró, “nos hemos propuesto hacer campañas que no respondan a la estructura clásica, ya que comprobamos que un año no basta para reconocer un problema y hacer consciencia sobre este para transformarlo. Hemos decidido, además, tratar la misma temática, porque entre los escenarios más vulnerables a esta problemática en nuestro país los afectados han reconocido a la familia y el centro laboral”.

Ponderó en su intervención el valor de la alianza establecida con la CTC. “Desde que nos unimos observamos que hay una mayor claridad y visibilidad de que tenemos problemas que hay que atender, y es algo muy importante el hecho de que la CTC sea consciente de su papel sindical para atender esto”.

Sobre el curso de lo logrado, mencionó la realidad de que hay muchos más profesionales participando en esta labor, para evitar que se genere exclusión social por la identidad de género y la orientación sexual. “Siempre será valioso llamar la atención y reflexionar sobre esto, para buscar colectivamente, como una gran nación, políticas que permitan que cambien las consciencias homofóbicas que existen en el mundo actual”.

PROBLEMA PARA EL DESARROLLO SOSTENIBLE

Myrta Kaulard, coordinadora-presidenta del Sistema de Naciones Unidas en Cuba, especificó que hay estudios que demuestran las altas implicaciones que ha tenido la discriminación por identidad de género y orientación sexual en el mundo. “Las tasas de suicidio de personas LGTBI, de hecho, se reducen si disminuyen las expresiones homofóbicas y excluyentes”.

Alegó sobre la experiencia de Cuba, que han ganado fuerza las acciones transformativas para un cambio irreversible en las actitudes y en la concepción de rechazo a la exclusión. Hizo referencia, además, a que la Isla puede dar lecciones en cuanto al tratamiento del tema, ya que de forma sistémica ha aumentado la participación, y está siendo cada día más estructura.

“Observamos que varias partes de la sociedad manifiestan una sensibilidad creciente a favor de esta temática. Y se han dado pasos para la reducción de la discriminación y para la creación de un entorno más incluyente”, aseveró.

En su intervención, hizo alusión a que la discriminación es un problema para el desarrollo sostenible, porque no permite utilizar todo el potencial humano de un país.

EXPERIENCIAS

Como parte de las acciones desplegadas en esta 9na. Jornada, Manuel Vázquez Seijido, jefe del grupo de asesoría jurídica del Cenesex, se detuvo en la experiencia del foro digital que tuvo lugar en el periódico Trabajadores. “Fue un espacio de participación muy importante, que posibilitó que personas no vinculadas a esta realidad lanzaran sus interrogantes”.

Hizo igualmente referencia a que el espacio de diálogo virtual demostró que ya este no es un tema que provocamos solo desde el Cenesex o desde los grupos de activistas de los derechos sexuales, sino que la sociedad se ocupa y preocupa también por estos asuntos.

“Estuvo presente, además, el enfoque de los derechos humanos, lo que confirma que se trata de una cuestión que ya no es vista desde la curiosidad o el desconocimiento, y que su comprensión rebasa el marco de la comunidad LGTBI.

“En Cuba estamos hablando de una discusión que no es privativa de quienes padecen la discriminación, porque se han ensanchado las fronteras del debate entre quienes visibilizan la problemática. A lo que se suma que en cuanto se amplía el espectro de diálogo se complejiza el análisis porque hay más puntos de vista”.

Manuel Vázquez Seijido aportó que el tema del Código de Trabajo fue relevante, pero no desde una perspectiva general. “Los internautas preguntaron si había obstáculo legal en los instrumentos jurídicos que formalizan la relación laboral. Hubo coincidencia en que no se trata de sustraer derechos para adjudicárselos a otros, sino de tener normas jurídicas que amplíen la protección de derecho, lo reconozca y lo garantice”.

Especificó que en el Código de Familia el principio es el de igualdad y no discriminación. “La mayoría de las discriminaciones no se basan en lo dispuesto en la norma, sino en la aplicación que se deriva de la norma, en la interpretación de la norma por operadores de esta”.

Por otra parte, Mariela Castro reconoció el aporte de muchos creadores en estas jornadas. “Se han unido muchas personas en función de nuestra estrategia comunicativa. Nosotros solo hacemos mínimas sugerencias para que lo que se construya no contribuya al estigma. Así sucedió con el programa Vivir del cuento, una experiencia que nos resultó muy grata, además, el humor es mucho más difícil como dimensión artística, porque al ser agudo hay que tener una capacidad tremenda para no reforzar los mismos estereotipos y comunicar con mucha gracia para provocar la risa y la reflexión”.

También compartió que como parte del programa hicieron presentaciones de transformismo. “Quiero aclarar que esto no se trata de enaltecer la moda gay, porque no son escenarios de consumo, sino de presentar al transformismo como recurso artístico, lo que no tiene que llevar a la ridiculización del sujeto transformista”.

Sobre la coincidencia de la fecha un 17 de mayo con el Día del Campesinado Cubano, agregó que en este mismo día se sacó a la homosexualidad del Manual de enfermedades mentales, y dejó de considerarse una patología. “En lo primero que pensé cuando observé la coincidencia, fue en qué reacción tendría nuestra población del campo, y preví que tendríamos que hacer un fuerte trabajo ideológico y educativo. Pero lo mejor de todo es que tenemos dos situaciones de justicia social. Esta convergencia demuestra que en el contexto del mismo proceso revolucionario hay otros aspectos que defender en el campo de la justicia y la equidad social, que merecen que se celebren con sus características, con sus mensajes… No es una competencia de hechos históricos, sino una coincidencia de fecha que marca acontecimientos diferentes, pero igual de jusos”.

Hizo saber, también, de su felicidad con que en el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba se presentó sin contradicciones el respeto a la orientación sexual y a la identidad de género, lo que presupone metas de vanguardia.