Trump, el vecino más peligroso (+ Video)

Por Aniel Santiesteban García

Fotos de Roberto Garaicoa

Emisión: 11/04/2018

La Cumbre de los Pueblos ha resultado un éxito como espacio de encuentro de varios grupos sociales de la región, no así es visto el futuro casi palpable de la cercana Cumbre de las Américas 2018.

No asistir a una Cumbre que nació a su petición y que, históricamente, ha convocado, resulta el acto más reciente y cuestionado de Donald Trump, el emperador y representante de la Casa Blanca.

En el espacio de miércoles de la Mesa Redonda, bajo el título Cumbre de las Américas: el desdén del vecino formidable, comparecieron el Dr. Antonio Romero Gómez, Director de la Cátedra de Estudios del Caribe, la Dra. Ana Teresa Badía Valdés, Periodista y analista de temas internacionales y el Lic. Lázaro Barredo Medina, periodista y analista de temas internacionales, destacados investigadores que siguen actualmente el tema.

Muchos afirman ya, incluidos varios medios de prensa, que la Cumbre es un fracaso aún antes de iniciarla, acontecimientos en Lima con su expresidente marcaron el comienzo de este infeliz desarrollo.

Ana Teresa Badía Valdés coincide con sus colegas y apunta que la Cumbre de las Américas fue la confirmación del fracaso, una cita que en ediciones anteriores no arribó a una declaración final, en esta ocasión, no descarta que pase igual.

Añade que varios mandatarios han dicho que no asistirán, entre ellos el caso del Primer Ministro de Antigua y Barbuda, en solidaridad con Venezuela.

La Cumbre intenta tratar el concepto “corrupción” en un contexto complicado en la región, en el propio país, afirma Badía Valdés, donde recientemente su presidente ha renunciado por inculpaciones, con causas probadas. “No me refiero”, dice, “a los constantes ataques, sin prueba alguna, a Lula en Brasil, por ejemplo”.

“Creo que es un momento propicio para el encuentro de los pueblos, este tipo de Cumbres se inició en Quebec, 2001, donde los pueblos defendieron muy bien el futuro del área”, recuerda Ana Teresa Badía.

Esta Cumbre, apunta, sucede en un contexto en la región sumamente importante; en medio de un aparente retroceso de los gobiernos progresistas.

En síntesis, los temas de este miércoles estuvieron relacionados al rechazo a las privatizaciones en América Latina, apoyo a la causa del presidente brasileño Lula Da Silva y la necesidad de la articulación general de los pueblos.

Empezamos con Siria, apunta Lázaro Barredo Medina en el inicio de su comentario; no es ni retórica ni guerra mediática, destaca, hay un  peligro real, Trump necesita una guerra.

“Se puede jugar con la cadena, pero no con el mono”, dice. Trump ha tomado una serie de ataques y decisiones que se han dejado pasar, explica Barredo.

Sin contar otros escándalos y mentiras, Trump condiciona y subestima la Cumbre, varios expertos, agrega, habían dicho que él no creía necesario asistir, de hecho, no quiso nunca ir.

En tanto, Antonio Romero Gómez responde a la pregunta que muchos analistas se han hecho, incluso, mucho antes de avizorar la Cumbre: ¿cuál era el gancho económico de la Cumbre?

¿Qué ofrecería EE.UU en esta Cumbre? Teniendo en cuenta lo que afirmaba Lázaro Barredo y la perspectiva de política de Donald Trump hacia el continente, Romero Gómez afirma que tenía muy poco que ofrecer.

El desdén de EE.UU. con los pueblos del área ha alcanzados niveles sin precedentes con la administración Trump, sus líneas políticas marchan contracorriente en términos de lo que había sido un mundo globalizado y a los intereses de una amplia representación de los países de Latinoamérica y el Caribe.

La administración Obama dio pasos importantes, pero el desdén de Donald Trump ha sobrepasado límites, agrega.

Marco Rubio, el cubanoamericano integrado a la política estadounidense, ha reaccionado favorablemente ante la ausencia de Trump, apunta Barredo Medina; ha pensado que va a brillar en Lima, que va a convertir a la Cumbre de las Américas en Cumbre de EE.UU.

¿Qué va a explicar cuando llegue su turno? Explicará sobre los fondos buitres, las cárceles privadas para explotar a los migrantes, en fin, habrá que analizar, dice el analista y pregunta cuál será la actuación de los representantes Trump.

Ana Teresa Badía Valdés acotó que, sobre todo, en esta Cumbre de los Pueblos, pueden darse temas que articularán el futuro de la región.

Es oportuno mencionar que las fuerzas progresistas y de izquierda en América Latina están de vuelta, después de las imágenes y acciones en Lima, se vive un momento de reestructuración y reconfirmación, finalizó la analista.