La sanción impuesta por el COI al Comité Olímpico de Rusia de impedirle participar en los Juegos Olímpicos de Invierno 2018, por el dopaje de un número importante de sus deportistas, ha despertado disímiles reacciones.
Inmediatamente después de conocerse el anuncio del COI con el respaldo de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), el propio presidente de Rusia, Vladimir Putin, reconoció el error de los atletas sancionados ganadores de medallas en los Juegos de Invierno Sochi 2014, pero consideró la determinación de excluir a su país de la venidera edición del clásico como una decisión politizada.
A la sazón de las declaraciones del mandatario, varias preguntas salen a la luz pública debido a que uno de los argumentos esgrimidos con mayor insistencia no ha sido probado: la afirmación de que el dopaje era conocido y apoyado por el Gobierno ruso. El alegato no tuvo sustento en las conclusiones escritas por la Comisión Ejecutiva del COI.
Esta carta jugada, además de intentar magnificar la reconocida falta de los infractores, tenía también el objetivo de entorpecer la posible postulación del actual mandatario para un cuarto periodo de gobierno en las elecciones de marzo del 2018, anunciada el mismo día en que se supo la decisión del organismo internacional del deporte.
La delegación anfitriona a Sochi 2014 fue penalizada, y de las 13 medallas de oro, 11 plateadas y nueve de bronce que le concedían el primer lugar, después de comprobado el dopaje, descendieron a 9-5-8 preseas, de manera que el país ocupó finalmente el cuarto escaño en la tabla general.
En sus palabras al colectivo de trabajadores de una fábrica automotriz en el Volga, Putin afirmó que el Gobierno no orientó ganar la competencia, sino que realizó esfuerzos por organizarla con calidad, para desvirtuar la campaña que desde tiempos antes de efectuarse la lid de Sochi se esgrimía con el ánimo de sembrar la duda en torno a la capacidad de los organizadores para presentar un certamen decoroso.
Amén de la imposición del COI de que solo los atletas rusos cuyos exámenes antes de la cita del 9 al 25 de febrero en PyeongChang 2018, Sudcorea, los califiquen como libres de dopaje podrán asistir al clásico de invierno, también se decidió que en caso de que ganen medallas las recibirán bajo la bandera olímpica, y no escucharán el himno de su país en las ceremonias de premiación.
NO HABRÁ BOICOT
A la par del anuncio del COI no faltaron quienes echaron a rodar comentarios en torno al posible boicot de Rusia contra los Juegos Olímpicos de Invierno 2018, sin contar que aun cuando son fuertes las sanciones de cara a este evento, la respuesta de los afectados al permitir que sus deportistas limpios concurran a la cita, es una muestra irrefutable de respeto hacia el movimiento deportivo internacional.
La decisión del COI penaliza a Rusia como país, en lugar de solo tomar medidas frente a los tramposos comprobados. Sin embargo, para tranquilidad de los organizadores del próximo certamen, Putin anunció categóricamente que no habrá boicot a los Juegos.
Este martes, Alexandre Júkov, presidente del Comité Olímpico de Rusia, confirmó que sus deportistas sí participarán en los venideros Juegos Olímpicos de Invierno, bajo bandera neutral.
«Hay que ir a los Juegos. No ir, es rendirse», afirmó el medallista olímpico de hockey sobre hielo Ilya Kovalchuk, mientras el diario Sport Express, agregó: «Es duro aceptar estas acusaciones y castigos, pero el destino de nuestros atletas y nuestro lugar en la familia olímpica son más importantes».
LA FIFA SE MANIFIESTA
A la reducción por el dopaje en el número de competidores rusos a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 y a la posterior suspensión del país por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) para que contendiera en el Campeonato Mundial de Atletismo, del pasado agosto en Gran Bretaña, se sumaron ahora las especulaciones acerca de qué repercusión tendría el momento actual en la futura realización de la Copa Mundial de Fútbol, señalada para Rusia en junio del 2018.
Para responder, ya la FIFA ratificó en un comunicado que «la medida del COI no tiene implicaciones en el Mundial», como una muestra de confianza por cuanto la entidad universal de este deporte, para evitar problemas, llevará a cabo los controles necesarios con la colaboración del país sede del evento.
En este breve bosquejo de los acontecimientos, quisiéramos dejarles una de las afirmaciones de Putin ante aquellos trabajadores reunidos en la fábrica del Volga.
«El castigo colectivo es un concepto jurídico que no existe en ningún país del mundo… condenen solo a quienes sean culpables. Si no ha habido apoyo gubernamental, ¿por qué prohibirnos participar (en PyeongChang) con nuestros símbolos nacionales?
(Tomado de Periódico Granma)
Cubanos de distintas generación protagonizarán en la tarde de este viernes una nueva prueba del contundente rechazo del pueblo de…
Durante la última jornada de trabajo del Cuarto Periodo Ordinario de Sesiones correspondiente a la décima Legislatura de la Asamblea…
El Banco Metropolitano anunció este jueves la modificación de los horarios de atención al público durante los días de fin…
Para concretar los principios generales de organización y funcionamiento de la función pública notarial, acorde a la actualización del modelo…
El servicio aéreo de Cubana de Aviación que conecta el aeropuerto internacional José Martí en La Habana con el aeropuerto…
El Gobierno cubano aplicará modificaciones en el sistema cambiario, anunció este miércoles el Primer Ministro Manuel Marrero, en una comparecencia…