Según trascendió aquí, la gobernante habría introducido algunas enmiendas al acuerdo inicial pactado por su gobierno con el bloque europeo, y que fue rechazado de forma abrumadora por los legisladores la semana pasada.
El cambio más transcendental, especulan este lunes los analistas, estaría en el tema relacionado con la salvaguarda o ‘backstop’ acordada por Londres y Bruselas para evitar una frontera física entre Irlanda e Irlanda del Norte.
Dicha salvaguarda es rechazada por los críticos de May, por considerar que el país seguiría comprometido con la UE durante el tiempo que demore la firma de un acuerdo comercial definitivo entre ambas partes.
Según los términos acordados por el gobierno con el bloque de 27 países, el Reino Unido deberá hacer efectiva su salida el 29 de marzo próximo, a menos que el Parlamento británico llegue a un acuerdo con la UE, o Londres decida permanecer en la alianza de forma permanente.
Ante tal escenario, cobra cada vez más fuerza la posibilidad de un divorcio sin acuerdo, algo que es rechazado por los parlamentarios de la Oposición y una gran parte del empresariado local, quienes temen que esa decisión tenga un impacto negativo sobre la economía británica.
Al respecto, el líder laborista Jeremy Corbyn, para quien un Brexit sin acuerdo sería desastroso, dijo que May parece no comprender lo que está sucediendo, y quiere lanzar al país por un precipicio.
Corbyn reiteró la víspera su posición de no sentarse a negociar con el gobierno hasta tanto no se descarte la posibilidad de abandonar la UE sin un pacto previo, una exigencia que según la Primera Ministra es imposible de complacer porque va, dijo, en contra de las reglas del bloque europeo.
El gobierno no tiene potestad para descartar una salida sin acuerdo, aseveró May.
En opinion de los analistas, la única vía para cumplir con la demanda de Corbyn es que el Reino Unido renuncie al Brexit, a menos que se esté preparado para aceptar cualquier acuerdo por malo que este pueda ser para el país.
El llamado Plan B de May será sometido a votación en el Parlamento el próximo lunes 29 de enero.