Hasta el momento Abdala demostró seguridad y no se reportan efectos adversos graves, pero los que entraron en el estudio de manera voluntaria deben cuidarse del virus SARS-CoV-2 manteniendo el distanciamiento físico, el lavado frecuente de las manos y el uso del nasobuco, insistió la gerente del proyecto vacunas Covid-19 del CIGB, Miladys Limonta.
Comentó que el ensayo clínico fase III con Abdala se realizó con 48 mil ciudadanos en 10 días en Santiago de Cuba, Bayamo y Guantánamo, y lamentó que 12 personas dieran positivo al test para detectar el coronavirus luego de su inmunización.
Son tres dosis, cero, 14 y 28 días, y quien se vacune debe seguir cuidándose cumpliendo con las medidas establecidas, enfatizó la doctora en la televisión cubana
Limonta puntualizó que Abdala –que tiene un carácter neutralizador y no permite llegar a la gravedad por Coviv-19- puede ser reactivada, al igual que la vacuna de la hepatitis B.
La experta señaló que se utiliza el tiomersal en Abdala, pero teniendo en cuenta que existe un segmento de personas alérgicas serán elaboradas monodosis sin la presencia de ese aditivo.
Actualmente estamos trabajando para presentar ante las autoridades reguladoras los protocolos para utilizar Abdala en menores de 19 y cinco años de edad, adelantó la experta del CIGB.
Aclaró que las personas con comorbilidades no son incluida en el estudio clínico, a no ser que estén controlados. Tampoco reciben el inyectable los que estén consumiendo antibióticos.
Limonta precisó que una vez culminada la fase III del ensayo clínico de Abdala se realizará un análisis de la eficacia del candidato vacunal, del cual existe una satisfacción con creces en el CIGB.
(Con informacion de Prensa Latina)