Suscrito por Ramona Wadi, periodista e investigadora independiente, el informe incursiona en los últimos acontecimientos en Cuba, la implicación de Washington y la agresión que enfrenta la nación antillana.
Señaló la analista que la suposición de que la intervención militar arreglaría a Cuba sólo ilustra cómo los intereses de los grupos anticubanos de Miami están alineados con los de Estados Unidos.
La valoración precisa que mientras estallaban las protestas en la isla por la escasez de productos de primera necesidad, el bloqueo ilegal sobre Cuba, que dura décadas, dejó de formar parte de la narrativa de los principales medios de comunicación.
Mientras tanto -agregó- debido al bloqueo y a Covid19, la economía de la isla se contrajo aún más; sin embargo, el gobierno estadounidense también continuó con su financiación de los grupos antigubernamentales, solo que sus intenciones no son democráticas, a pesar de lo que difunde la propaganda dominante.
Wadi desenmascara la brújula de los gobernantes estadounidenses en su política contra el pueblo cubano, la que estuvo encaminada, entre otros objetivos, a acentuar la privación económica, provocar el hambre, la desesperación y el derrocamiento del gobierno, puntualizó. El presidente Biden no se mostró especialmente comunicativo sobre Cuba hasta ahora y construyó su política sobre los cimientos de la administración Trump y juega la carta humanitaria para fomentar el malestar político.
Si Estados Unidos no cedió en sus tácticas represivas, nada hace pensar que el pueblo cambie un estado de derecho por otro que buscó su caída, para reconstruir Cuba como el patio de recreo de Estados Unidos que recuerda los días anteriores a la revolución cubana, subraya Wadi en su aproximación.
Por su parte, Iñaki Etaio, un experto y analista español estimó que el bloqueo estadounidense tensionó las condiciones de vida de la población, avivó el malestar y el descontento entre sectores de la sociedad isleña.
Cosa distinta –puntualizó- es el intento principalmente canalizado a través de las redes sociales y que responde en no pocas ocasiones a una estrategia orquestada desde el exterior, por dirigir ese desaliento contra la Revolución.
Asimismo subrayó que quien necesita un SOS con relación a Cuba es la verdad, para muchos expertos la primera víctima de la campaña contra la isla.
(Con informacion de Prensa Latina)