Un homenaje al General de División Sergio del Valle Jiménez, médico guerrillero y Héroe de la República de Cuba, acontecerá el próximo viernes en el habanero Museo de la Revolución, en ocasión del aniversario 85 de su natalicio.

Compañeros suyos del Ejército Rebelde, de los Ministerios de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), del Interior y Salud Pública, participarán en un conversatorio sobre Del Valle Jiménez, nacido en Pogolotti, Marianao, el 15 de abril de 1927.

En la propia jornada, se inaugurará en el Museo, a las 05:00 p.m., una exposición de fotografías relacionadas con quien se incorporó en julio de 1957 al Ejército Rebelde en la Sierra Maestra y -como capitán médico- fue segundo jefe de la Columna Invasora Antonio Maceo, encabezada por Camilo Cienfuegos.

Esa Columna, junto con la de Ernesto Che Guevara, protagonizó la invasión de oriente a occidente, en cumplimiento de la estrategia trazada por el Comandante en Jefe Fidel Castro para aniquilar a la dictadura de Fulgencio Batista.

Del Valle Jiménez simultaneó esa tarea con la redacción del Diario de Campaña de aquella hazaña, documento que constituye un valioso testimonio histórico.

Tras el triunfo del primero de enero de 1959, fue ascendido a Comandante y ocupó el cargo de jefe de la Fuerza Aérea Revolucionaria; durante 1961, cuando la invasión mercenaria derrotada en Playa Girón, estaba al frente del Estado Mayor de las FAR, así como también en la llamada Crisis de Octubre, de 1962.

Cumplió, entre otras importantes responsabilidades, la de ministro del Interior, de enero de 1968 hasta marzo de 1979, y en 1976 se le ascendió al grado de general de división.

En marzo de 1979 fue designado ministro de Salud Pública, misión que desempeñó hasta enero de 1986 y posteriormente trabajó en el Consejo de Estado.

Fue miembro fundador del Partido Comunista de Cuba, integrante de su Buró Político y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Por los servicios prestados a la Patria, se le confirieron varias condecoraciones y el título honorífico de Héroe de la República de Cuba, en abril de 2001.

Se caracterizó por su honestidad, nobleza y modestia en el cumplimiento de las tareas asignadas, así como también por su fidelidad ilimitada a Fidel.

Aquejado de una enfermedad neurológica, falleció en La Habana, el 16 de noviembre de 2007.

Ese mismo día, Fidel escribió una de sus Reflexiones, en las que subraya que perdurarán las lecciones y ejemplo del destacado revolucionario.

(Con información de AIN)