Al menos 18 personas fallecieron este lunes en un campo de refugiados en Damasco (capital siria), otras 11 en el barrio de Mezze 86 y dos más en la localidad de Al Ghab (centro). El Gobierno denuncia que estos atentados obstaculizan cualquier solución pacífica al conflicto.

En Damasco (capital de Siria) al menos 18 personas fallecieron este lunes, entre ellas tres niños y cinco mujeres, luego que grupos armados atacaron con proyectiles de morteros el campo de refugiados palestinos de Al Yarmouk, así lo informó el corresponsal de teleSUR en Medio Oriente, Hisham Wannous.

Bandas armadas opositoras lanzaron el proyectil contra la calle Thalathen, del referido lugar, cuando pasa un autobús de transporte.

Según precisó un portavoz del hospital de Damasco, al centro de salud ingresaron los cuerpos de tres niños y una mujer junto a cinco heridos, uno de ellos de gravedad a causa de las heridas sufridas por la explosión.

Entre tanto, al hospital Palestino fueron trasladados otros cuerpos y cinco personas heridas a causa de la acción de los armados.

Otro hecho se registró en el barrio Mezze 86 de la capital siria donde, según reportó Hisham Wannous, la mayoría de los habitantes son partidarios del Gobierno.

“Este atentado fue cometido colocando un artefacto explosivo debajo de un carro y causó hasta el momento 11 muertos y 55 heridos además de daños materiales”, agregó el periodista.

El barrio de Mezze 86 es una de las áreas más protegidas de la ciudad por la cercanía de instalaciones gubernamentales y de seguridad, incluyendo el ministerio de Información y la Corte de Justicia.

Un tercer atentado ocurrió en la localidad de Al Ghab, en la provincia central de Homs, con un carro explosivo que causó la muerte de dos personas y heridas en otras 11.

Wannous destacó que de acuerdo con cifras no oficiales en los últimos tres días fallecieron tres mil armados, en su mayoría extranjeros que intentaban irrumpir en Damasco.

El Gobierno sirio ha denunciado que atentados como los ocurridos este lunes se llevan a cabo para obstaculizar cualquier solución pacífica al conflicto que inició en marzo de 2011.

El Ejecutivo de la nación asegura que los países que afirman apoyar la labor del enviado especial de las Naciones Unidas y la Liga Árabe, Lajdar Brahimi, especialmente los occidentales y algunos árabes, son los que promueven el terrorismo.

Por acciones de grupos opositores contra la población, es que sigue la ofensiva contra los armados en las diferentes partes de Siria, alegó el Gobierno del presidente Bashar Al Assad.

(Telesur)