El desafío de que Cuba peine canas
Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda
Fotos de Roberto Garaicoa
En Cuba, el proceso de envejecimiento poblacional experimenta un ritmo acelerado. Hoy el 18 por ciento de los cubanos poseen más de 60 años, y para 2030 esta cifra podría frisar el 30 por ciento. Los datos los ofreció la Doctora Grisell Rodríguez Gómez, en la Mesa Redonda de este viernes, que abordó el asunto desde los múltiples desafíos que implica que la Isla peine canas, incluidos los que operan a nivel de conciencia.
En opinión del premio nacional de Periodismo, José Alejandro Rodríguez, el problema no es envejecer, sino articular a la sociedad en función de esta realidad, y —en su criterio— actualmente no hay estructuras preparadas para este sector poblacional.
La Doctora Grisell aludió a que cuando una persona llega a los 60 años aún tiene mucho por hacer, aún es muy útil. Pero que hay que pensar en un diseño institucional que acompañe a los que tienen esta edad. En nuestro país, por ejemplo, se necesitan más geriátricos y menos pediátricos. Y la personas de la tercera edad necesitan un calzado especial, un vestuario, etc…
José Alejandro añadió que existen demoras en trámites que atentan contra este grupo poblacional. A veces hasta las familias son desconcideradas e insensibles con los que pertenencen a este grupo etáreo.
Grisell explicó que los conceptos de juventud y vejez son construidos, son movibles. “No es lo mismo 60 años, que 80. Son etapas con roles diferentes, y hay que aprender y enseñar en las escuelas esta temática. Hay que orientar a las personas, para que vivan en consecuencia con cada etapa, porque hoy quienes tienen 60 años poseen una esperanza de vida de 20 años más”.
El licenciado Luis Silva de Francisco, actor y humorista, comentó que a partir del personaje de Pánfilo ha tenido que visitar a personas de edad avanzada, en momentos difíciles para la familia. “El personaje hace reír, pero sobre todo permite visibilizar los conflictos de las personas de la tercera edad. El colectivo del programa Vivir del cuento ha ido a actuar al Convento de Belén y allí se aprecian condiciones de confort, donde se incluyen actividades como la gimnasia para los abuelos, se ve la energía y el mismo deseo de vivir de un joven”.
El actor sumó en su reflexión que escogió este personaje porque era una manera de salirse de los personajes comunes. “Es muy abierto, asimila cualquier tema, lo mismo da consejos, que rompe estereotipos”.
En opinión de José Alejandro Rodríguez, no se puede pensar que todos los ancianos tienen la autoestima elevada, hay algunos que son muy vulnerables económicamente y eso implica un reto para la seguridad social cubana: detectar a tiempo esos focos rojos.
La Doctora Grisell aportó que el Lineamiento 144 se refiere a la atención al tema del envejecimiento y a la dinámica demográfica cubana. “Hay comisiones que trabajan en esta línea. Es un reto, porque con el aumento de personas con más de 60 años se tensa el sistema de funcionamiento de la sociedad en materia económica y social. Se están desarrollando acciones en términos de políticas públicas para atender la situación, pero deben tomarse también iniciativas locales”.
José Alejandro Rodríguez comentó que lo fundamental es la sensibilidad de cada quien, de la familia, y darles posibilidades y comodidades a estas personas y, sobre todo, veneración y respeto.
En una entrevista concedida a este espacio, el doctor en Ortopedia Alfredo Ceballos Nieto, expuso que el propio adulto mayor tiene que saber lo que hace. “No puede ni caerse, ni dejarse caer. Debe mantener su integridad física, su fortaleza, su capacidad de controlar el equilibrio, sostenerse para no caerse, hacer ejercicios, arreglarse, peinarse, perfumarse, hacer todo lo posible a partir del conocimiento de su organismo y entender lo que vive”.
Los panelistas coincidieron en que nunca será suficiente lo que se haga para incorporarlos a lo cotidiano y en que es importante prepararse para envejecer. Y sobre todo hay que educar a las nuevas generaciones en el amor y respeto hacia los más adultos, que tienen una carga de vida y de vivencias enorme que pueden legarles.
Compañeros, me interesó sobremanera el programa de la Mesa Redonda dedicado al envejecimiento de la población, les digo que mi trabajo de tesis doctoral gira por el tema, necesito que me ayuden a contactar a los periodistas que estuvieron en el panel.
Las gracias anticipadas. Civelis
Considero importante atender algunos detalles que no son tan caros pero llega na parte de los jubilados.
1.Atencion de los centros de trabajo de dnde se jubilaron.
2,Internet algo mas barata o clubes de viejos no para cursos sino para usarla.
3.Rebajas de precios en articuls y transporte?cuando existA COMO ES EN CASI TODSO LS PAISES.
oSEA LAS BIBLIOTECAS QUE PRESTEN SERVIDCIOS SIN DIFICULTADES COMO LA DE La UH y otras.Crear mas libros interesantesa internacionales.
Saludos.
Hay muchas cosas que no son solo las casas de abuelso
La impresión de la mesa redonda sobre el Adulto Mayor, me llevo más a verlo como la persona enferma y no en la necesidad de la atención integral a la persona vieja, a mi consideración debio o se deb tratar el problema desde la arista de cómo es importante ayudar al adulto mayor a reorientar o redifinir el sentido de su vida, reincorporarce a diferentes actividades de carácter social .
Por eso les propongo volver con el tema pero que inviten por ejemplo a la Lic. Teresa Orosa de la Facultad de Psicología de la Universidad de la Habana y que preside la Cátedra de la Universidad del Adulto Mayor, que se hace en el país y como en Camaguey esta en el piso.
Convocar al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
A la CTC, qwué atención se les da alos jubilados o al menos esta orientarlo darles y que opinan los abuelos en las Calles.
Creo que esto contribuye a que la Mesa Redonda sea de verdad un espacio de reflexión y debate
Este tema como todos los que presenta la mesa es vital. Aunque mi comentario no saldrá en la mesa, deben volver sobre el tema y más dirigido a la familia.
Tengo a mi mamá postrada y desde el pasado diciembre me he tenido que dedicar a ella y aseguro que no es nada fácil y surgen muchas preguntas:
– Como aseguro el sustento de mi familia si no tengo quien me ayude con su cuidado ni tampoco ella lo acepta;
– Donde obtengo los recursos adicionales que necesito para su bienestar, manipulación y diario?
– Quien me puede asesorar si en momentos me siento desesperado, alterado, y tengo momentos en los que no hayo que hacer?
– Es difícil lidiar entre el poco dormir, las necesidades del diario, las responsabilidades familiares y laborales; mientras que veo que no se avisora una política clara gubernamental para enfrentar el envejecimiento de la población cubana.
Fué muy oportuna la carta leida, pero cuanto quedó por decir de los inventos que tenemos que hacer los que estamos en esta situación. La compañera por ejemplo pudo recibir ayuda para las necesidades que se le presentaban, no ha sido mi caso y hoy siento que me estoy postergando mi futuro profesional y no se por que tiempo, cuando en mejores condiciones estaba de aportar a la sociedad.
Por otro lado me preocupa el aseguramiento previsto para pacientes con esta situación. Mi mamá está en la base de datos desde mayo del 2012 y nos ablaron de determinados recursos de aseo, paños, etc; que llegan por esa vía, sin embargo hasta hoy una ves keroseno y en ocaiones un jabón de baño y uno de lavar.
reitero que pienso que es un tema sobre el que se debe retornar y más dirigido a la familia y perpectiv. Fue muy útil para mi esta mesa.
Muchas gracias.
Creo tan necesario una Casa de Abuelos (en su verdadero y útil concepto) como un Círculo Infantil. La ocupación que requiere un anciano a veces obliga a su / sus familiares a sacrificar una buena parte de su concentración en otras tareas, que productivas o no pueden satisfacer a un número mayor de personas por su repercusión social. Un médico, un profesor, un dirigente que no pueda pagar a otra persona para que atienda a su familiar anciano, tendrá necesariamente que interrumpir su labor y perderá concentración en la ejecución de sus tareas específicas. Con la estadística real sobre el envejecimiento de la población en Cuba, es hora de no dilatar más la creación de este tipo de centro donde el anciano entre en la mañana, reciba un cuidado adecuado, se le alimente, se atienda su salud, se garantice su aseo, se le proporcionen actividades recreativas y hasta productivas en menor escala como la confección de objetos artesanales cuya comercialización ayude a sostener las finanzas de la propia instalación y al igual que en un círculo infantil, su familiar le busque al regresar de su trabajo, es del tipo de soluciones a sus verdaderos problemas que espera el pueblo de su dirección. La apertura de una tienda en divisas para comprar lo que no viene en la libreta con un dinero que no recibe como salario o la creación de una sala de navegación pueden ser hechos muy novedosos, pero muy poco objetivos simultáneamente. Este tipo de evaluación de las causas que propician el descontento de la gente son las que debe analizar la MR y proponer sus soluciones, eso incentiva la participación de las masas en su gobierno y crea un sentido de pertenencia y una verdadera identidad como nación que a mi modesto entender se ha perdido. Muchas gracias por su atención y reciban un fuerte abrazo de Víctor Esperón
El tema del envejecimiento de la población provocó diversas reacciones, por lo que he podido apreciar en conversaciones que he tenido con colegas y amigos que conocen que trabajo el tema, así como a través de correos electrónicos.
Cuba envejece, es cierto, lo sabemos desde hace tiempo, y se sabe que seguiremos envejeciendo más, que según las estimaciones para el 2030 será casi el 30% de la población que este en esa categoría de edad o censal, o demográfica, que antes llamábamos viejos, ancianos, etc. Pero que hoy la mayoría prefiere llamarle de forma mas edulcorada: adulto mayor, tercera edad, juventud acumulada, personas de edad etc. ¿Es que será malo ser viejo, será denigrante?. Demográficamente por lo general se emplea como punto de corte la edad cronológica de 60 años, para marcar el inicio de esta etapa, aunque hay países que toman los 65 años, en Cuba, para algunos propósitos se emplea esta última. (Unos datos que consulté hace tiempo, si mal no recuerdo de la ONU, estimaban para el 2050, el 38% de ancianos para Cuba, y el 34% para Europa!).
Pero no es mi intención discutir sobre este aspecto de la categorización de las “etapas” de la vida. En fin, “el tiempo pasa y nos vamos poniendo viejos”. Somos una cadena de “etapas” que están muy entrelazadas, etapas artificiales como todas las categorizaciones que se pretenden hacer de los seres humanos, pues cada uno de nosotros en un ser único, con un proceso de crecimiento y maduración bilógica, psíquica, mental, social, etc., particular, propia.
No todos envejecemos de igual forma, no hay un patrón único de envejecimiento. Algunos antropólogos argumentan que esto ocurre debido a que la especie humana no ha aprendido aún a envejecer, que aún no está el “programa” en nuestra memoria biológica. Es cierto, cuando miramos antropológicamente hacia nuestro pasado lejano comprobamos que este proceso es relativamente reciente. Lo cierto es que aún el envejecimiento sigue siendo lo que un investigador llamó “una verdadera caja negra”.
Entonces, es cierto, es un hecho, envejecemos, y es ciertamente un logro de la humanidad, un logro de la especie, pero es también, como se ha señalado: un desafío, un reto, para todos los países, pero fundamentalmente para nuestro tercer mundo. Cuba envejece, pero envejece sin la base económica con que lo hicieron los países europeos, por ejemplo, entonces el reto para nosotros es doble; quizás triple debido a que hemos perdido la cultura de respeto al anciano que antes existía, y que es propia de muchas culturas de África, Asia y América Latina, donde se venera la experiencia, la sabiduría, el conocimiento acumulado.
Hay un problema ético que es fundamental: ¿Vivir la mayor cantidad de años posibles sin tener en cuenta las condiciones en que se envejece? O ¿vivir una cantidad de años razonable (¿cuántos?) pero con una buena calidad de vida?. Repito, este es un problema ético para el que cada uno tiene su respuesta. Es cierto que nadie quiere morirse pero nadie quiere llegar a viejo!
Cuba envejece, pero se aprecian incomprensiones para con los ancianos, irrespeto, maltrato, abuso, calamidades. Diversos estudios realizados por estudiantes e investigadores así lo demuestran. Hace mucho tiempo que se implantó un término para calificar las actitudes prejuiciosas, los estereotipos y las discriminaciones hacia el anciano, este es VIEJISMO. Nuestra sociedad ya lo padece, quizás no en una situación alarmante pero ya está aquí.
La gerontofobia, el miedo a envejecer, es más abundante, los medios tienen una gran responsabilidad en esto, pues los patrones de belleza pocas veces son de las llamadas personas de edad. El patrón de belleza, de éxito es una/un joven, además casi siempre de piel blanca (aunque ya este es otro tema en el que no voy a profundizar por ahora). La vejez no es una enfermedad, a pesar de que muchas estadísticas parecen decir lo contrario. Cada “etapa” de la vida tiene su “patrón” de salud-enfermedad. Envejecemos en una sociedad determinada, en una cultura determinada, en una economía determinada, estos son varios de los tantos elementos que modulan la calidad del envejecimiento. Hay que buscar en los genes, no podemos obviarlo, pero resulta más fácil acceder a las condiciones de vida, al ambiente en que se envejece.
Yo tengo 69 años, aún me siento productivo, no voy a decir lo clásico que “aún con una mente joven” pues para mi es una de las manifestaciones de viejismo. El mensaje es este: Yo estoy viejo (eso es malo) pero mi mente esta joven (eso es bueno). Tenemos mucha exacerbación de lo juvenil, y es cierto, los jóvenes tienen que tener su lugar, tiene que ser oídos, tienen que ocupar responsabilidades; pero esto no es una competencia, ni una carrera inter-generacional, es una cooperación inter-generacional.
Cuba envejece, pero hay que considerar los aspectos espirituales del envejecimiento, la recreación, la superación, el diseño de nuestras instalaciones, los ómnibus, las casas, en fin se precisa “diseñar” un mundo que no esta pensado para viejos; donde se rompan las barreas arquitectónicas y las barreras mentales (lo más difícil)
Cuba envejece, pero tenemos que tener una tropa de ancianas y ancianas lind@s, aguerridos (esto no es una broma, sería de muy mal gusto), respetados, orgullosos. Ancianos y ancianas que sean “tratados como seres humanos”, no como una simple acumulación de años, o un simple dato estadístico con fines diversos. La forma en que los cubamos sigamos envejeciendo será el reflejo de nuestro proyecto social.
Muchas gracias,
Antonio J. Martínez Fuentes
este tema me fue muy triste hace pocos meses perdi a mi madre, en una enfermedad de cancer de piel (melanoma), fue muy triste susúltimos momentos ,se comenzo hacer sus necesidades no le daba tiempo a llegar al baño ella se ponia mal y no lo soportaba y nos las vimos negras, no sabiamos que hacer llamamos a todas las farmacias internacionales y referian que este articulo que de por si es caro( para el poder adquisitivo del cubano) no entraba hacia tiempo ; realmente es frustrante tener un familiar querido y ver como se deteriora y estando en sus cabales pero todavía ,como era el caso de mi madre , ella decidio apagarse no apoyando en su estado de animo , pero es cierto que tener a un anciano que lo ha dado durante toda su vida y verse atado de pies y manos con articulos que se nesecitan pero no hay disponibilidad en el país , la cama la consegui en el trabajo , el colchon el de una prima, el oxigeno fue una carrera para cuando llegara a la cas lo tubiera y queriendole dar el alta en el hospital y aguantando por las gestiones que se hicieran teniendo en cuenta la rapidez con que le avanzo la enfermedad . me parece que la mesa estuvo muy interesante y quizas otras veces debería tocarse el tema si la población cubana esta envejecida analizar las causas que algunas se tocaron eln la mesa pero otras las toco la compañera de la carta saludos gracias por dejarme hacer este comentario triste en la vida de cualquier ser humano con familiares enfermos de cualquier edad
Fui cuidadora de mi mama por 9 años con el mal de Alzheimer, para no ocupar mucho espacio no hare la historia amarga y lacerante del centro de trabajo donde laboraba, que para resumirlo solo puedo decir que el director me toco en el hombro y me dijo “TE TOCO” y me fue retirado el carnet del partido por ausencias a las reuniones por estar con mi mama cuidándola en el hospital, negándome la desactivación, establecida en los estatutos del PCC, encontrándome sola al tener un solo hijo que se incorporo a la colaboración en la Republica de Venezuela a ayudar a los mas necesitados, sufri el desgaste de una madre con esa enfermedad que de mas esta hablar de ella, es conocida y la injusticia y mal trato de una empresa a la cual le dedicaba 12 y 14 horas de trabajo, echando a un lado una trayectoria laboral de 30 años como dirigente, hay mucha tela por donde cortar cuando nos referimos a los de la tercera edad que por demás nos formaron con grandes valores y fueron la retaguardia de muchas mujeres para poder incorporarnos a la sociedad, considero que este tema deba ser uno de los que necesita darle prioridad, porque lacera y muerde el corazón de la familia como dijo un gran especialista en el periódico Granma, felizmente si conte con un hospital donde siempre fue bien atendida mi mama en varias ocasiones, el Hospital Naval.
Los ancianos no son desechos, son arboles maduros que dieron frutos y alimentaron, hay que regarlos hasta el fin y con el agua bien pura, ese debe ser el camino. Se merecen lo mejor, estamos muy primitivos aun en este asunto.
yo si fuera ustedes tambien haria lo mismo
eso es muy por que no se lo trasmiten ala poblacion