Antonio Moltó, entregó las distinciones.

Periodistas cubanos y extranjeros recibieron la víspera, en esta capital, la distinción Félix Elmuza, máximo galardón que otorga la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), a profesionales destacados con 15 años o más de labor ininterrumpida.

Durante la ceremonia, como parte de las actividades por el Día de la Prensa Cubana, fueron condecorados 58 trabajadores de los medios, y de forma especial 10 personalidades que desde diversos ámbitos contribuyen a la formación y superación del gremio y a la comunicación de los resultados de la salud cubana en países foráneos.

En presencia de Antonio Moltó, presidente de la UPEC, se reconoció también a Alexander Moiseev, entrañable amigo de Cuba y miembro de la Asociación de Periodistas de Moscú.

Este año la jornada está dedicada a los Cinco Héroes de la República de Cuba, pues el regreso a la Patria de Gerardo, Antonio y Ramón resulta un agasajo para quienes mediante la palabra y la escritura, defendieron la causa durante los 16 años de injusto encierro en cárceles estadounidenses.

Ricardo López Hevia, destacado fotorreportero del periódico Granma, en nombre de los periodistas condecorados expresó que recibir tal distinción compromete aún más a continuar el camino de la fidelidad y la verdad,  una de las mejores armas de la profesión.

Un reto es enamorar a las nuevas generaciones que no están atraídos a permanecer en los medios, por ello es necesario mostrar que hacer periodismo en la Cuba de hoy es una condición de principios, que tienen en sus manos el peso de la historia y que el más grande compromiso es con el pueblo, acotó.

Dijo además, que el país se encuentra inmerso en transformaciones económicas, y la prensa, por su responsabilidad social, desempeña un rol imprescindible y necesario en tales procesos.

En el acto se recordó a Félix Elmuza, un joven con alma de periodista que en el momento preciso cambió su pluma por el fusil para sumarse en la epopeya del yate Granma, y combatir por la soberanía de Cuba.

El doctor Julio César Hernández, en representación de las personalidades condecoradas de varios sectores,  señaló que las epopeyas y mártires cubanos constituyen “la inspiración para asumir el quehacer del día a día”.

A su vez, subrayó que esta condecoración “es mucho más que un reconocimiento, es el compromiso moral con Cuba para proteger su bandera de la estrella solitaria que todos deseamos flamee por siempre libre, y un deber acrecentado para defender la justicia social conquistada”, acotó.

(Con información de la AIN)