Año electoral sui géneris en Estados Unidos (+ Fotos y Video)

Fotos: Roberto Garaicoa

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

El periodista Reinaldo Taladrid y los académicos Jorge Hernández y Ernesto Domínguez ofrecieron seguimiento a las elecciones en Estados Unidos en la Mesa Redonda.

Los analistas han sido enfáticos: este será un año electoral sui géneris en Estados Unidos, porque se observa en los votantes una reacción contra la política tradicional, lo cual explica que candidatos como Donald Trump, sin experiencia previa en la vida política; y Bernie Sanders, un demócrata que presenta un programa bajo el signo socialista; estén hoy entre los principales contendientes en la larga carrera hasta la Convención de sus respectivos partidos, que tendrá lugar a mediados de año; y en el voto también se concentra la resistencia frente a la incertidumbre socioeconómica que vive ese país.

Esa es la lectura principal de contexto que plantearon el periodista Reinaldo Taladrid y los académicos Jorge Hernández y Ernesto Domínguez, quienes ofrecen seguimiento al tema en la Mesa Redonda.

En la emisión de este martes, Taladrid, antes de desgranar el tema principal, se detuvo en las secuencias de la noticia del día: el cierre de la prisión en la Base Naval de Guantánamo. “Obama presentará un plan para someter al Congreso, y si este lo aprueba, se cerrará la prisión, lo cual no quiere decir que vayan a devolver la Base Naval a Cuba. Eso no está en la mesa de discusiones”.

Para el analista, vuelven a ser significativos determinados comportamientos en un año electoral y mucho más como este, cuando cosas tan serias son objeto de las cosas menos serias. “Se dieron episodios al estilo de que un Senador, frente a cámaras, cogió el plan de Obama y lo tiró al cesto de la basura. Posteriormente, Marco Rubio dijo que no va a cerrar la base y, mucho menos, le vamos a devolver la base a una dictadura antiamericana. Todas estas posturas sin reparar ninguno en qué consiste el plan. También en algunos canales se encargaron de precisar que no se cierra Guantánamo, sino la prisión, lo que no hubiera ocurrido en otro momento”.

En su opinión, el plan de Obama no va a pasar el nivel Congregacional, y lo que está por ver es si el Presidente utilizará su poder ejecutivo. “Obama sí dijo que ni el vicepresidente Biden ni él estaban en una boleta electoral, como diciendo que no tiene que complacer a nadie. Pero si los republicanos están boicoteando el asunto, dudo que esto prospere en el Congreso.

“A todo el show se une la manipulación de que Obama va a liberar a los terroristas, cuando en el plan queda bien claro que van a ser trasladados a prisiones de máxima seguridad en Estados Unidos. Por todo esto insisto en que este es un año electoral y es impredecible lo que pueda ocurrir”, expresó.

DEFINICIÓN DE CANDIDATOS REPUBLICANOS

En la larga carrera hasta la Convención de los partidos republicanos y demócratas, comienzan a decantarse las propuestas. En este año en particular, es el bando republicano el de más amplio espectro, porque por la parte demócrata desde un comienzo ha sido consistente la definición de dos, con Bernie Sanders y la experimentada Hillary Clinton.

Ernesto Domínguez aclara que aunque aún es muy temprano para visibilizar quién tiene mayores posibilidades por cada bando, porque no se ha dado el momento del despegue, sí se han vislumbrado algunos comportamientos que sostienen lo vaticinado respecto a que por la parte republicana Trump se consolida, a pesar de la resistencia; seguido por Marco Rubio y Ted Cruz.

Recordó que salió Jeb Bush, que era considerado el principal competidor para la denominación republicana, lo cual consideró algo muy importante porque saca del juego a un potencial candidato del establishment. No obstante, puntualizó, quedan dos potenciales candidatos que tienen esa condición: John Kasich y Marco Rubio.

“Sería una jugada posible concentrar las potencialidades que puede dar el establishment, para poder hacer frente a Donald Trump y también a Ted Cruz. Carolina del Sur, uno de los estados sureños, tiene el tipo de electorado más cercano al que aspiran estos republicanos. Los grupos radicales que participan sumarían ahora cerca del 40 por ciento  a favor de Rubio”.

Sobre la determinación de Bush, destacó que debe haber sido difícil no haber sido favorito en Carolina del Sur, porque fue un estado favorable a su padre y a su hermano. Pero ahora dejó el campo despejado para los candidatos que tienen posibilidades más reales.

El Doctor Jorge Hernández argumentó que en un año electoral salen a la luz los procesos contradictorios que ponen de manifiesto ciertas coyunturas, como que los medios de comunicación tienen más poder del habitual y la construcción de los candidatos es más interesante que lo que las bases han respaldado.

Compartió el principio del experto Ramón Sánchez Parodi, para quien es muy temprano aún para extraer generalizaciones, porque el proceso de ahora está dirigido a ver cuál va a ser el candidato de cada una de las Convenciones de los Partidos a mediados de año de cara al primer martes de noviembre.

El analista alertó que la sociedad norteamericana está viviendo un contexto de profunda divergencia, hay un gran sabor de descontento y estas particularidades se están expresando tanto en los caucus como en las elecciones primarias.

Taladrid agregó que los programas se preguntan si Trump es indetenible y nadie da con la varita mágica. “Dicen que gana Nevada y Ohio, y por cinco puntos. Lo cual me reafirma que no todo el mundo estará concentrado con Marco Rubio, y ya hay varios del establishment que comenzaron a hablar con Trump y que lo están asesorando. Y coincido con Rubio, cuando afirmó que está claro que es una carrera (la republicana) de 3 corredores: Donald Trump, Marco Rubio y Ted Cruz”.

De la contienda, significó, que se trata de una campaña sucia. “Acaban de falsificar un video de Marco Rubio y en mayo Trump va a juicio, porque tiene que comparecer como testigo de la fiscalía y la defensa. Es un juicio que de seguro se va a convertir en parte de la campaña. Todo esto demuestra que han llegado a un nivel por debajo de los estándares éticos bastante bajos que ya de por sí tenían”.

¿QUIÉN SERÁ EL FAVORITO POR LOS DEMÓCRATAS?

Para Reinaldo Taladrid, Hillary ya se encaminó. “La clave la dan las propias encuestas, cuando le preguntan a los que votaron consideran un 80/20 que Bernie es quien haría más por ellos, pero la relación se invierte cuando se le pregunta quién consideran que tiene más experiencia y es más elegible. También hay quien simpatiza con Bernie pero que está convencido de que si gana no le va a ganar al que salga por el otro bando. Y ese realismo se está imponiendo”.

Sumó a su mirada, que Hillary está siguiendo además los pasos de su ilustre esposo, quien trajo asesores y se robó el programa de los republicanos. Ya Hillary, por ejemplo, se está robando el discurso de Bernie, quien tiene hoy a su favor el 30 por ciento del electorado demócrata y ese es un dilema que debe enfrentar.

El Doctor Jorge Hernández comentó que lo que está sucediendo era una de las mayores posibilidades. “Ante toda la sorpresa y el júbilo era lógico que se podía recuperar la imagen de Hillary. La opción de Bernie es demasiado antiestablishment y el contraste beneficia a Hillary Clinton”.

Explicó que la realeza política de los Clinton perdió en 2008 y ahora son los Bush los dolientes, y así se ha comportado la política norteamericana en las últimas 3 décadas.

A partir de esta observación, se detuvo en que no es poca cosa el valor simbólico en cuestiones políticas en ese país, por lo que es un asunto a atender. “Hillary y Jeb vienen de familias presidenciales, y es triste ver cómo se deshizo la popularidad de la que gozó. Hay que recordar durante la doble administración de su hermano el contubernio que tenían con la comunidad cubano-americana. Parecía un candidato fuerte y ahora es el gran perdedor. Al menos podríamos decir que ha tenido la honestidad de reconocerlo y anunciar la retirada y pasarle a Marco Rubio la base de simpatía. Por ello, yo me inclinaría a la repercusión en términos partidistas que tiene todo esto para gente que va más allá de la lectura de la prensa y sigue la ruta de los procesos políticos”.

Taladrid añadió a este punto de vista que hay candidatos que saben que no van a llegar a la Convención, pero saben que ganan notoriedad pública y que ganan un nombramiento. “Muchas veces a los candidatos perdedores se les da puestos en el gobierno, a partir de lo cual le facilitan intereses especiales a las empresas y luego ocupan puestos en estos consorcios, que es lo que realmente le reporta grandes ganancias”.

En su criterio, este es un proceso que es muy curioso y que como sistema no es inteligente. Lo cual, agregó Jorge Hernández, es parte de un mecanismo que se reproduce.

AÑO ESPECIAL

Lo que ha pasado con Jeb Bush, coincidieron los analistas, refuerza el principio de que este año es especial, en el que prevalece un sentimiento antiestablishment.

Se trataba, dijo Ernesto Domínguez, de un candidato con dinero suficiente, como lo tiene Trump, no obstante, la noción de que el posible elegido pueda comprar las elecciones es algo que no se puede permitir un candidato.

La idea de la salida del Jeb, añadió, termina con la posibilidad de un político de carrera republicana dirigiendo. No obstante, las figuras jóvenes que se han lanzado nacionalmente, se abren un futuro.

Los electores, acentuó, están apostando por quienes se están montando dentro de la tendencia al cambio y eso tendrá resultados a futuro, porque se están labrando próximas campañas.

Este año electoral ofrece otras aristas. Al decir del analista Domínguez, las elecciones están poniendo de manifiesto las polarizaciones, los intereses de sectores sociales que están cambiando la manera de hacer política y que tienen que ver con un proceso de transición, y el descontento con los indicadores económicos, los cuales están dejando la huella de que se puedan repetir determinados fenómenos, y todo apunta a la posibilidad de una nueva caída.

Taladrid subrayó que los programas de los partidos se están convirtiendo en plataformas cargadas de frases hechas y repetidas. A lo que Jorge Hernández sumó que lo que el electorado quiere escuchar tiene que ver con el bolsillo, con la situación socioeconómica y esto se incorporará en el discurso, a menos que pase algo fortuito.

Argumentó que demócratas y republicanos son partidos electorales que tienen un signo clasista, y al mismo tiempo las plataformas tienen importancia, porque a partir de ellas se sensibiliza, y sobre todo en contextos como en el que se vive hoy. “Ese es un país de inmigrantes, de la banalidad, de la superficialidad… y está atrapado en contradicciones culturales y dilemas políticos. Ellos interpretan que si el telón de fondo es el cansancio del liberalismo, hay que buscar propuestas que tengan creatividad. En las últimas etapas las tendencias son de movimiento hacia el centro, ahora las dos opciones están divididas pero deben llegar a tener convergencias”.

Para Reinaldo Taladrid, este es un año electoral sui géneris y es impredecible lo que pueda ocurrir.

De acuerdo con Ernesto Domínguez, las elecciones están poniendo de manifiesto las polarizaciones, los intereses de sectores sociales que están cambiando la manera de hacer política.

De acuerdo con Jorge Hernández: “Ese es un país de inmigrantes, de la banalidad, de la superficialidad... y está atrapado en contradicciones culturales y dilemas políticos".

La Mesa Redonda estuvo moderada por el periodista y director de la Mesa Redonda, Randy Alonso.


Haga un comentario.

Deje su comentario. Usted también puede subscribirse a estos comentarios vía RSS.