Cuba reiteró la necesidad de soluciones pacíficas y el respeto a la libre determinación de los pueblos en relación con la situación en algunos países del norte de Africa y el Medio Oriente.

Al hablar en la 17 sesión del Consejo de Derechos Humanos (CDH) de Naciones Unidas, el embajador cubano en Ginebra, Rodolfo Reyes, recalcó que los problemas en esos territorios deben resolverse sin injerencias o intervenciones extranjeras.

Cuba condena los abusos cometidos por Estados Unidos y la OTAN en Libia, amparándose en una falsa interpretación de las resoluciones adoptadas por el Consejo de Seguridad y este órgano , puntualizó Reyes.

Durante el debate general con la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, el diplomático señaló que existe el cuestionamiento a algunas de las graves violaciones en varios países del Norte.

Mencionó asimismo otros cuestionamientos al centro de detenciones arbitrarias y torturas en Guantánamo; los crímenes de la OTAN contra civiles inocentes; y la creciente represión contra manifestantes pacíficos hartos de sus regímenes plutocráticos.

En otro orden, Reyes alertó sobre la creciente tendencia a la reimposición de la confrontación y los dobles raseros en las labores del Consejo.

Este órgano cada día se parece más a la defenestrada Comisión. Hacemos un llamado a los países del Sur y a todos aquellos con instrucciones distintas a las de adelantar proyectos de influencia y dominación, a que reflexionen y actúen en consecuencia , anotó.

Cuba no será cómplice silente de un nuevo fracaso. Si se busca impacto real y progreso en el terreno, deténgase la manipulación política, precisó.

(Con información de Prensa Latina)