La sequía, junto al alza de precios de los  alimentos y el combustible, puede desencadenar “una grave escasez de alimentos”  en las regiones del Cuerno de África, denunció este martes la FAO.

“Los elevados índices de desnutrición aguda se encuentran muy extendidos y  más de 8 millones de personas en Yibuti, Etiopía, Kenia y Somalia necesitan  ayuda de emergencia”, sostiene en una nota la Organización de Naciones Unidas  para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

“La crisis actual no es un evento inhabitual, sino más bien una  característica crónica de la región. El desafío que tenemos por delante es  dotar de medios a los agricultores y pastores para que se adapten a la nueva  realidad de gran variabilidad del clima y una mayor frecuencia de eventos  meteorológicos extremos”, afirmó Rod Charters, coordinador regional de  emergencias en África central y oriental de la FAO.

La sequía está afectando a la mayoría de las áreas de Somalia, entre los  países con más elevadas tasas de desnutrición del mundo, sostiene la agencia de  Naciones Unidas.

“En la actualidad, 2,5 millones de personas –uno de cada tres somalíes–  necesitan ayuda humanitaria”, calcula la FAO.

En Kenia, se estima que más de 2,4 millones de personas en las áreas  dedicadas al pastoreo y agro-pastoreo no podrán cubrir sus necesidades básicas  de alimentos y agua.

En Etiopía, el fenómeno meteorológico de La Niña ha llevado a la ausencia  de dos temporadas consecutivas de lluvias, escasez de agua y de pastos y un  grave deterioro en las condiciones de la ganadería.

“A principios de junio la cifra de personas necesitadas de ayuda en Etiopía  se calculaba en 11,4 millones”, indicó la entidad.

El Cuerno de África requiere con urgencia fondos adicionales para proteger  y reconstruir los recursos pecuarios, distribuir insumos agrícolas adecuados  que incluyan semillas tolerantes a la sequía, forraje y agua para el ganado de  cría, así como la vigilancia y la lucha contra las enfermedades de animales y  plantas, según la organización internacional.