Yo diría que no es más que una tradición sentimental. Lo digo porque yo nací aquí, me crié aquí, e hice gran parte de mis estudios en este pueblo, aunque también cursé estudios en Bauta y en Marianao, pero básicamente la raíz de todo nace desde aquí, desde Punta Brava. Incluso estando en la universidad todavía vivía en este pueblo, hasta que por cosas de la vida ya cada quién escoge su camino, y el mío fue precisamente el del cine.

En un homenaje a Cuba por el aniversario 50 de la Victoria de Playa Girón, el Canal 365 días de la televisión rusa trasmitirá en exclusiva el próximo día 19 dos documentales cubanos alegóricos. “66 horas: la verdadera historia de Bahía de Cochinos” y “La CIA contra Fidel Castro: el mérito es estar vivo”, ambos del realizador cubano Otto Miguel Guzmán Guerrero y producidos por Mundo Latino, se presentarán en el citado canal.

La OTAN reconoció este miércoles en Nápoles (sur de Italia) las dificultades causadas por los escudos humanos empleados por las tropas fieles al coronel Muamar Gadafi, las cuales se mezclan con la población local para avanzar hacia lugares en manos de los rebeldes.

Una nueva ola de violencia sacudió este miércoles a Paquistán, en una situación que se repite desde hace meses, sobre todo desde que comenzaron a ingresar a la nación tropas estadounidenses para combatir a fuerzas rebeldes, calificadas por la Casa Blanca como terroristas. En el noroeste paquistaní, al menos cuatro niños murieron, y otras tres personas resultaron heridas luego del estallido de un artefacto explosivo en una aldea.

No estamos hablando de Haití, ni de países africanos, ni asiáticos, ni de las favelas”inseguridad alimenticia”, o lo que en cristiano se traduce como no saber de dónde provendrá la próxima comida. sudamericanas, sino del extraordinario hecho de que en el país más rico del mundo, con el sector agrario más productivo, millones sufren de lo que se llama “inseguridad alimenticia”, o lo que en cristiano se traduce como no saber de dónde provendrá la próxima comida.

Como medida para reducir la fuga radioactiva de la central nuclear Fukushima-1, las autoridades japonesas estudian la posibilidad de usar un buque ruso destinado a reciclar desechos radiactivos. El barco, denominado ‘Landysh’, podría contribuir en la operación de “limpieza” de la dañada estación nuclear, de la que la compañía operadora Tokyo Electric Power (TEPCO), planea arrojar unas 11.500 toneladas de agua con bajos niveles de radiación al océano.