¡Se escapó el león!
Por la manera en que corría la gente, de un lado a otro sin parar, gritando a toda voz, parecía que un león se había escapado del zoológico. Este jueves la capital era un caos detrás del equipo Industriales, flamante campeón del béisbol cubano. Fui testigo de la apoteosis, primero en la céntrica avenida 23 y más tarde junto al Museo de la Revolución. Allí quedé atrapado entre la multitud, cuando la avalancha de personas impidió que los peloteros pudieran bajarse de la guagua y entrar a la sede de la Asamblea Provincial del Poder Popular, donde se les había preparado un recibimiento.