Bayern Múnich, que eliminó al Real Madrid, y Chelsea, que superó el martes al Barcelona, disputarán la sexta final germano inglesa en la Liga de Campeones (antigua Copa de Europa), aunque ninguna de las anteriores tuvo a estos equipos como protagonistas. El duelo en el Alianz Arena de Múnich será el primero entre el Chelsea y el Bayern por el máximo título continental de clubes. Aunque a lo largo de la historia de la competición, en cinco ocasiones equipos de Inglaterra y de Alemania han coincidido en la final.

La Fuerza Aérea de Israel (IAF, por sus siglas en inglés) ya tiene elaborado un plan para atacar las instalaciones nucleares iraníes, en caso de que las sanciones y los medios diplomáticos no incidan para que Irán desista de seguir adelante con su programa nuclear, según una importante cadena de televisión israelí.

Rusia considera peligroso buscar pretextos para aumentar la presión sobre Irán con nuevas sanciones, declaró hoy el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, durante su encuentro con el asesor de Seguridad Nacional de Israel, Yaakov Amidror. Amidror llegó en una visita de trabajo a Moscú y trató con Lavrov el problema nuclear iraní, entre otros asuntos.

José Mourinho, técnico del Real Madrid, restó importancia al hecho de que su equipo nunca haya ganado en Múnich en nueve visitas, y afirmó en la previa de las semifinales ante el Bayern, que “la historia no juega mañana”. En el gran reto de conseguir la ‘Décima’ Copa de Europa para el madridismo, Mourinho afronta un nuevo desafío en Múnich, terreno donde el Real Madrid perdió ocho de nueve partidos y tan solo empató uno. “No me invita a nada. Son números que no tienen ningún significado. La historia no juega mañana. Nada de números y nada de resultados anteriores. Nada. Es una semifinal y como todas las semifinales el que las juega las quiere ganar. Tenemos la motivación extra de ser la segunda temporada en jugar las semifinales”, dijo.

Teherán reacciona de esta manera a las sanciones acordadas por la UE que anulan toda compra de crudo o de sus derivados a Irán. El objetivo de una medida tan rigurosa es una continuación de la presión que los aliados occidentales, incluidos la UE y EE. UU. ejercen sobre Irán para que abandone su programa nuclear.

Científicos alemanes comprobaron en Japón que el terremoto que sacudió el país nipón hace poco más de un año provocó una fractura de casi 400 kilómetros en la corteza terrestre. Gerold Wefer, director del Centro de Ciencias Medioambientales Marinas de la ciudad alemana de Bremen, dijo que además de la longitud de la fractura, en algunas áreas se produjeron desplazamientos de hasta 50 kilómetros hacia el este.