El acorazado USS Maine estuvo fondeado en el puerto de La Habana durante tres semanas, hasta que el 15 de febrero de 1898, a las 21:40 horas, una violenta explosión en su interior, lo hizo hundirse con rapidez. Investigaciones posteriores determinaron que varias toneladas de pólvora habían detonado. Al ocurrir la explosión, la mayor parte de la tripulación estaba durmiendo, o descansando, pero la alta oficialidad del acorazado estaba en tierra en ese momento.

El tiroteo de este miércoles en un instituto de Florida supone el decimoctavo tiroteo en escuelas estadounidenses en lo que va de año. Esto equivale a una media de un tiroteo cada 60 horas en 2018. Los datos proceden de la organización para el control de armas Everytown for Gun Safety, que considera tiroteos en escuelas todo incidente en el que se dispara un arma de fuego en el recinto o en sus alrededores.

Donald Trump no quiere hablar de controlar la venta de armas pero los estudiantes de la matanza sí. Los estudiantes exigen que se aumente la edad mínima para la compra de armas.

Hace muchos años que el gasto militar se convirtió en el principal motor de la economía norteamericana y fuente de fabulosas superganancias para el complejo militar-industrial-financiero que gira en torno a la producción de armamentos. En una suerte de perversa “puerta giratoria” las ganancias de este complejo se transfieren, en una pequeña porción, a la clase política.

Las ansias por desestabilizar Venezuela y acabar con el mandato constitucional del presidente Nicolás Maduro suben de tono continuamente, y con ello las agresiones que enfrenta el país bolivariano.

El imperialismo no ha podido ni podrá destruir la Revolución Bolivariana de Venezuela», resaltó en La Habana el profesor Adán Chávez Frías, presidente de Asuntos Internacionales de la Asamblea Nacional Constituyente, ante medios de prensa nacionales y aseguró que la mayor fortaleza de su país radica en la unión cívica militar conquistada.