Los operarios reanudaron este jueves las operaciones para intentar refrigerar el reactor 3 de la central nuclear accidentada de Fukushima 1, tras interrumpirlas la víspera debido a la emanación de un humo negro, anunció la Agencia de Seguridad Nuclear japonesa. La agencia agregó que el humo dejó de salir, sin poder precisar el origen del incidente.

Las autoridades evacuaron la tarde de este miércoles a los trabajadores de la planta nuclear de Fukushima, que fue dañada por el terremoto de 9 grados, luego de que se elevó humo negro por encima del reactor 3, indicó la Tokyo Electric Power Company. La compañía dijo que no estaba claro qué había causado el humo, que se elevó por encima de la planta mientras los trabajadores continuaban con los esfuerzos para enfriar las barras de combustible y restaurar la energía.

La cifra de víctimas del sismo y el tsunami que devastaron parte de Japón el 11 de marzo supera ya los 24 mil muertos y desaparecidos, según el último balance ofrecido por la policía japonesa este miércoles. Según la policía, ya hay confirmados 9 mil 408 muertos y 14 mil 716 personas están oficialmente desaparecidas. Además, 2 mil 746 fueron heridas y todavía hay miles de refugiados en instalaciones provisionales.

La central nuclear de Fukushima sigue emitiendo radiación , aunque no se sabe exactamente de dónde, según ha dicho este martes el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que ha expresado además su preocupación por la situación de las piscinas de desechos nucleares en la central de Fukushima, dañada el pasado 11 de marzo por un terremoto y posterior tsunami.

Japón vivió hoy nuevas tensiones por la crisis en la central nuclear de Fukushima-1 al detectarse una columna de humo gris procedente del edificio del reactor número 3 que obligó a evacuar a sus trabajadores. El incidente se registró a las 15:55 hora local y la cantidad de gas luego disminuyó, según informó la empresa Tokyo Electric Power Co., operadora de la planta.

Mis pupilas se dilatan y comienza un repiqueteo incontrolable del corazón, se me cierra la garganta con un nudo que solo existe en mi mente pues veo de refilón las imágenes del ataque aéreo a Libia y solo estoy en mi cocina, haciendo frijoles negros una noche de sábado en La Habana.