Hace aproximadamente 60 años, en las calles cubanas se libraban combates decisivos; las acciones de los líderes estudiantiles y el Movimiento 26 de julio (M-26-7) fueron elementos imprescindibles para aquella juventud revolucionaria que hizo de la lucha su principal epopeya, puntal importante para el definitivo triunfo.

Combatientes de la lucha clandestina de fines de los años 50 en el Oriente, Centro y Occidente del país evocarán en la Mesa Redonda aquellas acciones combativas en las ciudades cubanas hace 60 años y, sobre todo, el heroísmo de esa juventud que hizo historia, parte de la cual no llegó a ver la hora del triunfo revolucionario.

Inspiradas en el revolucionario que nació el 25 de marzo de 1903 —quien fuera asesinado el 10 de enero de 1929 en el Distrito Federal por sicarios de la tiranía de Gerardo Machado—, nacieron estas páginas de las cuales ahora extiendo —a modo de homenaje y especialmente a nuestros jóvenes— fragmentos de lo redactado mientras iba tras las huellas de un joven excepcional.

Esta es una Revolución hecha por los jóvenes y serán los jóvenes la continuidad inquieta, alegre y firme de nuestra hermosa obra

Aquel día en que una digna representación de los jóvenes cubanos intentaron llegar hasta la guarida del tirano Batista con sus armas en la mano, y en que el líder estudiantil José Antonio Echeverría cayó combatiendo, convencido de que el dictador había sido ajusticiado, estuvo lleno de heroísmos no tan conocidos.

Cuba es el segundo Parlamento del mundo con la mayor representación femenina. Este 11 de marzo las mujeres reafirmarán su papel protagónico en la Revolución Cubana.