El otro 11 de septiembre
Casi todos los estadounidenses, e incluso muchos que no lo son, pueden recoradar exactamente donde estaban el 11 de septiembre del 2001. Por extraño que parezca, yo me encontraba en el aeropuerto Logan de Boston, abordando un avión de American Eagle hacia el aeropuerto de Long Island Islip. Mi vuelo salía a las 8 de la mañana en la puerta 22 en el momento exacto en el que se informaba que Mohammed Atta y otros cuatro secuestradores sauditas despegaban desde el mismo terminal B, junto con otros 86 pasajeros y tripulantes.