Del Decreto 349 y sus contra-invenciones
Cuando pude leer el Decreto 349/2018 en la Gaceta Oficial de la República de Cuba saqué una conclusión apresurada: se recupera el ejercicio de la legalidad ante la invasión banal, filistea y mercantilista en espacios institucionales, en la actividad de algunos trabajadores por cuenta propia y por aficionados sin obra alguna, que usurpan el espacio público y burlan el difícil trabajo de educación cultural de la ciudadanía.