El cerco contra Libia se estrecha
La guerra civil en Libia continúa con enfrentamientos en las ciudades de Misurata y Zawiyah, en poder de las fuerzas opositoras al gobierno de Muammar Al Gaddafi.
Mientras, Estados Unidos y sus aliados europeos agilizan su accionar para dar el toque final con una posible invasión militar. Como parte de las presiones internacionales, el Consejo de Seguridad de la ONU decretó medidas punitivas, incluidas el congelamiento de cuentas bancarias, el embargo de armas y la prohibición de viaje contra Gaddafi, su familia y principales colaboradores.
En Mesa Redonda sobre las rebeliones en Oriente Medio y las apetencias imperiales, los analistas María Elena Álvarez y Leonel Nodal, y los periodistas, Elson Concepción, Óliver Zamora y Randy alonso, explicaron cómo las presiones de Occidente contra Libia en el Consejo de Derechos Humanos podrían deslegitimar ese órgano como ocurrió con la anterior Comisión.
Fichas en movimiento
Estados Unidos guía el accionar europeo hacia un conflicto interno en Libia mediante el cierre del cerco económico y financiero y exacerbando las motivaciones externas para una invasión.
En la Mesa Redonda se informó que Francia convocó una cumbre del Viejo Continente para analizar la situación en el país norafricano, y anunció que enviará dos aviones con ayuda humanitaria a Benghazi, bastión de los sublevados.
Alemania, por su parte, exigió que se impongan sanciones severas contra el gobierno libio. Washington y Europa continúan sacando a sus nacionales de Libia y movilizan fuerzas navales frente a la costa de esa nación.
La amenaza de invasión ha creado una crisis humanitaria en la frontera con Túnez, donde miles de personas tratan de huir del conflicto. Estados Unidos brindó ayuda a los opositores, pero estos rechazaron toda intervención extranjera, en tanto Gaddafi busca dialogar con los líderes tribales.
Tensiones en aumento
Las pacíficas protestas en demanda de la salida de todos los ministros del anterior gobierno de Túnez enfrentaron una brutal represión policial que causaron al menos seis muertos.
El movimiento tunecino se radicaliza y va tomando similitud con el proceso social venezolano, se precisó en la Mesa Redonda.
En Egipto, la situación sigue tensa, y el pueblo volvió a las calles, ahora de todo el país, insatisfecho con las medidas del Consejo Supremo militar, mientras varios Ex- ministros son llevados a juicio acusados de corrupción y al ex-presidente Hosni Mubarak se le prohibió salir del país y congelaron sus fondos.
También Bahrein es aún escenario de protestas chiitas en reclamo de espacio político, mientras en Yemen los manifestantes exigen que se vaya el mandatario y se lleve la corrupción. Además de Jordania y Marruecos, Omán se unió a la ola de protestas por mejores condiciones de vida.
Tomado de Radio Reloj.
El medio oriente da ejemplo, al menos para nuestro continente, de la capacidad de la insatisfacción. No sería de extrañar que el imperio norte americano, después de desestabilizar no solo a Libia sino al mundo árabe ponga la mira en nuestra América latina, ya lo ha hecho de manera vergonzosa, de seguro lo volvería hacer.
Más que nunca los que creemos en la necesidad del cambio y de la transformación de este sistema capitalista salvaje, excluyente y corrupto, en especial los jóvenes debemos estar prestos a defender nuestros procesos que han nacido, como la revolución cubana y nuevos procesos que de igual manera propone un sistema justo, digno y humano.
Ni un paso atrás y de acuerdo con lo visto, ya no es solo la proclama leninista: “proletarios del mundo unios, sino aun más, hoy siglo XXI, jóvenes del mundo unios”… Otro mundo es posible!!