Los asuntos que atañen a nuestra región, América Latina y el Caribe, estuvieron bien abordados con un apoyo a Cuba y la condena al bloqueo y al terrorismo contra la Isla

Por Juana Carrasco Martín, especial para la Mesa Redonda

En el actual contexto político mundial, la XVI Cumbre del Movimiento de Países No Alineados, celebrada en Teherán, la capital de la República Islámica de Irán, ha sido un éxito por el poder de convocatoria que hizo presentes a más de un centenar de sus miembros, 29 de ellos representados al más alto nivel, y por los resultados altamente positivos, tanto por los significativos temas abordados como por la ratificación de los principios del movimiento y la unidad en torno a ellos.

Los intentos de hacer fracasar el encuentro no prosperaron a pesar de la intensa campaña mediática, y de las presiones procedentes de Estados Unidos, de sus aliados de la OTAN y de Israel. Tampoco pudieron introducir divisiones y el grupo de asuntos que constituyen la agenda central de los NOAL fueron abordados y se discutieron a fondo con resultados positivos.

El tema de los principios, propósitos y papel del Movimiento sostenidos en la Cumbre cubana, en la Declaración de La Habana, fueron ratificados y ellos tienen que ver con  la defensa de la soberanía, la integridad territorial de los Estados, la no injerencia en los asuntos internos.

Los asuntos que atañen a nuestra región, América Latina y el Caribe, estuvieron bien abordados con un apoyo a Cuba y la condena al bloqueo y al terrorismo contra la Isla, en el llamado a la extradición del terrorista Luis Posada Carriles a Venezuela, el apoyo al proceso eleccionario venezolano, a Ecuador y su derecho soberano a otorgar asilo a Julian Assange, y el rechazo al golpe parlamentario en Paraguay.

Estos fueron algunos de los elementos destacados en la Mesa Redonda Informativa «El Movimiento de los no Alineados y la Cumbre de Irán», por el vice ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Abelardo Moreno, quien junto a los periodistas Leonel Nodal y Aixa Hevia, analizó este acontecimiento y la situación en Siria, durante el programa del martes 11 de septiembre conducido por Arleen Rodríguez Derivet.

Contrario a lo que algunos estimaban, quizás por la cercanía geográfica a la sede, Siria no fue tema central de la Cumbre, aunque preocupa, e Irán ya venía planteando un encuentro, un diálogo, con verdaderos amigos de Siria, que propicie una negociación y una salida pacífica al conflicto.

Esa gestión molesta a quienes están respaldando a la oposición armada, que llaman insurgentes, rebeldes, grupos armados terroristas, que cuentan con el apoyo admitido en asesoramiento tecnológico de Estados Unidos, mientras Gran Bretaña y Francia pujan porque se apruebe una intervención armada, lo que ha sido bloqueado por la posición de Rusia.

Se sabe que cualquier alteración del orden establecido influye en la inestabilidad de toda la región, un mapa estratégico en el cual Siria tiene una posición clave como contendiente de Israel, apoyado por el Occidente. Si cambia la situación de Siria, cambia todo la situación de fuerza para Irán, para Rusia, para China, y esto fue analizado por Leonel Nodal.

Y si bien la situación de violencia en Siria fue uno de los temas en la XVI Cumbre, fue de los menos tratados, porque era divisorio y uno de los objetivos de Noal es mantener su gran logro de la unidad diversa. El viceministro Moreno acotaba que además no estaban en este encuentro varios de los principales protagonistas que estimulan la violencia: Estados Unidos y sus aliados de la OTAN.

La creación de Israel fue el punto de conflicto en la región y a partir de ahí se al tera el equilibrio, mientras se ha construido un perfil de víctima, mientras provoca la confrontación y asume una política belicista.

Irán, por contrario, logro concertar la comunidad internacional y un programa que apunta a la paz, con una posición firme ante las provocaciones de Tel Aviv. Hasta el Gobierno de Estados Unidos le ha ido haciendo saber a Irán que van a continuar las conversaciones sobre el programa nuclear y que no habrá un apoyo de una guerra de Israel contra Irán, señaló Nodal.

Israel ha tratado de crear una atmósfera de histeria, mientras la posición de Estados Unidos asevera que no es momento de trazar línea roja sino de conversar.

Al respecto, el viceministro Abelardo Moreno apuntó que Irán es parte del Tratado de No Proliferación Nuclear, e Israel no y ha tratado de evitar que se cree una zona libre de armas nucleares en el Medio Oriente, mientras Irán plantea la necesidad del desarme nuclear.

Fue destacado el trascendental discurso del Ayatollah Jamenei, calificado de «excelente», porque dejó claro la posición de Irán respecto a las armas nucleares y el rechazo del Islam a cualquier arma de exterminio en masa.

En la reunión Cumbre de Teherán sí fue uno de los temas principales y reactivado el de Palestina, que obtuvo el mayor consenso —porque así funciona el Movimiento Noal—, y en el caso Palestina fue bastante sólido ese consenso en apoyo a su intención de ser un Estado miembro de las Naciones Unidas, para lo que se requiere de la aprobación del Consejo de Seguridad, y en la Asamblea General hay una aceptación a ello, pero por ahora Palestina se plantea como Estado observador que no tiene que ser aprobado por el Consejo de Seguridad.

Como se subrayó en la Mesa Redonda, el Movimiento dio apoyo a estas intenciones. También rechazó los asentamientos israelíes en los territorios ocupados, los que son promovidos por Netanyahu para alterar la composición demográfica en esas tierras árabes; tiene como segundo propósito tratar de impedir que pueda existir un estado palestino y como tercer aspecto se aprobó una declaración especial sobre los prisioneros políticos palestinos, para los que hubo total solidaridad.

El Movimiento, desde Nueva York, decidirá las acciones a tomar sobre estos tres grandes aspectos de la situación palestina que fue uno de los temas cimeros de la Cumbre de Teherán.

Exactamente, el documento aprobado tiene 700 artículos y es un compendio de todas las posiciones no alineadas, pero al mismo tiempo se aprobó la Declaración de Teherán, un documento de siete páginas, conciso, concreto y resumen del documento general con los principales aspectos.

Otros puntos sustanciales del consenso No Alineado considerados como muy positivos, y que fueron destacados en el discurso que pronunció el vicepresidente cubano José Ramón Machado Ventura en la Cumbre, son el concepto de democracia como valor universal basado en la voluntad del pueblo libremente expresada de darse el sistema que considere y la puntualización de que no hay un modelo único de democracia y esta no es patrimonio de país o región alguna.

Los derechos humanos, sobre los cuales el Movimiento rechaza la creación de cualquier instrumento por un país que los presenta con un doble rasero, politizados y selectivos en su tratamiento.

La reforma del Consejo de Seguridad fue otro tema y aunque no hubo unanimidad de criterio en la materia porque son diversos los intereses, si hay unanimidad en cuanto a que esa reforma debe ser integral, abordar la cuestión de la membresía, la representación regional, y en el señalamiento que en la toma de decisiones lo hace ahora de manera selectiva, con acuerdos acelerados en unos casos y en otros ni asume posiciones.

Se subrayó la importancia de que Venezuela sea la sede de la próxima Cumbre de los No Alineados, que recaiga en América Latina, y se reconoce en el documento la importancia de la región latinoamericana y caribeña, de la Celac, del Alba-Tcp, del peso protagónico de Venezuela.

Irán fue un momento positivo y todo el momento desde ahora hasta el 2018, cuando termine la presidencia venezolana, debe ser un momento positivo del Movimiento Noal.

En la Mesa Redonda se recordó el 39 aniversario del golpe de estado al presidente Salvador Allende, y el asesinato en 1980 en las calles de Nueva York del diplomático cubano Félix García por contrarrevolucionarios anticubanos de Omega 7 con vínculos con el  terrorista Luis Posada Carriles.

Israel ha tratado de crear una atmósfera de histeria, mientras la posición de Estados Unidos asevera que no es momento de trazar línea roja sino de conversar.

Si bien la situación de violencia en Siria fue uno de los temas en la XVI Cumbre, fue de los menos tratados, porque era divisorio y uno de los objetivos de Noal es mantener su gran logro de la unidad diversa.