La normalización y la metrología sobre la balanza popular
Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda
Fotos de Roberto Garaicoa
La Mesa estuvo «servida», pero en esta ocasión con las interrogantes de los seguidores de este habitual espacio, que ha incluido dinámicas formas de interacción con su público cuando se centra en los temas que impactan la realidad nacional. El plato fuerte de la tardenoche fue el seguimiento a la actividad de normalización y metrología en Cuba.
El ingeniero Fernando Arruza Rodríguez expuso que existe un alto porciento de vásculas y balanzas con posibidades de fraude y engaño en el país, y que la brecha se pretende cerrar a partir de un programa para cambiar paulatinamente el equipamiento en el sector del Comercio Interior, el cual deberá concluir en 2017.
Este programa, dijo, incluye el cambio de los instrumentos de medida en los puntos de venta de los materiales de la construcción también, lo que no desconoce la insatisfacción de la población con la forma de pesaje de los áridos a partir del número de palas. Sobre este aspecto, añadió que “esta forma de pesaje está establecida y va aparejada de un mecanismo de comprobación en los establecimientos para poder determinar si el número de metros coincide con la demanda”.
Alegó que una de las pautas que el consumidor debe seguir y por la que debe exigir es porque no se utilice un equipo que no cuente con la certificación de apto. La calibración de las pesas está pactada con una empresa que tiene talleres en todas las provincias, incluído el municipio especial de la Isla de la Juventud. Al tiempo que sostuvo que la verificación de los equipos se hace a través de la red de oficinas de normalización.
En su intervención, precisó que Cuba posee una fábrica de vásculas que debe reanimarse a partir del mismo financiamiento que hoy el país desembolsa para pagar alrededor de 2 millones de dólares en vásculas.
Sobre la demanda de productos empaquetados, argumentó que se prevé la incorporación a la venta de productos empacados, lo cual de forma paulatina irá ofreciéndose y asegurará mayor fiscalización, control, mejor manipulación, traslado y comercialización.
El moderador y director de la Mesa Redonda, Randy Alonso, sugirió revertir el deterioro del equipamiento desde la perspectiva de la industria nacional por lo que significa para la economía del país y por los beneficios de detener este desgaste de una infraestructura tan necesaria.
El ingeniero Antonio López Mandique comentó que es importante también hacer un mayor trabajo en la educación de la sociedad en este tema. “Es preciso trabajar más con las unidades de medida y la utilización del Sistema Internacional de Medición (SIM), que existe en el país, pero que coexiste con el español. “La libra española equivale a 460,093 libras en el SIM y esa aproximación es una fuente de error. En tanto, el kilogramo es 2,17, y se aproxima a 2,2. Ambas mediciones pueden utilizarse par el fraude”.
Explicó que en el país se instauró por decreto el SIM, pero el período especial fracturó su avance y existe un alto número de balanzas y vásculas que no se han podido reponer. “En el comercio minorista se trabaja con el sistema español y con el SIM. Este cambio requiere un proceso de inversión. El fomento de la fabricación de vásculas en Cuba puede dar una sostenibilidad al sistema”.
Según Fernando Arruza, la Resolución vigente en el país, que rige la Normalización y la Metrología, establece que las vásculas que se importan tienen que venir con la documentación que avale que el modelo sea usable en la comercialización.
El Doctor Agustín Inlegui Rodríguez sumó que en los 80, en Cuba existía la Marca estatal de calidad, que era una manera de asegurar los esquemas de certificación compatible con el CAME y países que eran puntales en el comercio de la época. “Actualmente se usa la Marca cubana de conformidad, un sello que ya lo poseen más de 55 productos del país y que eleva la confiabilidad del uso y consumo de los productos. Sin embargo, aún hay que seguir trabajando con las empresas para que certifiquen un mayor número de productos, porque la cifra sigue siendo baja. Y esto también da prestigio al exportador y es reconocible en todo proceso comercial”.
Con respecto a la inspección, refirió que la Oficina Nacional de Normalización cuenta con inspectores para verificar o supervisar, y se ponen multas ante violaciones. Especificó que las inspecciones cubren entidades estatales y no estatales de empresas radicadas en Cuba.
Este trabajo, según expresó, se suma al que despliegan otros sectores, que también cuentan con inspectores para buscar de forma multifactorial las causas, condiciones y deficiencias que afectan la calidad del trabajo.
La Doctora Nancy Frenández, directora de la Oficina Nacional de Normalización, consideró que para la formación de profesionales en este perfil existen 23 politécnicos con más de 700 alumnos, por lo que el relevo está garantizado. “Estos muchachos cuando se gradúen buscarán cumplir los objetivos de calidad y los planes de calidad empresarial, porque son especialistas que acompañan a las administarciones a encontrar soluciones para elevar los mecanismos de eficiencia.
Destacó que es preciso elevar la sensibilidad y la comprensión de los administrativos con estos profesionales, ya que deben entender sus funciones e integrarlos para un mayor aprovechamiento de esta fuerza laboral en el desarrollo económico.
Igualmente aclaró que en las carreras de Ingeniería Química, Mecánica, Industrial y Eléctrica se imparten asignaturas compatibles con esta actividad. Mientras en las universidades se han abierto doctorados y maestrías de calidad, en la especialidad de Normalización.
Informó además que en la actualidad se trabaja en el sector de la Salud, en cuatro carreras básicas, por la incidencia de las mediciones en la calidad del servicio y la seguridad del paciente.
Ayer tuve la posibilidad de ver la Mesa Redonda. Interesante tema tratado, pero valdría la pena preguntarse: ese andamiage de control, fiscalización en las industrias para verificar el pesaje de los productos así como su calidad funciona tal y como debe ser?
Agradezco mucho a esta página los valiosos resúmenes que hace del programa, lo cual actualiza a los que no podemos ver la Mesa en la televisión por algún que otro motivo. Gracias, Julio