Por: Leticia Martínez

Fotos: Roberto Garaicoa

Abril, en Venezuela, despierta heroicidades. Así fue aquel cuarto mes del año 2002 cuando el pueblo venezolano trajo de vuelta a su líder, el Comandante Hugo Chávez, hasta el palacio de Miraflores, luego de un fallido golpe de Estado que pretendió descabezar a la Revolución Bolivariana. Desde entonces abril impulsa a la unidad de los chavistas.

Con el influjo aún fresco de aquellas horas que definieron y radicalizaron el proceso revolucionario en la patria de Bolívar, los venezolanos regresan a las calles para defender al país con su marea roja desde la trinchera de todos los días. Jornadas de movilización permanente desde este 10 de abril y durante toda la semana, en ocasión del aniversario 17 de la insurrección popular que derrotó aquella conjura, parecen las respuestas más fuertes para quienes, dentro y fuera de Venezuela, empujan hacia un nuevo golpe dirigido milimétricamente desde Estados Unidos.

Qué está sucediendo en Venezuela fue la pregunta que guio las palabras de los panelistas de la Mesa Redonda que, en su edición de este lunes, la número 3966, comenzaron la semana trayendo al espacio televisivo una actualización de la situación de ese importante país latinoamericano, el cual, precisó desde sus primeras palabras el periodista cubano, Jorge Legañoa Alonso, “vuelve a la normalidad”.

A su criterio, el país se va recuperando poco a poco del sabotaje eléctrico que dejó más del 70% del territorio sin electricidad. Sin embargo, a la par se mantienen las sanciones del gobierno de Estados Unidos a la Venezuela irredenta. El último botón de muestra fueron las recientes multas a 34 barcos que transportan combustible desde esa nación latinoamericana hacia Cuba, una forma también de continuar ahogando económicamente a la isla del Caribe.

El vicepresidente de la Unión de Periodistas de Cuba y asiduo participante en los debates que abordan el tema venezolano, consideró que el país vive en estos días una ola muy positiva al conmemorarse el aniversario del golpe de Estado, hecho que se ha convertido en un catalizador de las movilizaciones de los próximos días.

Simultáneamente, la gira del canciller Jorge Arreaza por varios países de África, Medio Oriente y Europa permitió fortalecer y diversificar las relaciones de Venezuela con el mundo ante el bloqueo del Gobierno de Estados Unidos que pretende el aislamiento de la nación. El paralelismo con la situación de Cuba en aquellos años iniciales de la década del 60 fue puesto sobre la mesa por el panelista, quien recordó, por ejemplo, la operación Verdad emprendida entonces por el Comandante en Jefe.

Al papel decisivo del Partido Socialista Unido de Venezuela en los momentos más álgidos de esta crisis, dedicó parte de su intervención Legañoa Alonso, para quien esa organización política se ha crecido en medio de la adversidad. “Ha tenido el mérito de mantener a la gente en la calle, bajo el principio de que una calle tomada por los revolucionarios no es una calle perdida. Chávez decía que era lucha, batalla y victoria”.

Sobre la figura de Juan Guaidó consideró que “se ha ido desinflando” y citó un reciente trabajo publicado en el periódico español El País, habitualmente hostil contra la Revolución Chavista, donde lo catalogaban como el presidente que no gobierna, que no manda, que firma decretos y nombra embajadores que nada pueden hacer.

Al respecto, Marina Menéndez, periodista del diario Juventud Rebelde, precisó que “Guaidó es una carta claramente fracasada” y el hecho de que le hayan retirado la inmunidad parlamentaria indica que se tomará alguna decisión con él, “de la cual es merecedor, porque violentó las medidas cautelares impuestas por el Tribunal Supremo, viajó fuera del país y ha estado llamando a la intervención extranjera en Venezuela”.

Ambos panelistas hablaron de los habituales llamados al diálogo planteados por el Presidente Nicolás Maduro y la negativa de la oposición a sentarse en la mesa de negociaciones; el papel tristemente célebre jugado por gobiernos como Colombia y Chile, que se han plegado a los designios de la Casa Blanca; el congelamiento desfachatado de más de 30 mil millones de dólares que pertenecen a Venezuela; y el ejercicio de soberanía que han ejercido en su postura hacia el país sudamericano naciones como Rusia, China y otras del Caribe y África.

En la Mesa Redonda de este lunes se supo, además, sobre otro consejo convocado por la desvergonzada OEA para analizar, de nuevo, la situación venezolana. Se prevé que en la agenda estén las acusaciones por el convenio de colaboración militar entre Venezuela y Rusia, producto de tratados legales previos de ambos países, y la presentación del representante de Guaidó ante el circo del “ministerio de colonias”.

También en el programa televisivo se trataron otros temas que marcan la agenda informativa de la semana en el continente europeo, como es el caso del llevado y traído Brexit, así como los escándalos que rodean las próximas elecciones en España, ambos abordados por la periodista Elsa Claro, habitual ponente de estos asuntos.

Sobre el primero explicó que las dos Cámaras del Parlamento británico aprobaron una ley para impedir a toda costa un Brexit sin acuerdo. Esta medida fuerza a la primera ministra Theresa May a solicitar otra prórroga del Brexit en la cumbre extraordinaria que el Consejo Europeo tiene previsto celebrar en Bruselas el 10 de abril.

Acotó la panelista que ese acuerdo ha tenido la aprobación inmediata de la Reina, cuestión poco frecuente pero que evidencia el hecho de que la Monarquía se ha percatado de las urgencias y los peligros que esta situación conlleva y ha tratado de canalizarla.

En tanto, sobre las elecciones en España, pactadas para el próximo 28 de abril, refirió que han estado signadas por escándalos de espionajes, el más reciente a través de las cámaras de vigilancia de la residencia de Pablo Iglesias e Irene Montero, líderes de PODEMOS.

Elsa Claro mencionó el complejo escenario político de España, marcado por la fragmentación, el surgimiento de nuevos partidos y el ascenso de la ultraderecha con la irrupción del partido Vox.

Las encuestas, acotó, dan prominencia al PSOE, pero no con un porcentaje suficiente como para gobernar solo, por lo que tendría que negociar para formar gobierno. Como se habló de pronósticos, que muchas veces no coinciden con la realidad y ejemplos sobran en los últimos tiempos de la desconexión entre sondeos y resultados, el tema volverá en los próximos días a la Mesa Redonda luego de que el voto español sea finalmente depositado en las urnas.