Cuba mantiene una política de tolerancia cero a las drogas (+ Video)
Para informar sobre las acciones del país en el enfrentamiento del tráfico de drogas y la prevención ante este flagelo, comparecieron este viernes en la Mesa Redonda autoridades de los Ministerios del Interior, Justicia, Educación y Salud Pública.
Mientras el mundo enfrenta la pandemia de covid-19, el flagelo de la droga crece y se desarrolla, dijo al comenzar su intervención en la Mesa Redonda el coronel Héctor González Hernández, segundo jefe del órgano especializado de Enfrentamiento Antidroga del DTI.
“Hay un incremento de la producción y del consumo a nivel mundial. Organismos internacionales reflejan que existe una reducción de la percepción de riesgo”, afirmó.
El coronel se refirió al peligroso crecimiento de las nuevas sustancias psicoactivas, como las drogas sintéticas, que “invaden cada rincón del planeta”.
Por ejemplo, Estados Unidos registró el mayor número de fallecidos de su historia por sobredosis de este tipo de sustancias. Entre abril de 2020 y el mismo mes de 2021 se reportaron más de 100 000 muertes, la mayoría por la determinada pandemia de los opiáceos.
Se aprecia también un mayor empleo de internet, no solo en cuanto a consumo sino también a información sobre cómo hacer y producir droga, advirtió y recalcó que los traficantes han tenido una rápida adaptación a todos los cambios asociados a la pandemia.
González Hernández comentó, además, acerca del debate que existe a nivel de Naciones Unidas sobre la legalización de las drogas, en particular la marihuana con fines terapéuticos y medicinales.
Actualmente más de 30 países han legalizado este consumo, gran parte de ellos cercanos a nuestro continente, apuntó. “Pero estas políticas, lejos de reducir el fenómeno, lo que han hecho es agravarlo”.
El coronel recordó que el flagelo de la droga continúa amenazando la seguridad internacional de todos los países. “Ninguno libra de ello. Es un negocio muy lucrativo que tiene capacidades para aliarse rápidamente con otras modalidades del crimen organizado. Destruye estados, economías y familias”.
Al intervenir en el espacio televisivo, el jefe del departamento de Derecho Internacional del Ministerio de Justicia (MINJUS), Alexis Batista Segrera, aludió a un informe de Naciones Unidas del 2020, en el cual se informa que:
“El cannabis es más potente, pero cada vez menos jóvenes lo perciben como nocivo. En los últimos 20 años la potencia de los productos del cannabis casi se ha cuadriplicado en los Estados Unidos y se ha duplicado en Europa”.
Refiriéndose al mismo informe, Batista Segrera advirtió sobre la poca percepción de riesgo y cómo ello puede agravar los efectos negativos de esta droga en las generaciones jóvenes.
Según el reporte el número de personas que consume drogas ha aumentado un 22% en los últimos 10 años.
Los sistemas de atención de la salud se enfrentan a una tarea cada vez más ardua, ya que se calcula que unos 36 millones de personas sufrían trastornos por consumo de drogas en 2019, cifra que en 2010 era de 27 millones, según las estimaciones correspondientes a ese año. Esto supone un aumento del 0,6 al 0,7% de la población mundial, también recoge el informe de Naciones Unidas.
De igual modo, los datos reflejan que en América del Norte casi 50 000 personas murieron como consecuencia de sobredosis atribuidas a opioides en 2019, más del doble de la cifra registrada en 2010.
En comparación, en la Unión Europea, la cifra de las muertes por sobredosis relacionada con las drogas (en su mayoría relacionadas con el consumo de opioides) fue de 8 300 en 2018, pese a que la población es mayor.
En otro momento de la Mesa Redonda, el coronel Héctor González Hernández, segundo jefe del órgano especializado de Enfrentamiento Antidroga del DTI, se refirió a la existencia de rutas de narcotráfico internacional cercanas a nuestras aguas jurisdiccionales, las cuales son violadas en ocasiones por un grupo de traficantes, que penetran a Cuba para llegar a su destino y trasladar las drogas al Norte.
El coronel precisó que han continuado arribando al país paquetes arrastrados por las corrientes marinas, los cuales representan hoy el mayor volumen que se incauta a nivel nacional, y un peligro potencial en la articulación del tráfico interno que se pueda generar.
“El 2021 estuvo caracterizado por el enfrentamiento a intentos de introducción de drogas por la vía marítima y aérea. También porque se desmantelaron cultivos de marihuana y se neutralizaron acciones de tráfico interno. Fue característica la persistencia e intencionalidad de emigrados cubanos y extranjeros de organizar operaciones de introducción de drogas hacia el territorio nacional, para lo cual reacomodaron y diversificaron su actuar en varios escenarios, como la frontera aérea, los envíos postales y las cargas no acompañadas”.
Durante el año pasado -continuó- tuvo lugar una tendencia peligrosa: la combinación de operaciones de tráfico de personas con la introducción de drogas al país mediante lanchas rápidas.
Como resultado del enfrentamiento a este flagelo, se incautaron el año pasado 4 162.23 kg de droga, la mayoría de marihuana (80%), puntualizó.
Otras drogas incautadas fueron la cocaína, el hachís, el crack y el cannabinoides sintético.
“La mayor cantidad de la droga que se ocupó -explicó- tiene que ver con los 295 hechos de recalo que acontecieron en el territorio nacional, donde fueron ocupados 2 338.64 kg de drogas”.
El coronel dijo también que, a pesar del esfuerzo de las tropas guardafronteras y todos los destacamentos e instituciones que participan en este enfrentamiento, se investigaron 17 hechos de escamoteo, en los cuales fueron detenidos y sancionados un grupo de personas que se apoderaron de esos paquetes con fines delictivos. En ese concepto se lograron recuperar 35.06 kg.
Destacó la participación de las tropas guardafronteras en la neutralización y captura de medios navales como lanchas rápidas. “Tres de ellas estuvieron vinculadas a esta doble operación de introducir drogas y vincularse al tráfico de personas que estuvieron dirigidas por emigrados cubanos radicados fundamentalmente en Estados Unidos, Jamaica y México”.
“Otras dos lanchas capturadas, en las cuales también estaban involucrados seis ciudadanos bahamenses, tenían que ver con esas operaciones no dirigidas hacia el territorio nacional, que violando las aguas jurisdiccionales cubanas intentaban trasladar hacia Estados Unidos más de una tonelada de droga”, señaló.
El coronel ahondó sobre los incidentes ocurridos por las fronteras aéreas. “Un grupo de emigrados cubanos con extranjeros han continuado perfeccionando su modo de operar y enmascarar. En ocasiones subestimaron la capacidad de la Aduana y las fuerzas del interior para describir sus intentos”.
González Hernández informó que fueron neutralizadas 21 operaciones por la vía aérea en diferentes escenarios, como pasajeros que intentaron introducir droga de manera ingestada, en su equipaje o en artículos electrodomésticos. “También en motos eléctricas traídas por carga internacional; y en un grupo de paquetes que se enviaron por la vía postal como la cocaína mezclada con chocolate o en gelatina, que requirió todo el esfuerzo y el análisis conjunto de las fuerzas del orden”.
En estas operaciones -puntualizó- se ocuparon 67.59 kg de drogas y fueron detenidas 41 personas entre cubanos y extranjeros.
Asimismo, se encontró droga dentro de zapatos o figuras religiosas; y en cannabinoides sintéticos desde Estados Unidos, que se introdujo de manera líquida en pomos de perfume o en sazones.
Con respecto al orden interno, González Hernández precisó que se enfrentaron 97 sembradillos de cultivo de marihuana, fundamentalmente en el Oriente del país. Fueron ocupados 32 868 plantas de marihuana y más de 48 000 semillas.
“Los cultivos de marihuana y los escamoteos de recalo fueron las principales fuentes de abasto para la articulación de determinadas cadenas delictivas en el mercado interno. Fueron neutralizados más de 121 hechos y se ocuparon 165.63 kg de droga”.
El coronel destacó una investigación que, como parte de la vigilancia permanente y la respuesta oportuna de las fuerzas especializadas del Minint, permitieron desmantelar una red delictiva, organizada por cubanos radicados en el exterior con base de apoyos en algunos países del aérea y en Cuba.
“Una red que tenía la intención de introducir varios tipos de drogas y que empleó todos los escenarios: pasajeros, carga internacional y lanchas rápidas”.
Como resultado de este trabajo, fueron detenidas más de 26 personas, capturada una lancha y se evitó que 303 kg de droga contaminaran nuestro país, informó.
En 2021 -resaltó- se confirma la voluntad política del gobierno de fortalecer la prevención y el enfrentamiento al tráfico de drogas.
Alexis Batista Segrera, jefe del Departamento de Derecho Internacional del Ministerio de Justicia, se refirió a la creación el 3 de marzo de 1989 de la Comisión Nacional de Drogas, mediante el Acuerdo 3072 del Consejo de Ministros, y su reestructuración, en 1998, por Acuerdo del Consejo de Estado.
Explicó que en esta Comisión intervienen organismos como los ministerios de Justicia, de Salud Pública, de Educación y de Educación Superior, de Relaciones Exteriores y del Interior, así como la Fiscalía General y la Aduana General de la República.
Añadió que la Comisión tiene entre sus principales objetivos la coordinación de intereses y la concertación de esfuerzos entre los organismos y demás instituciones relacionadas con la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas, y la contribución al cumplimiento de los compromisos internacionales contraídos por el país en esta materia.
Cuba defiende una política de tolerancia cero respecto al uso y tráfico de drogas, de enfrentamiento directo a hechos relacionados con estas prácticas, de prevención y educación de la sociendad como columna vertebral, con participación popular, al tiempo que promueve la reinserción social de las personas sancionadas por delitos vinculados a las drogas, puntualizó el especialista del Minjus.
Afirmó que el país cuenta con un efectivo sistema jurídico y judicial y otorga gran importancia a la preparación y capacitación de las fuerzas encargadas de hacer cumplir la Ley. Realiza, además, un control de los precursores y sustancias químico bases y mantiene vínculos de cooperación internacional en los ámbitos policial, aduanal y judicial.
El jurista señaló que Cuba es signataria de instrumentos jurídicos multilaterales en materia de drogas aprobados por Naciones Unidas como:
- La Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes, enmendada por el Protocolo de 1972, por Adhesión el 30 de agosto de 1962.
- El Convenio de Sustancias Sicotrópicas de 1971, por Adhesión en fecha 26 de abril de 1976.
- El Convenio de Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Sicotrópicas de 1988, firmado el 7 de abril de 1989.
Igualmente, en el ámbito bilateral Cuba ha firmado 11 tratados de extradición, 34 de asistencia jurídica, 42 de drogas y 31 de traslado de sancionados.
Batista Segrera señaló como retos en la labor de la Comisión Nacional, continuar afianzando la posición de Cuba en el sistema de abordaje al Programa Mundial de Drogas basado en la prevención y la creación de un observatorio nacional de drogas.
Por su parte, Iovanny García Enrique, asesor del Trabajo Preventivo del Ministerio de Educación, abordó la estrategia de prevención desempeñada por el sector educacional en el país, principalmente en los niveles de enseñanza secundaria, técnica-profesional y preuniversitaria, donde se han registrado en los últimos años la mayor parte de los hechos de droga en los que han participado estudiantes.
Advirtió que aún en la etapa de pandemia se reportaron algunos hechos de tenencia o expendio de drogas que vincularon a estudiantes, siendo la marihuana la sustancia psicotrópica más empleada.
García Enrique pormenorizó que desde el año 2015 al 2021 la tendencia ha sido a la disminución en la cantidad de hechos y en el número de menores involucrados, y que la mayor parte de los eventos han ocurrido fuera de las instuciones de educación.
Indicó que el sistema de educación cubano otorga la máxima prioridad a este tema y trabaja con las comisiones de asignaturas para abordarlo por la vía curricular de manera coherente.
Se organizan sistemáticamente cursos de capacitación para profesores y directivos, añadió al detallar que en el año 2021 se capacitaron más de 26 000 docentes en esta materia.
Igualmente se realizan cursos para las familias con el propósito de fomentar la cultura de rechazo al consumo de las drogas y estupefacientes, subrayó el funcionario del MINED.
Informó que para el nuevo curso lectivo se prepara una capacitación en materia del uso médico y recreativo de la cannabis o marihuana, en consonancia con la política de cero tolerancia al uso y tráfico de drogas del Estado cubano.
Al finalizar la Mesa Redonda, la doctora Carmen Borrego Calzadilla, jefa de la Sección de Salud Mental del Ministerio de Salud Pública, enfatizó en la labor preventiva, de control y fiscalización desemepañada por el sistema de atención primaria de salud en materia de drogas.
Señaló entre las principales acciones realizadas en la última etapa la ampliación del servicio de consejería profesional que se ofrece desde la Línea confidencial antidrogas, la creación y divulgación de materiales didácticos dirigidos fundamentalmente a los jóvenes, así como acciones de promoción de buenas prácticas de salud a través de las redes sociales.
Subrayó que el sistema de salud cubano cuenta con casas de atención a la salud mental en cada municipio del país, las cuales contribuyen a la atención integral de las personas afectadas por las drogas y sus familiares, y al trabajo de concientización social y creación de la percepción de riesgo
Autoridades de los Ministerios del Interior, Justicia, Educación y Salud Pública comparecieron este viernes en la Mesa Redonda para informar sobre las acciones del país en el enfrentamiento del tráfico de drogas y la prevención ante este flagelo.
Mesa Redonda/Roberto Garaicoa
donde puedo encontrar la mesa redonda del dia de ayer 21/2/22