La fiebre del béisbol llegó a la más occidental de las provincias cubanas y miles de fanáticos aguardan ilusionados hoy el reinicio de las actividades.

Luego del partido del último domingo, en el José Ramón Cepero de Ciego de Avila, en el cual el equipo pinareño venció por cerrado 4-3 a los anfitriones, los seguidores de los llamados Pativerdes sueñan con otro título para sus vitrinas.

Para Lourdes Jaramillo, dueña de una cafetería en una de las calles principales de esta ciudad, 162 kilómetros al oeste de la capital, el equipo que dirige Alfonso Urquiola ganará la serie.

Sabemos todos que no será fácil, porque los avileños van por su primer título y tienen mucha ambición, pero con el juego del equipo y el apoyo nuestro todo es posible, recordó Jaramillo.

Jelis Herrera, estudiante de secundaria, tiene aún más fe y confía en que la serie final se termine acá, en el estadio Capitán San Luis, aunque para ello los pinareños tengan que ganar los tres choques en casa.

No es imposible. Ha pasado muchas veces en todas las pelotas del mundo. Lo importante es ganar el de mañana y meterle presión a los rivales. Y luego ir juego a juego.

Para Herrera, quien no piensa perderse ninguno de los desafíos, la labor de Urquiola ha sido sensacional y lamenta no haberlo visto nunca como jugador, porque tiene las mejores referencias suyas como segunda base.

Juan Bejerano, quien se encuentra de paso por esta ciudad aunque vive en San Juan y Martínez, reconoce que el equipo de su provincia, con nueve coronas nacionales, tendrá que sudar el uniforme en cada partido porque Ciego de Avila no regalará nada.

Otrora jugador de béisbol, Bejerano piensa que Urquiola tendrá un trabajo duro y necesitará de Yosvani Peraza como designado. Para el equipo es importante que Peraza juegue, porque un batazo suyo puede cambiar el partido en un minuto.

No obstante, creo que Pinar ganará, que será campeón, aseguró Bejerano, quien dice sentir nostalgia de sus años de jugador y del apoyo que siempre recibió de la afición cuando jugó en casa.

Pinar del Río y Ciego de Avila marchan empatados a un triunfo por bando en una serie pactada al mejor de siete y a la cual le faltan tres choques en tierras pinareñas y otros dos, solo de ser necesarios, en el José Ramón Cepero, por donde se inició.

Pinar del Río no gana un título desde 1998 con el propio Urquiola desde el puesto de mando, cuando venció a Villa Clara, y llegó por última vez a una ronda por el título hace tres temporadas, pero cayó en cuatro partidos ante Santiago de Cuba.

(Con información de Prensa Latina)