Con un acto solemne en el Consejo Nacional Electoral (CNE), comenzó hoy a las 06:37 horas el referendo y consulta popular en que 11,2 millones de ecuatorianos decidirán con su voto sobre 10 preguntas una reforma al sistema judicial.

Al declarar abierto el proceso en la sede del CNE en el norte de esta capital, su presidente, Omar Simon, llamó a toda la ciudadanía a ejercer ese derecho con alegría, como verdadera fiesta popular democrática.

En presencia de los representantes de los poderes del Estado, los principales mandos de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional, el cuerpo diplomático acreditado en el país y actores políticos de esta campaña, quedó oficialmente abierta la jornada de consulta.

Al intervenir en la parte final del breve acto, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, afirmó que “nadie va a detener este huracán de soberanía y dignidad”, y advirtió a quienes conspiran en las sombras que “el pueblo estará en las calles como lo está hoy”. Destacó la voluntad popular de defender “el mayor proceso democrático que vive el país, desde los tiempos de Eloy Alfaro”, y felicitó el enorme esfuerzo y eficaz trabajo del CNE sus miembros y funcionarios y los ciudadanos que participarán hoy en las juntas receptoras de votos.

“Desde ya auguramos todos los éxitos en la organización de esta jornada”, afirmó Correa y llamó a los ecuatorianos de la Costa, Sierra, Amazonía, Galápagos y emigrantes, “a votar con dignidad, con fe en nosotros mismos, con alegría y con la Patria en el centro del pecho”.

Unos 40 mil policías y 37 mil efectivos de las Fuerzas Armadas garantizan la seguridad y transparencia de este ejercicio democrático, en el cual participan directamente unos 207 mil ciudadanos elegidos al azar como miembros de 29 mil 800 juntas receptoras de votos.

Según Simon, alrededor de las ocho de esta noche se tendrán los resultados preliminares de la votación entre el Sí y el No a las 10 preguntas, cinco de las cuales implican reformas constitucionales y una transformación profunda al sistema judicial.

Objetivo central de esta consulta popular es garantizar los mecanismos que permitan una lucha eficaz contra la delincuencia, la corrupción, la responsabilidad ulterior de los medios de prensa, combatir el enriquecimiento ilícito y eliminar los juegos de azar.

(Con información de Prensa Latina)