Cuba denunció hoy la doble moral y rasero de algunos gobiernos en materia de protección de civiles y rechazó que se invoque ese concepto como pretexto para conseguir espurios intereses políticos y económicos.

Esa postura fue subrayada este martes por el representante permanente de Cuba ante Naciones Unidas, Pedro Núñez Mosquera, al intervenir en una sesión del Consejo de Seguridad sobre el tema Protección de Civiles.

Como ejemplo de su denuncia, el diplomático señaló la implementación de la resolución 1973 de ese órgano sobre Libia.

Dijo que nada en ese documento autoriza el bombardeo de ciudades y áreas pobladas con el pretexto de acciones humanitarias o de proteger a civiles.

Esas acciones traen por resultado la muerte de más civiles inocentes, la destrucción de escuelas, casas y hospitales y el aumento del sufrimiento de la población civil, apuntó.

El embajador cubano preguntó cómo justificar los bombardeos indiscriminados, el uso de armas y aviones sofisticados y la muerte de personas inocentes, incluso niños, con el pretexto de proteger a otros civiles, también inocentes .

Igualmente, destacó la ausencia de pronunciamientos de la ONU para el amparo de los civiles que son víctimas de la agresión de la OTAN contra Libia, un país soberano.

Y calificó de escandaloso ese silencio frente al asesinato de inocentes, incluidos mujeres y niños, por parte de las fuerzas extranjeras que agreden a ese país.

En contraposición señaló la pasividad e inoperancia del Consejo de Seguridad frente a la muerte de palestinos inocentes, víctimas del uso excesivo e indiscriminado de la fuerza.

Advirtió que quedan muchos aspectos por aclarar en esa materia, entre ellos quién decide cuándo hay necesidad de proteger, sobre qué bases y criterios se determina las formas de actuar y cuáles son los límites del término.

Cómo evitar que el tema se utilice con fines intervencionistas e injerencistas, indagó.

Cuba rechaza que bajo el pretexto del manto humanitario se adopten medidas violatorias de la soberanía de los Estados, la Carta de la ONU y el Derecho Internacional, insistió al reiterar la condena a la agresión sea cual fuere el ropaje tras el que se oculte.

Núñez Mosquera alertó que algunos gobiernos han pretendido desconocer el respeto a la soberanía de los Estados como piedra angular en las relaciones internacionales que no puede ser desechada ni menoscabada bajo ningún concepto.

La ONU no ha podido cumplir su papel de ayudar y proteger a los millones de personas que lo necesitan, particularmente en los países subdesarrollados, debido a la falta de voluntad política manifestada por los mismos que nos han impuesto un orden económico internacional injusto e inequitativo, precisó.

Además, por la selectividad y los dobles raseros, la creciente limitación de recursos para el desarrollo y la distorsión en la labor de algunos de sus órganos, en particular el Consejo de Seguridad, en detrimento de la Asamblea General, aseguró.

Habría que hacer una profunda reforma del Consejo de Seguridad, incluidos su composición y métodos de trabajo, para garantizar una actuación no abusiva y no selectiva en lo que a la protección de civiles se refiere, opinó.

El representante cubano reafirmó que el consentimiento de los Estados para cualquier medida que se pretenda adoptar en relación con su población civil es un principio inviolable que tiene que ser plenamente respetado.

De lo contrario nos expondríamos, como ha ocurrido muchas veces y continúa ocurriendo, a que se lleven a cabo verdaderas intervenciones militares en los conflictos internos y en lamentables guerras civiles bajo la supuesta anuencia de la ONU, concluyó.

(Con información de Prensa Latina)