El viceministro de Exteriores de Cuba Abelardo Moreno destacó hoy que el desarrollo integral de la niñez constituye una prioridad absoluta de su país, que se traduce en hechos y cifras reconocidos internacionalmente.

Para la Revolución cubana los derechos de niñas, niños y adolescentes se convirtieron desde sus inicios hace 52 años en una bandera permanente de conquistas que se reflejan en la actualidad en todos los dominios, comentó Moreno.

En entrevista exclusiva con Prensa Latina, el jefe de delegación de la isla caribeña ante la 57 sesión del Comité de Derechos del Niño (CRC, por sus siglas inglés) de Naciones Unidas, señaló que asistir a este evento es un motivo de satisfacción.

A pesar de sufrir el bloqueo económico de Estados Unidos, de ser un país en vías de desarrollo, Cuba exhibe resultados elocuentes en este dominio, elogiados por la Unicef, la Unesco y otras entidades, apuntó.

Concretamente, la Organización de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha encomiado en reiteradas ocasiones los altos índices de educación, salud, deportes, cultura y protección de la niñez de nuestro país, subrayó.

Moreno explicó que no viene a Ginebra con una expectativa especial respecto al CRC, porque en definitiva la isla lleva un adelanto de más de 30 años en el cumplimiento de la Convención sobre la Niñez adoptada desde su entrada en vigor.

“Nosotros tenemos por norma asumir estrictamente las obligaciones jurídicas que firmamos y sabemos que muchas naciones y personalidades aplauden los esfuerzos realizados, como una tasa de mortalidad infantil extraordinaria de 4,5 por mil nacidos vivos en 2010”, acotó.

El diplomático precisó que al volver sobre el asunto del cerco que mantiene Washington a Cuba son notorias las afectaciones que conlleva en el acceso a medicamentos y equipos, también para sectores de infantes con discapacidades o limitaciones físicas.

No obstante, seguimos adelante, asimismo para ayudar a casi un centenar de países en todos los terrenos con impacto directo en la niñez, junto con los afectados de Chernobil, uno de los más bellos programas de la Revolución, indicó.

Miles de niños han disfrutado de esta colaboración que empezó poco después del accidente nuclear en 1986; se han intervenido quirúrgicamente a 300 y se siguen tratamientos prolongados a otros en un gesto humano encomiable, concluyó.

(Con información de Prensa Latina)