La obra de Pablo Picasso en Francia parece interminable, según hallazgos de dibujos, bocetos y pinturas del artista malagueño que mantienen de patas arriba a investigadores privados y de la policía.

El asunto gira alrededor de 271 cuadros que supuestamente Picasso (Málaga, España, 25 10 1881-Mougins, Francia, 8 4 1973), obsequió a Maurice Bresnu, su chófer durante 22 años, de quien la Fiscalía gala sospecha robó las pinturas.

Pero el problema es bastante complicado. Bresnu y su esposa Jacqueline, fallecieron en 1991 y 2008, respectivamente, mientras el electricista Pierre Le Guennec y su compañera sentimental Danielle reclaman la valiosa herencia.

En este embrollo, los Le Guennec aparecen como primos lejanos de Maurice Bresnu y pidieron ayuda a la propia familia Picasso en 2010 para identificar las obras y ponerle precio.

Ahora un hombre llamado Domingo, de origen portugués, acusó a los Bresnu de apropiarse de los trabajos de Picasso. Sin embargo, muchos de ellos aparecen dedicados por el pintor y otros no llevan su firma.

El famoso lote sigue a la espera de una definición de futuro, mientras los Le Guennec aguardan tranquilos por al menos una jugosa recompensa y con la certeza de que nada lo señala como probables ladrones del maestro malagueño.

Por el momento sigue detenida la venta del paquete de los Bresnu    prevista para diciembre último- en la casa de subastas Drouot de París en razón de las pesquisas policiales.

(Con información de Prensa Latina)