Un día antes de la fiesta de la Constitución, la emblemática plaza madrileña de la Puerta de Sol ha vuelto a ser escenario de una nueva manifestación convocada por el movimiento 15-M. La concentración fue una respuesta al brutal operativo policial desplegado por 200 agentes que desalojaron a un centenar de desahuciados, incluyendo familias con ancianos y niños, que en octubre ocuparon el Hotel Madrid y el Taetro Albéniz al no tener donde vivir. El corresponsal de RT, Jaime Góngora, nos cuenta de primera mano lo que está pasando en el lugar de los hechos.

Según ha podido comprobar nuestro corresponsal, en la plaza se congregaron unas 2.000 personas que hicieron una sentada frente al cordón policial antes de que los agentes cargaran contra los manifestantes. Algunos indignados procedieron incluso a cortar al tráfico para protestar por “la vergüenza” de los desalojos llevados a cabo por los agentes.

“Los manifestantes lanzan proclamas contra la presidenta de la Comunidad de Madrid y provocan a la policía al grito de ‘asesinos a sueldo'”, cuenta Jaime Góngora.

Los ‘indignados’ recorrieron también las calles del centro de la capital española deteniéndose ante varios comercios al grito de ‘Aaaa, antí, anticapitalistas’. Durante el recorrido, los manifestantes invitaban a las personas que se encontraban en la calle a sumarse a la marcha al grito de “A ti que estás mirando, también te están robando”.

“Yo creo que debe venir más gente, porque lo que estamos haciendo aquí es luchar por una vivienda, es justo”, comentó a RT una activista.

Los activistas concluyeron sus movilizaciones con la ocupación de un nuevo edificio. Una vez dentro del inmueble, uno de los ‘indignados’ se ha asomado al balcón del segundo piso y el resto ha respondido lanzando una de sus principales consignas: ‘Casa ocupada, familia desahuciada”.

Mañana de ‘visitas’ o desayuno con porras

En las primeras horas del lunes, unos 200 agentes antidisturbios irrumpieron en el antiguo Hotel Madrid y desalojaron a 93 ‘ocupas’, así como a otros diez personas de viviendas situadas en las plantas superiores del Teatro Albéniz. Un funcionario indicó que a todos ellos se les imputa el delito de usurpación de bienes inmuebles.

Durante la operación, que duró dos horas, fueron detenidas diez personas, nueve de ellas por infracción de la Ley de Extranjería y la décima por posesión de ocho plantas de marihuana, que fueron halladas en el interior del edificio.

Las víctimas del desalojo cuentan a RT que se despertaron cuando los agentes irrumpieron en el edificio abriéndose paso “a porrazos y a patadas que lanzaban contra las puertas con una agresividad impresionante”. La acción fue tan fulminante que siquiera tuvieron tiempo para recoger sus pertenencias.

Entre los afectados hay varias familias con ancianos y niños que se habían instalado en alguno de los dos edificios después de ser desahuciados. “¿A dónde va a ir esa gente?”, se lamentaba uno de los ‘ocupas’.

Después de la operación un grupo de obreros acompañado por agentes de policía ha tapiado las entradas del hotel para impedir que los indignados vuelvan a entrar. Sin embargo, los activistas que abandonaron su cobijo de forma pacífica, han señalado que la medida es “inútil”, porque “dentro de unas horas o incluso esta misma noche” dicen que volverán.

Además del Hotel Madrid y el Teatro Albéniz, la Policía ha desalojado el mercado denominado ‘Espacio Vecinal Montamarta’, que había sido ocupado por vecinos de la asamblea del barrio hace dos semanas.

Según informa uno de los vecinos, la Policía Municipal ha llegado sin orden judicial. “Una vez allí, los agentes han roto las cerraduras, han entrado y lo están tapiando para impedir el acceso”, agregó.

De récord en récord

España está cada vez más endeudada con una cuarta parte de los hogares por debajo del umbral de la pobreza. De ahí que no sorprenda que la cifra de desahucios esté creciendo a un ritmo histórico. Los datos de los últimos meses superan a los anteriores, que ya eran de récord. Según el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en el primer semestre del año han tenido lugar 32.010 desahucios.

Otras estimaciones resultan aún más inquietantes, ya que según un estudio reciente de Alteba (compañía especializada en gestión de activos inmobiliarios) otras 225.000 familias van camino de perder su vivienda.

(Con información de Actualidad RT y TeleSUR)