Un atacante suicida detonó la potente carga explosiva que portaba frente a la estación policial de al-Midan, barrio en el oeste de Damasco, provocando 25 muertos y 46 heridos, en el tercer atentado terrorista en la ciudad en dos semanas.

La potente explosión destruyó coches policiales; entre las víctimas la mayoría son civiles, y 15 de los cadáveres quedaron irreconocibles, explicaron paramédicos a Prensa Latina.

El atentado ocurrió en torno a las 11:30 hora local antes de la oración musulmana del mediodía, en el momento en que se realizaba un cambio de turno del personal policial.

Prensa Latina constató en el sitio que partes de cuerpos estaban dispersas por el lugar de la explosión, algunas incrustadas en las columnas y el techo del paso a nivel adjunto a la estación.

En el momento en que llegó un grupo de periodistas internacionales, personal paramédico recogía restos humanos, en tanto peritos iniciaban las investigaciones.

Decenas de lugareños acudieron al lugar hasta concentrarse varios cientos frente al recinto policial donde se manifestaron contra la violencia terrorista y dieron vítores de apoyo al presidente Bashar al-Assad y a sus fuerzas de seguridad.

La onda expansiva de la explosión destruyó los ventanales del lado occidental de la estación y los cristales hirieron a varios integrantes del personal de oficina.

La potente explosión ocurrió muy cerca de la escuela de segunda enseñanza Hassan al-Hakeem, en un populoso barrio conocido por sus dulcerías en el occidente de la capital, y rompió la paz y tranquilidad que vive el pueblo este viernes, día de asueto islámico.

Este fue el tercer atentado terrorista que sufre la ciudad en dos semanas.

El pasado viernes 23 de diciembre desconocidos detonaron dos coches-bomba contra sendas dependencias de la seguridad siria, que dejaron 44 muertos y 166 heridos, entre civiles y militares.

Estas acciones ratifican una escalada de la violencia terrorista organizada desde el exterior, financiada y armada por centros de poder en Occidente y de intereses en la región árabe, que se han confabulado contra el gobierno sirio, dijeron a Prensa Latina funcionarios gubernamentales.

El Ministerio del Interior declaró que el modo de operación, selección de los blancos y ejecución de los atentados en horario escogido para causar la mayor cantidad de víctimas, muestran que tienen la huella de la red al-Qaeda, aseguran las fuentes consultadas.

(Con información de Prensa Latina)