La organización Corporación Humanas presentó una querella criminal contra la policía de Carabineros por la violencia sexual ejercida hacia una estudiante de 14 años, que estuvo grave al ser pateada en la vagina.

“Cuatro carabineros me tomaron y uno me golpeó en la vagina y en la espalda”, relató la menor, identificada como Javiera Sepúlveda, estudiante del Liceo Darío Salas de esta capital.

La agresión se produjo el pasado 28 de octubre, cuando un grupo de estudiantes secundarios instaló un campamento junto al río Mapocho en rechazo al modelo educacional, hecho que fue reprimido por la policía uniformada.

“Me tuvieron que parar entre dos compañeras, porque yo no me podía parar, me dolía mucho la boca del estómago y la vagina”, agregó la estudiante en su declaración.

Manifestó que incluso la golpiza continuó luego en una patrulla policial, mientras iba arrestada: “Había dos carabineros y una mujer y la mujer me iba pegando y había música fuerte para que la gente no escuchara mis gritos”.

La abogada de Corporación Humanas Patricia Rada, quien presentó la querella, comentó que Javiera estaba con sus compañeros manifestándose en el lecho del Mapocho y en el forcejeo con la policía cayó al suelo.

Es una niña pequeña de contextura, la agarran cuatro carabineros, uno por cada extremidad y le propinan un par de patadas, una de ellas en la vagina, que le produce una contusión de mayor gravedad y sangramiento, detalló Rada.

La adolescente perdió incluso el conocimiento estando detenida en la comisaría y entonces deciden trasladarla a un hospital, donde, según la jurista, también ocurrieron irregularidades porque la revisión médica transcurrió delante de la fuerza policial para que la joven no revelara quién la agredió.

“Los abusos policiales que se han generado en las movilizaciones, en el caso de las mujeres, tienen una marcada connotación sexual, constitutiva de una violación a los derechos humanos de las mujeres consagrados en tratados internacionales”, enfatizó la abogada.

(Con información de Prensa Latina)