El economista Norman Girvan destaca hoy el estímulo que representa para el proyecto integracionista de la Comunidad del Caribe (CARICOM) el ejemplo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).

Investigador y profesor de la Universidad de las Indias Occidentales de Trinidad y Tobago, Girvan elogió los rápidos progresos del ALBA y consideró válido aprovechar la experiencia de ese grupo integrador, creado por iniciativa de Cuba y Venezuela, y al que se han sumado Bolivia, Nicaragua, Dominica, Ecuador, San Vicente y las Granadinas y Antigua y Barbuda.

El ex secretario general de la Asociación de Estados del Caribe recordó que en la XI cumbre del ALBA, concluida el domingo último en Caracas, a Haití se le concedió el estatuto de observador permanente y Surinam y Santa Lucía el de invitados especiales permanentes, como paso previo a su entrada completa.

Dominica, Antigua y Barbuda y San Vicente y las Granadinas también formularon su intención de unirse a Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador y Nicaragua en otra iniciativa que es Petrocaribe, remarcó.

Añadió que en su XI Cumbre, el bloque de ocho países aprobó un nuevo proyecto económico más ambicioso denominado Eco-ALBA que prevé impulsar el intercambio comercial en favor del desarrollo de los pueblos.

Para ello en ese encuentro cada Estado miembro acordó aportar el uno por ciento de sus reservas de divisas a la propuesta del Banco del ALBA para contribuir al desarrollo regional, evocó.

Ejemplificó que el aporte de Venezuela será de 300 millones de dólares para crear un fondo de desarrollo común que allanará el camino para una mayor independencia financiera en la región.

Entrevistado por la Caribbean Media Corporation, Girvan describió al ALBA como la agrupación más dinámica y aseguró que su crecimiento debe ser ejemplo y estimular a los otros grupos de integración.

(Con información de Prensa Latina)