Obama llega a Cartagena para cumbre y estallan tres pequeñas bombas
El presidente estadounidense Barack Obama llegó este viernes a Colombia para participar en la cumbre de las Américas, en la que quiere promover el comercio, y pocas horas después de su arribo dos artefactos explosivos de bajo poder estallaron en Cartagena y otro en Bogotá, sin provocar víctimas ni daños materiales.
En Cartagena, una ciudad tomada por 17.000 efectivos policiales y militares, uno de los explosivos estalló en un terreno baldío cerca de un supermercado en el barrio de los hoteles, y el otro en una terminal de autobuses, informó la policía a la AFP.
En Bogotá, el explosivo estalló cerca de la embajada de Estados Unidos.
Obama llegó a Cartagena con las exportaciones estadounidenses como prioridad e inflexible ante demandas latinoamericanas de incorporar a Cuba y de considerar la despenalización del consumo de drogas, a siete meses de la elección presidencial.
Antes de su arribo, Obama hizo una escala en Tampa, puerto de salida de las exportaciones estadounidenses hacia América Latina, donde se reunió con trabajadores, en uno de los estados más disputados con los republicanos, Florida.
“Mientras esté en Colombia hablando con otros líderes (…) estaré pensando en cómo podemos hacer más negocios, acceder a más mercados y más consumidores en la región”, afirmó. “Quiero que vendamos cosas y quiero que haya más trabajo para los estadounidenses”, agregó.
En tanto, algunos agentes del servicio secreto de Estados Unidos fueron regresados a su país, en medio de acusaciones de “conductas impropias” ocurridas antes de la llegada de Obama, informó Edwin Donovan, a cargo del equipo de seguridad, que no especificó las acusaciones.
Según el Washington Post, por lo menos uno de los agentes estuvo involucrado con prostitutas en Cartagena.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, mantenía por su parte este viernes la incógnita sobre su presencia en la cumbre.
“Yo todavía no sé si voy a ir a Cartagena, porque en verdad no lo voy a decidir yo (…) sino los médicos”, afirmó en un acto con sus seguidores para conmemorar su regreso triunfal al poder tras un breve y frustrado golpe de Estado, diez años atrás.
Chávez partirá el sábado hacia La Habana para terminar su tratamiento de radioterapia, dejando abierta solamente una remota posibilidad de un fugaz pasaje por la cumbre.
El presidente ecuatoriano Rafael Correa boicoteó la cumbre en protesta por la no participación de Cuba.
Durante toda la jornada del viernes los jefes de Estado y de Gobierno de las Américas fueron llegando a Cartagena. Sus cancilleres, reunidos en la tarde, no lograron ponerse de acuerdo sobre la declaración final de la VI cumbre debido a que Estados Unidos y Canadá vetaron dos párrafos en los que se proponía invitar a Cuba al próximo encuentro.
Quedará en manos de los presidentes, que inaugurarán la cumbre al mediodía del sábado (17H00 GMT), alcanzar un consenso sobre el texto de la declaración final, indicaron un par de delegaciones.
Por su parte, el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, prosiguió su campaña para abrir un debate sobre la despenalización del consumo de drogas.
En varias entrevistas de prensa Obama reafirmó sus posiciones sobre las drogas y Cuba, en momentos en que arrecia ya la campaña electoral en Estados Unidos.
El presidente boliviano, Evo Morales, pidió directamente a la Secretaria de Estado Hillary Clinton que “en la próxima cumbre invite a Cuba”.
Los países latinoamericanos y caribeños, que se oponen al cincuentenario embargo estadounidense contra Cuba, consideran unánimemente que Cuba debe participar de las cumbres de las Américas, y que su inclusión contribuye más a su democratización, que su aislamiento.
Por otra parte, la iniciativa de debatir la despenalización del consumo de drogas recibe adhesiones en América Latina, cansada de 40 años de una guerra ineficaz que deja decenas de miles de muertos.
Este sábado se cumplirá una minicumbre centroamericana, por primera vez desde la fracasada en Antigua Guatemala en marzo, convocada por Otto Pérez para debatir su iniciativa hacia las drogas.
Los presidentes de El Salvador Mauricio Funes, Nicaragua Daniel Ortega y Honduras Porfirio Lobo boicotearon esa cumbre a instancias de Washington, según denunció entonces Pérez.
“Soy propositivo. Lo que pasó ya pasó, no vamos a seguir discutiendo sobre esos temas, por qué no llegaron, quién influyó… Ojalá podamos abrir ese diálogo conjuntamente”, comentó Pérez Molina en entrevista con AFP que verá a los tres ausentes por primera vez desde la frustrada cita.
Santos y el presidente de México, Felipe Calderón, que lanzó en su país la guerra contra los cárteles que deja más de 50.000 muertos en cinco años, participarán en la reunión de los centroamericanos.
(Con información de AFP)
Haga un comentario.