Un juzgado civil de Santiago abrirá este miércoles el testamento de Augusto Pinochet para calcular el patrimonio real del fallecido dictador chileno y  sus herederos, en el marco de la investigación sobre el origen de su fortuna.

Según las fuentes, el testamento que se revelará fue modificado por Pinochet en 2005, cuando ya era investigado tras el descubrimiento de numerosas cuentas secretas multimillonarias que mantenía en el Riggs Bank de Estados Unidos y otras entidades financieras del exterior.

Entre las propiedades de Pinochet que se repartirán en el testamento hay casas en el barrio santiaguino de Lo Barnechea, una parcela en la localidad costera de Quintero, una casa en las afueras de Santiago, apartamentos en Reñaca, Iquique, Valparaíso y Santiago y tres automóviles.

Un dictador de lujo

Estos inmuebles están embargados por la Justicia, que además congeló 2,6 millones de dólares depositados en el Banco de Chile y vales vista de un banco estadounidense.

La investigación judicial determinó que la fortuna de Pinochet, que murió el 10 de diciembre de 2006, supera los 26 millones de dólares, de los que sólo dos millones tienen justificación contable.

El juez Carlos Valderrama, a cargo de la investigación, explicó a medios locales que la apertura del testamento del dictador es “un acto de carácter civil” que permitirá conocer la distribución de sus bienes entre los herederos, a pesar de que todas las propiedades de Pinochet están embargadas.

Al fallecer, Pinochet estaba procesado en el llamado ‘caso Riggs’ por fraude al Fisco y uso de pasaportes falsos, además de estar desaforado (paso previo al procesamiento) por malversación de caudales públicos.

La hija del dictador, Lucía Hiriart, aseguró por su parte que la apertura del testamento de su padre “es parte de una persecución política”, desmintió la existencia de la presunta fortuna de Pinochet, y dijo que no acudirá a la sesión judicial.

Augusto Pinochet asumió el poder en Chile tras el golpe militar de 1973. Durante los 17 años que duró su régimen fueron asesinados más de 3.000 opositores y más de 35.000 personas fueron arrestadas, torturadas y perseguidas. En 1990 dejó el cargo de presidente, pero durante los 7 años posteriores continuó ejerciendo el mando supremo del ejército, y obtuvo un escaño en el Senado que le dotó de inmunidad. En 1998 España acusó a Pinochet por asesinato de sus conciudadanos. En 2000 la Corte Suprema de Chile privó a Pinochet de su inmunidad, después de que fueran presentados varios cargos contra él por secuestro, asesinato, violación de derechos humanos y corrupción. Ninguno de los procesos concluyó: el 10 de diciembre de 2006 Pinochet murió de un paro cardíaco.

(Con información de Patria Grande)