El Consejo Económico y Social (CES) de España, órgano consultivo del Ejecutivo en materia socioeconómica y laboral, reveló que actualmente un 25 por ciento de los españoles vive por debajo de la línea de pobreza, lo que constituye in incremento porcentual de dos puntos en comparación al año pasado.

En su informe anual, presentado esta semana, el CES alerta que la incidencia de la exclusión social severa en España es la más baja en Europa.

El texto agrega que el desempleo alcanzó, en abril pasado, un récord histórico de 24 por ciento, también el más alto en la Unión Europea (UE). Mientras un 50 por ciento de los jóvenes busca un trabajo y no lo encuentra; confirmando cifras arrojadas por las Naciones Unidas.

En ese sentido, el CES no descarta que, debido a la crisis y las medidas de austeridad del Gobierno español, el desempleo, la pobreza y la desigualdad social se agudicen en los próximos años.

Para el organismo, los recortes en sanidad y educación podrían hacer que la exclusión social pase a ser “crónica” al final de la crisis, con consecuencias “nefastas” para las futuras generaciones.

“Sabemos que hay países donde han fracasado dos o tres generaciones por su sistema educativo y también existen países en los que no nunca se ha dado alguna oportunidad laboral a los jóvenes”, dijo el consejero del CES, Fernando Valdés.

Los datos también muestran que la tasa de acceso a los servicios sociales es muy baja entre los españoles, con uno de cada cuatro hogares en riesgo de pobreza.

El presidente del CES, Marcos Peña, describió la situación del país como “pavorosa” y reclamó un “entendimiento político” entre los poderes públicos, para “repartir los sacrificios” de forma equitativa, algo que “no se está produciendo de ninguna manera”.

“La crisis y las políticas para frenarla tienen efectos negativos sobre la distribución de la renta de los ciudadanos españoles”, denunció.

Finalmente, Peña destacó el valor y los logros del diálogo social en España, que a su juicio “es lo que mantiene la cohesión y evita la escalada de conflictividad”.

En 2008, Europa se vio afectada por una grave crisis financiera de la que no se pudo librar la economía española, hasta caer en una recesión continua desde el segundo semestre de ese año.

El agravamiento de la crisis de la deuda de la Eurozona aumentó los costos de financiación de España, que ahora lucha por no recurrir a un rescate de la UE, tal como ocurrió con Grecia y Portugal.

(Con información de TeleSur)