Desde el surgimiento del Consejo Latinoamericano de Iglesias hace más de 30 años siempre hemos contado con los hermanos cubanos, porque en la isla caribeña si existe la libertad religiosa, afirmó en esta capital el presidente del ente, Julio Murray.

En declaraciones a Prensa Latina, Murray aseguró que quienes hablan de la imposibilidad de profesar cualquier credo son los que están fuera de la nación antillana, y no conocen la realidad de aquí.

Nosotros creemos que Cuba es un testimonio vivo para el mundo en cuanto a la libertad religiosa, expresó Murray.

Las declaraciones del obispo episcopal panameño fueron formuladas luego de que el presidente del Consejo de Iglesias de Cuba, Joel Ortega, divulgara un documento de denuncia contra el gobierno norteamericano, que congeló 101 mil dólares del Consejo Latinoamericano de Iglesias ubicados en una agencia de un banco ecuatoriano en Miami.

Los fondos- subraya el texto- estaban destinados a sufragar los gastos de alojamiento y alimentación de los asistentes al cónclave previsto a efectuarse del 19 al 24 de febrero próximo.

La única razón es que Cuba es la sede, enfatiza el documento, el cual llamó a las Iglesias de la nación caribeña a movilizarse en una campaña para recaudar fondos y apoyar la celebración de la cita.

Ante la política de persecución estadounidense también apelamos a la solidaridad internacional de Iglesias y agencias cristianas con las que mantenemos relaciones fraternales, apunta la declaración.

La posición del gobierno de Washington es éticamente inaceptable, dijo Ortega, quien recordó que se autoproclama como ejemplo de la libertad religiosa en el mundo, pero limita el desarrollo del movimiento ecuménico cubano.

Empero el Consejo Latinoamericano de Iglesias pudo constatar nuevamente lo que significa el bloqueo económico, financiero y comercialimpuesto por Estados Unidos a Cuba desde la década del 60, recalcó Ortega.