Como una muestra de la hegemonía de Estados Unidos en el mundo, percibe la periodista chileno-guatemalteca, Carolina Vásquez Araya, el bloqueo económico, financiero y comercial que Washington mantiene sobre Cuba por más de medio siglo. “Es incalificable, no puedo entender cómo se bloquea a un Estado independiente (Cuba), cuyo único pecado es tener una ideología diferente”, opinó quien se desempeña desde 1998 como directora de Revistas y Suplementos del diario guatemalteco Prensa Libre.

Al respecto, la columnista de ese diario se preguntó con qué derecho se bloquea a un país y se le quita la oportunidad de ser un país económicamente viable.

“Si Cuba no se ha muerto de hambre en estos 50 años es porque realmente ese país funciona, de otra manera no existiría”, subrayó en entrevista exclusiva con Prensa Latina.

Vásquez Araya afirmó que ha escuchado en Guatemala opiniones como estas: “pobres cubanos, no tienen todas las comodidades que tenemos acá en los países capitalistas (que tampoco tienen todas las comodidades que dicen tener)”.

Sostuvo que “por lo general la gente se deja llevar por fórmulas, por la propaganda, la propaganda de Estados Unidos que es demasiado poderosa. Y en general los que opinan, no han estado allí”.

Manifestó que si viajara a Cuba le gustaría escribir una columna o quizás hasta un libro sobre lo que ella pueda obtener de las conversaciones con los cubanos.

Desde 1992 en la Asamblea de Naciones Unidas, el Gobierno cubano presenta una resolución que rechaza el levantamiento del cerco económico contra la mayor de las Antillas, que el año pasado recibió el respaldo de 188, de los 193 Estados miembros de ese organismo internacional.

El vicecanciller cubano, Abelardo Moreno, explicó el mes pasado en La Habana que los prejuicios económicos de esa política estadounidense hasta marzo de 2014 ascienden, a precios corrientes, a 116 mil 880 millones de dólares.

Esto supone un billón 112 mil 534 millones de esa moneda, si se calculan en función de los precios del oro, señaló el funcionario al presentar el informe, que se someterá este mes a la aprobación de la Asamblea General de ONU.

(Tomado de Prensa Latina)