Retransmitirán hoy, La ética sobre la mesa
En el contexto de la programación de verano la Mesa Redonda retransmitirá hoy La ética sobre la Mesa, que salió al aire originalmente el 12 de junio. El programa será transmitido a las 7 de la noche por Cubavisión, Cubavisión Internacional y Radio Habana Cuba. El Canal Educativo lo retransmitirá al final de su emisión del día.
Ante todo, les agradezco la posibilidad que me da la Mesa para hacerle llegar a Nuestro querido Fidel un humildísimo homenaje por su cumpleaños y las gracias por tenerle.
Me disculpo Comandante, porque sin ser poetiza, me he atrevido a escribirle unos versos. Como podrá ver, no riman, pero sí exprezan lo que veo en usted. Creo que nadie mejor que usted mismo para leerlos. Son tres poesías en diferentes momentos, la primera cuando usted, libraba sin descanso la lucha por el regreso de Elian y yo le ví en aquella tribuna y le vi como un gigante.
Sé que conoce de buena poesía y por eso le pido mil disculpas.Le deseo mucha salud y ojalá un día pudiera darle un abrazo.
El gigante gallardo del Turquino (2000)
Esta leyenda la escribo
Para los nietos de mis nietos,
Para los que aman y amarán
De la tierra su sabia,
Y de los hombres su obra.
Esta leyenda la escribo
Allá por el año 3000
Que no parece tan lejano
Estando ya en el 2000.
Esta leyenda no fue leída, sino tallada
En la sangre y en el alma,
En la tierra y en el agua,
Y porque la viví en carne propia,
Me la sé casi de memoria.
Se trata de un gigante bueno
Con barba negra, que subió hasta el Turquino
Blandiendo su fusil con tino
Y entre lomas y llanos, al pobre,
De amor y esperanza llenó las manos.
Las veredas a su paso, transformó en caminos,
Y cuando la pluma cogía mi gigante,
La ternura para el bueno desbordaba a mares,
Y como león, la razón esgrimía para el malo.
De tanto saber, su barba blanca se fue tornando.
Once millones de hijos, tuvo aquí
Y en el mundo, otros tantos.
Nadie tan gallardo como mi gigante,
Dentro de su traje verde,
Nadie tan niño para con el niño,
Siempre dando y dando luz y esperanza.
El insomne vigilante,
De la paz y la justicia.
Y en un día de mil años,
Mi gigante me dejó todas sus riquezas:
Un lápiz, un pupitre,
Un médico, el mar y la tierra donde crecí,
El amor, la luz y la verdad.
Pero lo que más me gusta de mi herencia,
Es mi verde caimán.
Antes de regalármelo,
Lo pintó de sol y de sonrisa.
Y, al dármelo me dijo así:
No dejes que nadie te lo quite,
Compártelo con los demás,
Para que crezca grande como el mundo
Y extienda su luz.
Por eso, hoy,
No tenemos fronteras, sino caminos,
En el mar y las montañas.
Y una sola raza,
La raza humana.
Unos le llaman leyenda en el 3000
Al gigante de la libertad y la justicia,
Al que nació para siempre vivir,
Al hombre más real de los hombres de la tierra,
Que nació en una isla pequeña,
Que él transformó en faro del universo,
Durante la era en que yo viví.
Al Compañero Fidel en su cumpleaños
(12de agosto, 2014)
Fidel anda conmigo y vive conmigo,
Fidel está en todas partes,
Está en el campo y en el parque.
Fidel se sienta en el pupitre
De un niño que será ingeniero.
Fidel corre de pelotero,
En los campos deportivos.
Fidel siembra futuro,
En los hijos de ahora,
Fidel construye veredas,
En toda la América Latina.
Fidel es soporte del África desvalida.
Es médico sin gentilicio.
Fidel es puerta para el necesitado,
Es pensamiento, es esperanza.
Fidel es faro en la noche campesina,
Es la cosecha que espera la pampa americana.
Fidel es la paz que busca el guerrillero;
Es el viaje y el destino del joven obrero.
Fidel es el sueño anhelado,
De los hombres buenos.
Fidel es canto y es luz,
Para un mundo sin miserias.
Fidel es de la justicia, su Victoria.
El ser humano más humano que conocí
(A Fidel en su 89 cumpleaños, Agosto, 2015)
Hasta donde la mente logra recordar,
A la memoria asoma tu figura gallarda,
De hombre inmenso,
Que surges de todas partes,
En la escuelita de una montaña,
En una casa pobre, en la fábrica.
De la portada de Bohemia,
Un cuadro le hizo mi padre,
Y también mi maestra,
A tu figura inmensa,
Cuando llevabas la mochila acuestas.
Así aprendimos a quererte,
Aprendimos a admirarte, a respetarte.
Maestro en tu discurso, faro en tu acción.
El hombre más humano que conocí,
Confiaste a la historia tu absolución.
Juez de los desamparados de la tierra,
Quitaste fronteras a los continentes.
Para salvar generaciones,
Del hambre y de enfermedades,
Y del mal peor, de la ignorancia.
Gladiador invencible de ideas.
Desvelado porque el tiempo no alcanza.
Insomne defensor de sueños.
Ahora recorro mi memoria,
Casi no logro alcanzar tus dimensiones
Andas por África y por Asia andas;
Por Europa y América entera.
Con vestido blanco y cartilla de maestro,
Construyendo caminos,
Defendiendo el aire.
El azul del cielo, defendiendo.
Cabalgarás siempre mi gallardo guerrillero,
Al lado de la justicia,
Empujando a los buenos de la tierra.