Cuba, los del frente y nuestros símbolos
Hoy en la mañana cuando caminaba hacia el trabajo una hermosa bandera cubana colgaba de la puerta de punto de venta de Artex que se ubica al final del Boulevard, esquina Juan Bruno Zayas, su precio entre 23- 50 cuc, eso es más que el salario promedio en Cuba, eso es más que mi salario. Pero este precio tan caro, caro para los cubanos, no lo es para la mayoría de los extranjeros que visitan nuestra ciudad, la bandera, hermosa, se construye en esta isla para vendérsela a los extranjeros, no a los cubanos, y eso es un error que estamos pagando en este momento.
Y la imagen llamó mucho mi atención porque hace muy poco asistí a una conferencia del periodista, bloguero y director de televisión Iroel Sánchez, en la que de manera muy coloquial, se resumieron dos cosas, los cubanos no tenemos bien claros, o no utilizamos nuestros símbolos culturales como debiéramos, y segundo, utilizamos demasiado los norteamericanos, casi siempre su insignia nacional.
Las causas muy sencillas, el flujo interminable entre ambas naciones ha ayudado mucho a esto, los vecinos del frente son muy finos difundiendo sus valores, y nosotros los cubanos no lo hemos sido tanto, y no solo porque hemos dejado la bandera fuera del alcance del cubano de a pie al venderla a precios tan altos, si no porque no hemos aprovechado la riqueza de nuestra historia, por ejemplo, desde cuando no se hacen nuevos episodios de Elpidio Valdés, ¿por qué no difundir esta imagen en mochilas, atributos escolares, con el objetivo de hacer simple y cotidiana su imagen para los niños y adolescentes de hoy?…los Cinco son un símbolo en Cuba, como lo fue Elián en su momento, los barbudos, el uniforme verde olivo… eso tenemos que potenciarlo, y creo que todavía estamos a tiempo de hacerlo.
Pero para lo que no nos queda tiempo ya es para impedir la penetración de símbolos propios de la cultura norteamericana en la nuestra, no solo por el uso de la bandera en prendas de vestir, analice usted muchos de nuestros videos musicales o simplemente el cine que se trasmite por nuestra televisión.
En mi modesta opinión el camino no está en prohibir, las políticas no pueden ir en contra de lo cultural, si no en fortalecer lo nuestro, lo de raíces mambisas, porque Cuba es más que mulatas, tabaco y ron. Por qué no vender banderas a precios asequibles, por qué no comercializar pulóveres con este tipo de motivos también a precios bajos, organizar concursos a nivel escolar y no quedarnos solamente en el hecho de conocer el significado de los colores de nuestra insignia nacional, el símbolo para que verdaderamente sea efectivo a nivel de sociedad, se debe llevar en el corazón.
(Tomado de Telecubanacan)
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