Disminuye un 90 % el número de balseros desde Cuba a Estados Unidos
“Los cubanos van a seguir tirándose al mar”, nos decían en Univisión, como en tantos otros canales internacionales, tras la derogación, el pasado enero, por parte de Barack Obama, de la llamada “política de pies secos, pies mojados”, que acogía a todo migrante cubano que llegara a EEUU.
El Gobierno de La Habana llevaba años reclamando el fin de semejante privilegio migratorio, por incentivar la emigración irregular y provocar la muerte de personas en el Estrecho de la Florida.
Pues bien. Hace unos días, leíamos sendas notas de agencias internacionales sobre este tema.Associated Press publicaba que, tras el fin de la política de acogida automática, el número de balseros de Cuba ha caído de 25 al día a 20 por mes. Es decir, más del 97 %. La agencia Reuters, por su parte, indicaba una disminución del 87 %. Y añadía que “ahora, los dominicanos son mayoría entre los migrantes interceptados en el mar”.
En ambos casos, parece una prueba clara de que la denuncia de La Habana era cierta. Y señal de que, sin privilegios exclusivos, la emigración cubana a EEUU –legal o ilegal-, aunque seguirá produciéndose, cada día será más parecida a la del resto de países de su entorno.
Durante años, grandes medios han mentido sobre las cifras de la emigración cubana en EEUU que, según las propias estadísticas de la Casa Blanca, es de 1,2 millones de personas . No son 2, ni 3 millones, como siguen asegurando no pocos medios internacionales. La cifra estadística, además, admite pocas dudas, ya que, a diferencia de otras nacionalidades, hasta ahora apenas existían migrantes cubanos “sin papeles” y, por tanto, difíciles de cuantificar.
Sin embargo, la bajada espectacular que aportan las citadas agencias no parece haber sido del interés de los mismos medios que, tan puntualmente, nos han venido informando de cada repunte de la emigración cubana. Solo lo leíamos en el diario progresista de México La Jornada.
Por su lado, los medios “anticastristas” de Miami y Madrid, financiados por el Gobierno de EEUU, que han publicado algo sobre el asunto, han camuflado con todo descaro este descenso exponencial de balseros. Para ello, han desviado la atención informativa hacia aspectos anecdóticos, como el mayor uso de lanchas rápidas en las travesías ilegales. Para concluir que “el movimiento de emigrantes vía marítima (…) no ha cesado”, pese al fin de la política de `pies secos, pies mojados´”. Exactamente, no ha cesado. Pero se ha reducido –aunque no lo quieran decir- en un 90 %.
Así es como se nos informa sobre Cuba –o sobre Venezuela- cada día: mintiendo, exagerando, y en otras ocasiones… callando.
(Tomado de La Pupila Imsonne)
Me alegra mucho esta noticia, amen de lo que puedan seguir comentando los ciegos de con ciencia, esa disminución además significa igual porcentaje de disminución de muertes en la travesia, incluso de inocentes, ojala los acuerdos entre ambos paises logren erradicar totalmente ese mal, solo que al parecer, o casi seguro, el nuevo mandatario de EUA no está entre los interesados.
Los medios anticubanos esconden siempre la verdad, no es de extrañar que esto suceda. Porqué van a querer hacer publicidad de una noticia que los dejaría mal parado. La cantidad de cubanos que ahora emigran por esa vía se reduce al mínimo, es decir, se reduce al número real que en un clima normal de respeto a leyes migratorias entre paises sucedería, – como ocurre en la actualidad entre EUA y Cuba (aunque la Ley de ajuste cubano no se ha derogado), y no como antes en que el tema de la emigración cubana era un show de propaganda contra Cuba al decir que los cubanos salían porque en nuestro país se violaban los derechos humanos y unas cuantas sandeces más.
La realidad es que en nuestro entorno regional, Cuba no es de los paises con peores condiciones económicas, eso cualquier cubano que haya viajado al exterior por el caribe y centroamérica se dará cuenta, pues entonces no será de extrañar que los cubanos no sean esa gigantesca masa de pueblo que arribe a la frontera del norte.
Ellos, los que nos desean derrotados no darán la noticia, esa noticia la tenemos que dar nosotros por todas las vías posibles.
Ellos mienten, exageran y callan, sobre Cuba y nuestra amiga Venezuela, nosotros tenemos que decir la verdad, no exagerar y no quedarnos callados nunca. La verdad hay que repetirla sin cansancio.