El bloqueo económico, financiero y comercial del gobierno de Estados Unidos contra Cuba dificulta y encarece la atención a personas aquejadas de insuficiencia renal crónica que demandan tratamiento de hemodiálisis.

A pesar de esa situación se realizan esfuerzos para que ninguno de los más de 120 pacientes con esa enfermedad en la provincia de Sancti Spíritus, al igual en todo el país, queden desprotegidos dada la hostil política estadounidense.

El doctor Remberto Cruz Pérez, jefe del Servicio de Nefrología en el hospital general Camilo Cienfuegos, en esta ciudad, dijo a la ACN que el tratamiento de hemodiálisis aunque gratuito en Cuba es, de hecho, muy costoso.

Pero, explicó, se encarece más porque las máquinas (riñones artificiales) que se utilizan en ese proceder médico se adquieren en Europa, al igual que los insumos y piezas de repuesto, por lo que el flete es más caro que si se compraran en Estados Unidos, operación comercial que a nuestro país le está negada.

En el informe que Cuba presentará este miércoles ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, se mostrará de forma sintética las afectaciones de la aplicación de esa política entre abril de 2016 y junio de 2017.

Según el documento, los principales daños causados al sistema de salud cubano en correspondencia con la actitud norteamericana están dados por dificultades para adquirir en  mercados estadounidenses medicamentos, reactivos, piezas de repuesto para equipos de diagnóstico y tratamiento, e instrumental médico, entre otros insumos.

De acuerdo con datos de publicaciones internacionales, cada riñón artificial empleado en hemodiálisis cuesta en el mercado mundial unos 18 mil dólares, y las diálisis están valoradas en alrededor de 200; el gasto de estas últimas en Cuba se calcula en 325 pesos en moneda nacional.
Ese estimado en el archipiélago, sin contar el precio de la transportación (también gratuita para los pacientes), para el tratamiento mensual a un enfermo es de dos mil 400 pesos, teniendo en cuenta que necesita 12 sesiones en ese lapso.

Recientemente en el hospital Camilo Cienfuegos, y en función de las hemodiálisis, se montaron una potabilizadora de agua y una moderna planta de tratamiento de este líquido, con un costo de ambas instalacionesde casi medio millón de euros, según expresó el jefe del Servicio de Nefrología.

Carlos Cruz Quintero, jefe del Grupo Comercial y Operaciones en la Unidad Empresarial de Base Taxis Sancti Spíritus, manifestó que de los 127 autos con que cuenta la entidad diariamente se destinan 40 al traslado de quienes requieren hemodiálisis.

Acotó el directivo que el costo de transportación (200 mil pesos mensualmente) lo asume el Ministerio de Salud Pública, de esos vehículos que recorren cada día más de siete mil kilómetros con un consumo de combustible que sobrepasa los 700 litros.

Mario Martínez Ulloa mostró satisfacción tanto por la calidad del servicio que recibe de forma gratuita, al igual que  distintos tipos de vitaminas, y alimentación fortificada, como por la transportación en taxis de ida y regreso a su hogar tres veces por semana.
Si no fuera por esas gratuidades los pacientes no pudiéramos tratarnos esta enfermedad, aseguró Martínez  Ulloa, quien desde hace tres años recibe el vital tratamiento.