Gestión eficiente en las inversiones hacia el acceso de agua potable y saneamiento en Cuba
Las 15 capitales provinciales del país se benefician con proyectos de financiamiento externo que complementan la prioridad del presupuesto del Estado para mejorar el acceso al agua potable, el saneamiento y disminuir cargas contaminantes en aguas terrestres, se conoció en la segunda jornada de la Convención Cubagua 2019, que hasta mañana se realiza en el Palacio de Convenciones y sus áreas expositivas en Pabexpo.
Anualmente en Cuba se destinan más de 400 millones de pesos en inversiones para el sector agua, una preeminencia que se mantuvo aún en los momentos más difíciles del periodo especial, por lo que significa la disponibilidad de ese recurso finito en la calidad de vida de la población y su disponibilidad con destino a las actividades agrícolas e industriales, entre otras.
A tales esfuerzos se integra la presencia de organizaciones internacionales que aportan créditos blandos, a pagar entre 15 y 20 años, y donativos por un monto inferior a los dos millones de dólares, que son distribuidos de acuerdo con las estrategias del plan hidráulico nacional.
De ahí que en la cartera de proyectos, para ejecutar préstamos a largo plazo, se incluyeran recientemente las ciudades de Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Artemisa, Mayabeque, Santa Clara y Pinar del Río; además de otras importantes localidades como Palma Soriano, Baracoa, Trinidad, y Cárdenas, precisó a la prensa el Máster Fermín Sarduy Quintanilla, director de Relaciones Internacionales y Colaboración del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH).
Durante un encuentro con representantes de fuentes financieras foráneas con las cuales el organismo mantiene relaciones bilaterales, fueron expuestos resultados como la realización en La Habana, a partir de 2015 y hasta febrero del actual año, de inversiones por 30 millones de pesos que beneficiaron a 1,2 millones de habitantes.
Se destacó que en la ciudad de Cárdenas, con un año de trabajo, mejoraron las condiciones de abasto de agua potable para unas 55 000 personas. El proyecto debe concluir en 2020 y constituye también un notable aporte al eliminar dificultades en el saneamiento y en el drenaje pluvial.
Sarduy Quintanilla recalcó la contribución de diversos organismos de la administración central del Estado para la consecución de ese tipo de financiamiento y la importancia de que el INRH lo materialice con agilidad y calidad.
Por su parte, el ingeniero Ricardo Limias Díaz, director general de Desarrollo de Infraestructura del INRH, acotó que con las inversiones que se llevan a cabo cada año, incluidos esos aportes externos, como promedio se benefician más de un millón de personas en los servicios de saneamiento y de agua potable, tanto en cantidad como en calidad.
Haga un comentario.